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“La de Villa María ya es la mayor cuenca láctea de la Argentina”

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“La de Villa María ya es la mayor cuenca láctea de la Argentina”

Un trabajo publicado por un medio especializado reveló datos que ponen a las usinas lácteas de la ciudad y la región con un desarrollo preponderante. Villa Nueva, Tío Pujio, Ballesteros y Arroyo Cabral realizan importantes aportes

Un informe realizado por TodoAgro donde se consultó a más de 20 empresas y analistas del sector lechero permitió organizar un ranking de firmas lácteas que procesan leche en la República Argentina.

El trabajo indica que hubo un fuerte crecimiento de lácteas medianas de Córdoba (entre las que se cuentan Punta del Agua y Noal), que se beneficiaron con leche de tamberos que se fueron de SanCor.

Otra beneficiada fue Saputo, que acortó la distancia con la número uno del país, que sigue siendo La Serenísima, aunque posee un recibo menor al histórico, de poco más de 3,5 millones de litros diarios, en el promedio de agosto de 2017.

En el ranking que elaboró el periódico especializado que se edita en esta ciudad quedaron afuera muchas empresas que están recibiendo cerca de 100 mil litros diarios, entre ellas Cassini y Cesaratto, Lácteos Marca, Lácteos Windy, Luz Azul y Lácteos Cerutti.

“Es bastante difícil hablar de la industria láctea argentina como un todo, ya que hay diferenciaciones decisivas para explicar qué está pasando o puede pasar en el sector. Los analistas consultados son cautos al generalizar algunas tendencias, pero es obvio que el retraso de tipo cambiario, la presión fiscal y los costos laborales y logísticos son parte del relato lácteo argentino”, advirtió el periodista José Iacchetta, quien elaboró el informe con la colaboración Danilo Lima y Belisario Saravia Olmos.

 

Conclusiones

Entre otras conclusiones, el autor del trabajo del medio villamariense señaló:

-La tendencia marca que lentamente van consolidándose grandes empresas dedicadas a producir las commodities lácteas y empresas chicas que se dedican a especialidades. Por ende, las empresas del medio tienen un dilema muy grande y están complicadas, salvo que se trate de un encadenamiento con productores primarios.

-Hoy para ser viable produciendo líneas de consumo masivo (cremoso, barra, sardo, leche en polvo) hay que tener una relación de un empleado cada 3.500 litros de leche recibidos, por lo menos.

-La concentración va a continuar. Si aumenta la producción desaparecerán fábricas chicas y medianas de baja eficiencia. “Diría que hasta la tina somos todos iguales, la diferencia comienza en el moldeo, el salado, el envasado, el empaque, el depósito y el palletizado, allí la automatización hace la diferencia”.

-Hay preocupación por el crecimiento de multinacionales que pueden marcar el compás del negocio lechero argentino. “Cuando murió Pascual Mastellone, se extinguió el último referí que tuvo la lechería argentina”, dijo un analista.

-El factor climático y su impacto en la producción lechera y los graves problemas de Sancor y su dispersión de leche ayudaron a extender la sobrevida de algunas empresas que estaban complicadas.

 

Punta del Agua

Por otra parte, el medio afirmó que la compañía Punta del Agua, con base administrativa en Villa María y planta industrial en James Craik, conducida por Juan Carlos Gagliardi, “se convirtió en la cuarta empresa láctea de Argentina”.

Una de las frases de cabecera de Gagliardi es que “en la lechería argentina solo quedarán los lecheros”, explicitando con esto que es muy difícil que ingrese gente de otras actividades al sector y que seguirán saliendo actores del sistema, quedando aquellos que entienden y ven a la lechería más allá del negocio.

En diálogo con TodoAgro, Gagliardi planteó las claves de su crecimiento: “Nuestro objetivo de todos los días es buscar eficiencia en la elaboración, en las distintas fases de los procesos industriales y sostener la tarea en el trabajo de la familia”.

Sobre este punto, cabe destacar que la planta de Punta del Agua, ubicada a la vera de la ruta 9 en James Craik, es una de las de mayor incorporación de tecnología en la República Argentina, no solo en la elaboración de quesos, sino además en el tratamiento de efluentes, indicó. “Hemos inaugurado una planta de tratamiento de efluentes de última generación que permitirá mitigar el impacto ambiental e implica una solución sustentable”, agregó Gagliardi.

 

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