Diferentes instituciones de Villa María y Villa Nueva nucleadas en el llamado Foro de Colectividades participaron días atrás del 30° Encuentro Anual de Colectividades de Alta Gracia, uno de los eventos en su tipo más importantes del continente. Las entidades locales que se hicieron presentes en la ciudad del Valle de Paravachasca fueron el Centro Vasco Euzko Etxea, la Casa Balear de Villa María, la Asociación Civil Familia Piamontesa de Villa María y la Sociedad Sirio Libanesa de Villa María.
En concreto, los integrantes de las mencionadas entidades viajaron todos juntos, en un colectivo rentado para tales fines, como parte de un movimiento que busca la unión efectiva de todas las instituciones locales del género.
Una vez en Alta Gracia, tanto el Centro Vasco como la Casa Balear participaron de dos instancias del encuentro: el desfile diurno por las calles céntricas de Alta Gracia (que incluyó el paso por el Tajamar, la Torre del Reloj y la célebre Estancia Jesuítica local, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco) y la actuación de sus respectivos cuerpos de baile en el escenario principal en horas de la noche.
En tanto, Piamonteses y Sirio Libaneses acudieron de forma presencial.
En torno a un muy buen marco de público (que se acercó para degustar la gastronomía de distintas partes del mundo y disfrutar de bailes típicos de los países representados y la actuación de algunas de las máximas estrellas de la canción Argentina), el cuerpo de baile Jai Alai del Centro Vasco se presentó cerca de la medianoche del sábado 28 de enero. Allí, txikis (niños), gazteak (jóvenes) y helduak (mayores) realizaron diversas danzas típicas de Euskal Herria, lo que incluyó un arín-arín y fandangos. Los dantzaris, como es costumbre, lucieron durante la actuación las vestimentas tradicionales del país pirenaico. Esta fue la cuarta actuación consecutiva de la Euskal Etxea en Alta Gracia, luego de su participación en 2014, 2015 y 2016.
Antes, la Casa Balear también hizo vibrar las tablas de la mano de su animado grupo de danza Ca Nostra. Una decena de bailarines y bailarinas demostraron la gracia de los ritmos de las Islas Baleares (archipiélago ubicado en la plenitud del Mar Mediterráneo), en lo que fue una enriquecedora experiencia para todos los participantes.
