Inicio Locales “La identidad se logra a los 2, 3 o 4 años”, subrayó una especialista

“La identidad se logra a los 2, 3 o 4 años”, subrayó una especialista

0
“La identidad se logra a los 2, 3 o 4 años”, subrayó una especialista
“Cuando una nena en un acto dice que no quiere hacer de la pastelerita en la plaza, sino de congresal de la Primera Junta, las maestras no saben qué hacer”, señaló Papera

“Muchos docentes piensan que la sexualidad se va a expresar en la adolescencia, con el ejercicio de la sexualidad, con tener relaciones, con la orientación, pero en realidad la identidad se expresa muchísimo tiempo antes, por eso puede existir la niñez trans”, dijo Sonia Papera

“Cuando una nena en un acto dice que no quiere hacer de la pastelerita en la plaza, sino de congresal de la Primera Junta, las maestras no saben qué hacer”, señaló Papera

El equipo de Educación Sexual del Ministerio de Educación de la provincia llevó adelante ayer a la mañana una capacitación para docentes de todos los niveles y modalidades en el Centro Cultural Leonardo Favio. Lo hizo junto a ATTTA, la asociación de personas trans y travestis, y el grupo de la Secretaría de Salud del municipio que trabaja en diversidad sexual.

El auditorio estuvo lleno. En un alto de esta actividad, EL DIARIO dialogó con Sonia Papera, coordinadora del equipo provincial, quien sostuvo que brindar educación sexual ya no es algo opinable desde el momento en que es ley y remarcó la importancia de que la escuela acompañe a niñas, niños y adolescentes en “poder ser”.

– ¿Cuál es la razón de esta capacitación en la ciudad?

– Después de diagnósticos y relevamientos nos hemos dado cuenta que diversidad y género son los ejes que más les cuesta trabajar. Por eso planteamos conceptos y las incumbencias de la Ley de Identidad de Género en las escuelas.

– ¿Con qué posturas se han encontrado recorriendo la provincia?

– Con mucho desconocimiento de la ley y de cómo la misma modifica algunas prácticas educativas. Por un lado, nos encontramos con colegios que piden asesoramiento y acompañamiento para poder ayudar  a niñas, niños y adolescentes a transitar su transición o modificación identitaria o el asumir su orientación, y vemos que hay escuelas atentas a escuchar lo que los sujetos piden y no saben cómo. Por otro lado, vemos que hay casos de mucha resistencia.

– ¿Sobre todo en las escuelas confesionales?

– Sí. Allí se observa más la concepción de que nacemos varones o mujeres y entonces es así como nos tenemos que desarrollar.

Desde el programa y desde la ley se plantea que la sexualidad es una construcción que se va logrando a lo largo de la vida, que a lo largo de la vida puede cambiar y que se va expresando de acuerdo a las pautas culturales que uno tiene. Tiene algunos aspectos biológicos, sí, pero la mayoría son sociales o culturales.

– También aparecen los prejuicios en los colegios.

– Obviamente, y por eso decimos que una puerta de entrada es el posicionamiento docente. Una vez que logramos trabajar con docentes y el equipo directivo y ese establecimiento se pudo posicionar en función de garantizar los derechos de los chicos y chicas, el camino es mucho más fácil. A veces hay mucho prejuicio o está la decisión de posicionarse desde otro paradigma. Lo que pasa es que la ley es ley, ya no es opinable. No es opinable si la escuela tiene que dar educación sexual, eso podía ocurrir antes de 2006, pero ahora ya hay una legislación y la educación sexual es un derecho de los chicos que se tiene que garantizar.

– ¿Cuáles serían los ejes en los que el colegio debería sentarse precisamente para esto?

– Son cinco. El cuidado del cuerpo y la salud, sobre los que vienen trabajando bastante porque son los aspectos más biológicos.

La expresión de la afectividad, que también se viene trabajando mucho.

El respeto de derechos, que a veces se trabaja desde un marco nominativo, pero sin el ejercicio real de la ciudadanía.

La perspectiva de género, que es brindar las condiciones igualitarias para varones y mujeres y que es lo que más les cuesta ver. En sus prácticas institucionales cotidianas muchas veces no se garantiza ese derecho. Cuando una nena en un acto dice que no quiere hacer de la pastelerita en la plaza, sino de congresal de la Primera Junta, las maestras no saben qué hacer.

Y finalmente el respeto a las expresiones diversas, no solo en torno a la sexualidad sino a la familia, a las etnias, las culturas, las identidades de los países vecinos, a lograr una escuela que sea más inclusiva.

– ¿Cuán importante es que la escuela no censure al niño, niña o adolescente?

– Por eso estamos hoy con ATTTA. Algunas de las cosas que cuentan las personas trans es la exclusión que vivieron a lo largo de su vida, es una comunidad con una expectativa de vida de 40 años con muchísimas exclusiones de todo tipo. Entonces, si la familia excluye, la escuela lo hace y el trabajo también, no te quedan espacios para ser.

Hoy desde el Ministerio trabajamos con programas de reinclusión de la comunidad trans en el sistema educativo. En ese sentido hacemos un acompañamiento para quienes quieran retomar los estudios, porque a veces la escuela sigue teniendo prácticas discriminatorias. Cuando un alumno o alumna adulta va al CENMA y vos ves a una persona que desde su fisonomía es una mujer, pero desde el documento figura el nombre de un varón, y lo llamás como varón, la estás expulsando de nuevo, cuando en realidad tenés que preguntarle cómo quiere que sea llamada. Por ahí va la cosa, primero por lograr el acompañamiento para que no sean excluidos, ni por el sistema ni por los mismos compañeros, y en segundo lugar lograr la reinserción educativa.

– ¿Cuál es la premisa a la hora de abordar la niñez trans?

– Todo lo que venimos leyendo sobre el tema es que la identidad se logra antes, a los 2, 3 o 4 años las personas pueden decir lo que son. Hay que acompañar esas expresiones, no patologizar.

La Ley de Identidad de Género tiene prescripciones clarísimas para el sistema educativo, que es lo que estamos tratando de dar a conocer en las escuelas para no excluir. Sigue siendo un desafío porque muchos docentes piensan que la sexualidad se va a expresar en la adolescencia, con el ejercicio de la sexualidad, con tener relaciones, con la orientación, pero en realidad la identidad se expresa muchísimo tiempo antes, por eso puede existir la niñez trans.

Print Friendly, PDF & Email