Inicio Locales A diez años de la inauguración del Juzgado Federal en Villa María

A diez años de la inauguración del Juzgado Federal en Villa María

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A diez años de la inauguración del Juzgado Federal en Villa María
El Juzgado Federal que tuvo al frente desde el inicio a Roque Ramón Rebak, quien luego de un año de trabajo en Córdoba (durante el que fue sustituido por el juez Mario Garzón) regresó a la ciudad y permanece a cargo

2008 – 12 de septiembre – 2018

Hubo muchos intentos para que la Justicia Federal tuviera sede en la ciudad. Había algunos datos de la realidad que jugaban en contra. Pero la perseverancia y el trabajo asociado entre varias instituciones -emulando lo realizado años antes para la creación de la Universidad Nacional-, lo hizo posible

Escribe Dr. Miguel Sponer (*)
Especial para EL DIARIO

A partir de 1995, comenzó a rondar en la mente de algunos hombres de leyes y dirigentes políticos y sociales de la ciudad, la idea que sostenía que “ya era hora” de que Villa María contara con su Juzgado Federal.

Había un dato insoslayable: la cercanía con la hermana ciudad de Bell Ville, donde ya funcionaba una sede de la Justicia Federal, por entonces a cargo del magistrado Edgardo Filippi. Y no era un dato menor el que conjuraba para que el “sueño villamariense en la materia” fuera para algunos solamente una utopía.

Se comenzó a recabar información a realizar consultas y, de todo ello, surgió otro dato significativo: un alto porcentaje de las causas que tramitaban en aquel Juzgado Federal, tenían origen casos ocurridos en Villa María y su jurisdicción.

Fue recién en el mes de mayo del año 2003, cuando se reflotó en el Parlamento nacional un proyecto que habían tenido a bien presentar en la década anterior  los diputados cordobeses Guillermo Johnson y Arnoldo Lamisowsky, solidarios con la “causa de Villa María”. La iniciativa dormía en los archivos del Congreso nacional, pero con el aval de los mismos Johnson y Lamisowski, se le quitó el polvo de encima y se puso nuevamente “sobre la mesa”.

Junto con el ahora intendente municipal Martín Gill, con quien integrábamos el bloque de concejales del bloque Justicialista y el resto de los ediles, empezamos el trabajo de reunir voluntades para  poder hacer  realidad aquel sueño que algunos tomaban como utopía: el de contar con nuestro Juzgado Federal.

Se creó entonces la Comisión Pro Juzgado, integrada por la Municipalidad, el Concejo Deliberante, el Colegio de Abogados de la ciudad, la Universidad Nacional Villa María (UNVM), la Facultad Regional de la Universidad Tecnológica Nacional de Villa María (UTN), la delegación de la Policía Federal y la Asociación de Empresarios de la Región Centro Argentino (AERCA), entre otras instituciones públicas y privadas.

La Comisión Pro Juzgado cual motorizaba cada semana el seguimiento del tema y todo lo concerniente a los pasos efectivos para que el objetivo trazado tuviera en sus etapas el acompañamiento necesario en las diferentes etapas para su concreción.

Fueron jornadas de trabajo mancomunado, de largas y repetidas reuniones y viajes a la Ciudad de Buenos Aires para explicar el porqué de nuestra iniciativa, a todos y cada uno de  los legisladores nacionales de ambas cámaras relacionados a las comisiones intervinientes,  especialmente la de Justicia. No quiero dejar de destacar en este párrafo la destacada y apasionada tarea desarrollada por aquel entonces por quien ocupaba la  presidencia del Colegio de Abogados de nuestra ciudad, Diego Sobrino.

Cuando el presidente de la Nación Néstor Kirchner dio su aval al proyecto, entendimos que el sueño estaba al alcance la mano. El mandatario nacional también dijo “sí” a la creación de otro Juzgado Federal para la hermana ciudad de  San Francisco.

Si bien a partir de ese momento las cosas fueron más fáciles, no debemos dejar de mencionar ni de resaltar la férrea defensa en comisiones parlamentarias realizadas por los legisladores Johnson, Julio Conte Grand y tantos otros que la memoria me empaña… quienes junto a su par, María del Carmen Falvo, encontraban los argumentos justos, válidos, para sumar a otros integrantes de distintas bancadas a “la cruzada villamariense”.

Fue así como en el recinto de la Cámara de Diputados, a las 21 del miércoles 20 de octubre del año siguiente (2004), se aprobaba la creación del mismo y dejaba a menos de un mes, también en la Cámara de Senadores, su  aprobación definitiva bajo la Ley 25.970.

Más allá de algunos nombres que no se pueden obviar, hay que decir que fueron muchos los que participaron para que este viejo anhelo fuera realidad… Políticos de distintos partidos, ciudadanos, maestros, periodistas…

Se demostró una vez más lo que es capaz de conseguir una comunidad social organizada cuando se trabaja de manera mancomunada por el bien común y con la dirigencia a la cabeza a partir de una férrea decisión política. Había un modelo a seguir, aplicado una década antes, para hacer realidad el sueño de contar con la ley de creación de la UNVM.

También es para destacar el trabajo de la exintendenta Nora Bedano, para lograr todo lo concerniente a la puesta en marcha del juzgado, como la del exintendente Eduardo Accastello, que fue uno de los que desde un principio apoyo la iniciativa.

Desde la sanción de la citada  Ley 25.970 pasaron cinco años hasta el 12 de septiembre de 2008 quedó formalmente inaugurado el Juzgado.

Hoy, los villamarienses tenemos que estar orgullosos de ese hito en nuestra historia, que beneficia no solo a la ciudad sino la región toda.

Es un orgullo haber servido desde una banca en la que se debe trabajar por mejorar la vida de los vecinos, para lograr algo tan importante.

Y, si se me permite, ¿cómo no  estar contentos hoy? Si avanzamos y fuimos y somos parte de esta querida comunidad.

(*) Exconcejal de la ciudad

 

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