
En todos los casos los hechos delictivos terminan en destrozos, pero no sobrevienen otras acciones. Entonces la pregunta es ¿por qué rompen los vidrios?

Al menos tres nuevos hechos vandálicos ocurrieron durante las últimas horas, todos de similares características, se reiteraron en Villa María, uno de los cuales fue informado por la Unidad Departamental San Martín pero no así otros dos ocurridos en un jardín de infantes y en inmediaciones del estadio municipal de fútbol.
En todos los casos, como se adelantó, se trata del accionar de los “rompevidrios”, episodios reiterados que, cuando menos, provocaron daños materiales e inseguridad entre los vecinos.
Un jardín de infantes
Quienes se vieron sorprendidos por la actitud de los vándalos fueron, durante las primeras horas de la mañana de ayer las docentes, padres y niños del Jardín de Infantes de la Escuela Paraguay, quienes al llegar para retomar las actividades tras las vacaciones de invierno encontraron destrozados los cristales de dos aberturas.
Valiéndose de objetos contundentes (“cascotes”, precisó una docente) los dañinos rompieron los vidrios de una ventana de la sala de 4 años y otro cristal de la entrada al edificio, situado en la sexta cuadra de calle Chile en el sector Centro norte de Villa María.
Una concesionaria
En tanto, a las 2.30 de ayer la Patrulla Preventiva debió constituirse en el local de la concesionaria de autos GD, situada al 1140 de bulevar Sarmiento (prácticamente al lado del Centro Cultural), donde un individuo que se movilizaba en una moto provocó daños en uno de los vidrios del frente.
En este caso, la Policía informó que un vecino dio cuenta que un desconocido que vestía ropa oscura, tenía colocado un casco protector negro e incluso se desplazaba en una moto Honda Wave del mismo color, aunque sin patente, descendió del rodado y rompió arrojando un objeto contra parte de la vidriera del local comercial.
Poco después, mediante un operativo cerrojo, los uniformados lograron aprehender a un sujeto de 29 años, domiciliado en Villa María, quien fue trasladado a la sede policial acusado de ser el supuesto autor de daños en flagrancia.
La detención se registró a la altura del 1300 de calle Piedras, en barrio Rivadavia, y en la oportunidad los agentes secuestraron el rodado en el que circulaba.
Un auto
Por otro lado, los “rompevidrios”, que en ningún caso se apoderaron de bien alguno, también dañaron los vidrios de un auto que estaba estacionado sobre calle Sabattini, enfrente al estadio municipal Manuel Anselmo Ocampo.
Cabe recordar que hace pocos días se registró un hecho similar en una cuadra de calle San Juan, también en la zona comprendida dentro del cuadrante norte del sector céntrico.