Con una mezcla de sensaciones, debido a que no pudo vencer como local pero al mismo tiempo se pudo empatar un partido que se empezó perdiendo, el entrenador de San Lorenzo de Las Perdices, Heraldo Pereno, comenzó el análisis de la primera final diciendo que “a lo mejor en el primer tiempo abusamos mucho del pelotazo, no jugamos por abajo, siendo que el fuerte del rival es la pelota aérea, ya sea defensiva u ofensivamente. Tal es así que el gol de Argentino llegó por esa vía”.

“En el segundo tiempo buscamos atacar con un poco más de profundidad. Por eso pusimos un delantero más y todo lo que teníamos de mitad de cancha para adelante para dar vuelta el partido, pero no se pudo”, sostuvo.

Seguidamente, lamentándose a causa del penal marrado por Cesarini, expresó: “Tuvimos la oportunidad al final de ponernos en ventaja, pero el fútbol es así. En los penales puede pasar cualquier cosa”.

“Si lo convertíamos ganábamos, porque faltaba muy poco, pero no pudimos hacerlo”, volvió a lamentarse.

En otro orden, sobre la intensidad con la que se disputó el duelo de ayer, señaló que “sabíamos que era una final y que en este tipo de partidos a veces no se puede jugar bien, pero hay que lograr resultados”.

“En un principio nos costó adaptarnos a lo que era una final, en algunos jugadores de menos experiencia, pero después en el segundo tiempo fueron agarrando ritmo”, profundizó.

De cara a lo que se viene, con mezclas de optimismo y preocupación, indicó: “La serie está abierta, pero me preocupa la lesión de Pedro Mancilla. No sé qué irá a pasar con él, pero veo muy complicada su rodilla”.

“El resto del plantel está todo a disposición, así que trabajaremos tranquilos en la semana sabiendo que tenemos la chance de ganar o de empatar y estirar la definición a un tercer partido”, señaló.

Volviendo al análisis del partido, opinó: “Tuvimos algo de mala suerte, primero un remate de Ellena en el travesaño con el arquero vencido y luego un tiro en el palo de Bolatti, pero en algún momento del torneo la suerte estuvo de nuestro lado”.

“Me duele que no hayamos podido meter el penal, porque se hubiese quebrado el partido”, indicó apenado por tercera vez.

También pensando a futuro manifestó que “quizás Argentino llegue mejor anímicamente a la revancha, pero nosotros hemos sacado buenos resultados como visitantes y vamos a intentar lograr uno bueno en Villa María”.

“Ya hemos conocido un poco al rival, porque hasta el momento no lo habíamos enfrentado, así que trataremos de fortalecer a nuestros jugadores y de hacerles dar cuenta de que tenemos que ir a la cancha de Argentino a jugar de igual a igual”, dijo.

Por último, el entrenador perdiceño declaró: “Sabemos que la cancha de Argentino es más grande que la nuestra y que el recorrido que hay que hacer allí es mayor, pero nosotros vamos a seguir jugando a lo nuestro”.

“Merecimos un poco más”

A su término, el experimentado atacante Gastón Moyano resumió el partido diciendo que “quizás se metió más de lo que se jugó, pero así son las finales y todo lo que pasó queda dentro de la cancha. Estos partidos se juegan al máximo y todos tenemos las pulsaciones muy altas”.

“Creo que al árbitro por momentos el partido se le fue de las manos. En cada jugada que cobraba para nosotros, 10 personas de Argentino se metían a pegarle”, criticó.

A la vez expresó que “quizás merecimos un poco más, porque pegamos dos tiros en los palos y erramos un penal, pero en el fútbol no hay merecimientos e igual que lo hicimos en nuestra cancha saldremos en Villa María a ganar el partido”.

“Sabíamos que la pelota parada era un arma importante del rival. Cuando se juega ante equipos de este calibre, si te equivocás en una jugada, hay que ir a buscar la pelota al fondo del arco”, hizo autocrítica.

Al mismo tiempo dijo que “estamos tranquilos porque creo que en el balance de la primera final fuimos un poco más que el rival, pero obviamente eso no alcanza”.

“Ahora queda un partido más y trabajaremos en la semana para ganar en Villa María”, sostuvo. También opinó que “creo que pudimos aprovechar la superioridad numérica que tuvimos tras la expulsión de un rival, pero lo que nos faltó fue plasmar esa situación en el arco contrario”.

“Nos vamos tranquilos sabiendo que dejamos todo, pero también sabemos que nos queda un partido más y lo vamos a salir a ganar”, aseguró.

En cuanto a su actuación personal, comentó: “Hoy me tocó bajar más a buscar la pelota y jugar más de espaldas al arco, pero ese es el trabajo que tengo que hacer cuando no se da la oportunidad de tener jugadas claras y hay que colaborar con el equipo”.

“Estoy contentó porque el equipo intentó, jugó y porque no se perdió, algo que también es importante”, valoró y terminó diciendo: “Siempre hay cosas por corregir y en la semana que se nos viene tendremos que trabajar en distintos aspectos, un poco en lo físico, lo futbolístico y en este tipo de definiciones más que nada en lo mental”.

“Nunca resignamos la actitud”

Por otra parte, el defensor Daniel Berterame fue contundente al analizar que “fue un partido muy parejo, muy trabado y se terminó definiendo en jugadas con pelota parada”.

“Tuvimos dos tiros en los palos, pero el rival aprovechó la situación que tuvo para lastimarnos”, lamentó.

A la vez aseguró que “nunca resignamos la actitud. Cuando fuimos perdiendo siempre fuimos a buscar el partido, porque queríamos demostrar que lo podíamos ganar”.

“En varios momentos del encuentro pensé que podíamos ganar, más que todo en el momento del penal, pero lamentablemente la pelota no quiso entrar”, fue sincero.

Para finalizar señaló: “No pudimos plasmar en el resultado la superioridad numérica porque el rival se paró bien atrás y en el medio, dejó un solo delantero y nosotros no supimos cómo entrarle”.

“Tenemos que estar tranquilos de cara a la revancha, porque sabemos que nos queda una chance más para lograr el campeonato”, redondeó.