Con una conquista de su principal figura, Atlético Ticino derrotó 1 a 0 de visitante a Playosa y alcanzó a Juventud de Ausonia en la cima de la Zona Sur

Escribe: Daniel J. Cerutti

Fue un partido sumamente disputado, donde Atlético Ticino supo aprovechar las serias deficiencias del elenco “Albo” en la definición y así obtuvo una mínima diferencia de 1 a 0 que constituyó un real castigo para el equipo de Germán Vicario y destacable premio para el que usufructuó los momentos favorables del mismo.

Un encuentro que se planteó con elogiables intenciones ofensivas, donde el estilo de ambos era la búsqueda permanente del área adversaria. Más homogéneo y dispuesto en sus arrestos Playosa desde el comienzo, que tuvo dos opciones claras antes de los 10’, con defectos marcados en la definición por parte de Mauro Luna y Alexis Acosta, que marraron en posición harto favorable.

El “Rojiblanco” respondió con un frentazo de Coria bien conjurado por Garetto. En realidad nadie cedió posiciones en el rectángulo de juego, buscando frustrar el armado del adversario. A pesar de ello, el criterio de fijar proyección continua hacia las áreas otorgaba interés al devenir del encuentro. En los aportes de cada uno, siempre Playosa se mostró como una fuerza más compacta, ejerciendo predominio con correcta disposición de sus mediocampistas, y el buen panorama de Servetti para hacer partícipes a sus compañeros de ataque. A los 22’ Wady Torres desperdició otra chance muy favorable, al rematar desviado a dos metros de Fantino, prácticamente sin defensa. El “Albo” siguió ejerciendo presión en el mediocampo, fijando nivel futbolístico superior a su oponente, más inhibido en sus intentos; siendo perceptibles las exigencias constantes para los defensores del huésped, correctamente conducidos por Lorca y Bettiol.

A los 35’ volvió el local a crear otra situación propicia, aunque nuevamente la imprecisión de Luna en el toque final impidió la apertura del marcador, en ese entonces netamente merecida para la producción de Sportivo Playosa; cuya única faceta negativa en la evolución del cotejo, fue su incapacidad de convertir innumerables situaciones que se le presentaron. Sobre el final del período, nuevamente Torres perdió otra oportunidad al conectar deficientemente en posición frontal a la ubicación de Fantino, quien detuvo el envío del atacante albo.El equipo ticinense produjo escasas jugadas de peligro, generalmente por intentos de larga distancia que no le arrojaron beneficio alguno. El local contó por lo menos con cinco oportunidades plenas sin convertir, aspecto que significó marcado déficit en Playosa, y que le impidió irse como ganador en el primer parcial.

En el segundo tiempo, luego de unos minutos de equilibrio, llegó a los 8’ la jugada que en el transcurso de la brega fue claro castigo para la falta de gol en el local. En proyección por sector izquierdo, Fassi y Bertola se llevaron a la rastra a los defensores albos, y el disparo hacia el centro del área fue conectado con certero toque por Ayrton Páez, que se introdujo en el arco luego de rozar la parte interna del travesaño, por sobre el cuerpo de Garetto e impidiendo toda respuesta de este.

Así, la frustración de no poder convertir en Playosa se revirtió en la contundente respuesta del adversario, quien logró la apertura sin haber hecho mérito alguno para conseguirla. La conquista del hábil jugador visitante produjo un bajón anímico lógico en el conjunto de Germán Vicario, que entró en la desesperación; siempre mala consejera en estas circunstancias.

Por su parte Ticino, a través del correcto funcionamiento del mediocampo y la conducción del goleador, equilibró el curso de la brega. Luego de la expulsión de Mauro Luna en Playosa (en infantil actitud dio un puntapié a un jugador caído que también debió ser expulsado), el anfitrión no logró (salvo algún chispazo de Servetti) ni con los cambios modificar su esquema ofensivo; y el dominio ejercido anteriormente se perdió permitiendo la reacción del adversario. Los últimos minutos transcurrieron en clima de nerviosismo, favoreciendo los propósitos del visitante, quien sobre el final casi consigue el segundo con disparo de Fassi bien controlado por Garetto.

Finalmente fue triunfo del Atlético Ticino, quien aprovechó con concepto más pragmático de juego y en el segundo período, los desaciertos del albo en la concreción; aspecto que le facilitó enormemente los planes. Sportivo Playosa hizo méritos más que suficientes para conseguir un mejor resultado, su incapacidad a la hora de convertir fue el factor crucial que le costó el partido.

Así, el elenco ticinense se llevó tres puntos de significación para figurar alto en las posiciones de su grupo.

La figura: AYRTON PAEZ: No descolló, pero fue el arma principal con la que contó el Atlético Ticino para su reacción en el segundo tiempo. Convirtió el gol de la victoria con exquisito toque sobre la oposición de Garetto. Además organizó el funcionamiento del ganador en las instancias principales de su exigente performance.

El árbitro: MARCOS ZEHNDER: Mala actuación. Cometió errores en algunas sanciones, como el penal que obvió por mano en el área de Ticino, en el primer tiempo. Dejó hablar demasiado a los jugadores, perdiendo autoridad y generando confusión con sus decisiones. En la expulsión a Mauro Luna debió repetir la misma actitud con un jugador visitante. Además, el partido sufrió demoras en su desarrollo que requerían más minutos de descuento.