
Las educadoras, que fueron acompañadas por el equipo directivo de la institución, presentaron la experiencia que desarrollaron en las salas de 2 años (Jardín Maternal) en un encuentro que contó con la participación de dos mil asistentes

La comunidad educativa del Jardín Doctor Antonio Sobral tiene otro motivo más para sentir orgullo. Es que, durante el pasado fin de semana, un grupo de docentes de las salas de 2 años (Jardín Maternal) junto al equipo directivo de la institución, participaron como disertantes en un encuentro internacional de educadores que se realizó en Buenos Aires.
La actividad, denominada «Noveno Encuentro Internacional de Educación Infantil», organizada por la Organización Mundial por la Educación Preescolar (OMEP), durante esta edición hizo foco en «El cuerpo en juego en la educación de la primera infancia».
Precisamente, los impulsores de las jornadas de relieve internacional seleccionaron el trabajo de las docentes locales, evaluaron el mismo y definieron que fuese puesto a consideración del público, a través de un panel que completaron educadores del Valle del Cauca (Colombia), San Pablo (Brasil), Ula (Colombia), Campana y Capital Federal.
El encuentro, que contó con la participación de dos mil asistentes, resultó altamente significativo para las autoras de la experiencia educativa «El gallo pinto no pinta, el que pinta es caracol – Caracoles en amarillo y negro», del cual participaron 84 niños de la sala de 2 años, directivos y docentes del Jardín Sobral en el año 2015.
Es importante mencionar que las autoras del proyecto son la licenciada Beatriz Britos (directora), la profesora Grasiela Carreras (vicedirectora) y las profesoras de sala Daniela Carnevale, María Eugenia Rodríguez, Sabrina Hidalgo y María Estefanía Antonino.
«El proyecto estuvo enmarcado no sólo en el juego, el movimiento y la parte artística, sino que también se sumó como propuesta en la celebración de los 55 años del jardín. Por ello, la iniciativa llevaba implícita todo lo que tuviera que ver con la emoción y los sentimientos relacionados con la identidad de nuestra escuela», indicaron las referentes de la entidad que forma parte de la Biblioteca Rivadavia.
«Creemos que lo que más impactó en el espacio donde expusimos nuestra experiencia fue el sentido de pertenencia que tienen nuestros alumnos. Que de tan chiquitos puedan conocer con claridad cuáles son los colores que nos identifican, las canciones que nos son propias (el ‘Bomarraca’) y otros detalles que tienen que ver exclusivamente con la institución de la que formamos parte», señalaron.
Según explicaron las docentes, durante la presentación expresaron lo que sintieron al desarrollar el proyecto, las técnicas no convencionales que aplicaron para lograr los objetivos planteados junto a los alumnos.
«Participar de eventos de semejante magnitud siempre es fructífero, pero este año nos sentimos halagadas por nuestra tarea, ya que resultó muy significativo que la experiencia se haya desenvuelto en un Jardín Maternal, precisamente un segmento donde propuestas no abundan», enfatizaron también.
«Cada cosa que escuchamos o que vemos en estos encuentros lo traes a tu sala. Eso es riquísimo, ya que, más allá de las distancias y hasta los idiomas, compartimos el mismo ámbito que es el aula», subrayaron.
«La OMEP tiene una página donde todos los proyectos son presentados y están disponibles para todos lo que los quieran observar», explicaron para concluir las consultadas por este matutino.