
Angel Guillermo Hoyos fue confirmado ayer como nuevo entrenador del seleccionado mayor por parte de la Federación boliviana. Será el primer técnico nacido en Villa María en dirigir un seleccionado de fútbol

El técnico villamariense Angel Guillermo Hoyos fue confirmado ayer como el nuevo entrenador de la selección de fútbol de Bolivia, según comunicó ayer la Federación Boliviana de Fútbol, y remplazará en dicho cargo a Julio César Baldivieso, tras dirigir recientemente a Oriente Petrolero en el último Campeonato de Primera división del país limítrofe.
Hoyos, ex-DT de Talleres, arregló su vinculación con la selección del altiplano y dirigirá el equipo en lo que queda de las Eliminatorias, en las cuales marcha último y con tres puntos sobre seis partidos jugados.
La contratación de Hoyos, de 55 años, la anunció ayer el vicepresidente de la Federación Boliviana de Fútbol, Marcos Peredo, tras superar a los otros candidatos, Mauricio Soria y Eduardo Villegas.
“Fue difícil la decisión, ya que Hoyos, Soria y Villegas llegaron con sus propios recursos hasta aquí. Son muy buenos profesionales”, dijo Peredo.
“Estamos contratando un cuerpo técnico que trabaje 30 días al mes, 365 días al año y 24 horas al día”, enfatizó el dirigente.
“Pelusa”, como se lo conocía en su infancia en Villa María, fue un zurdo habilidoso que jugó al baby fútbol en All Boys, San Martín y Los Tigres, que en esos entonces participaban de los campeonatos relámpago y en la Capilla de Lourdes del Padre Hugo.
Después, siendo adolescente partió rumbo a otros horizontes, lo que lo llevó a jugar en Talleres, Banfield, Castilla de España, Gimnasia de La Plata, Blooming de Bolivia y Boca Juniors, donde arribó en el 86 y estuvo hasta el 89, aunque una serie de graves lesiones le impidió tener continuidad, pese a que dejó destellos de su calidad. También participó del seleccionado juvenil Sub-19 que luego fue campeón mundial en el año 1979, pero quedó desafectado a último momento de la lista definitiva.
De todas maneras, continuó siempre ligado al fútbol (jugó en varios clubes de Suramérica) hasta que se retiró y comenzó su carrera como técnico, que hoy lo transformó en el primer entrenador villamariense en dirigir un seleccionado de fútbol.
Su carrera como técnico, vale recordar, empezó en divisiones formativas de Barcelona de España, donde estuvo seis años (de 2000 a 2006) y dirigió a Lionel Messi. Luego trabajó en varios clubes de Grecia (Aris Salónica, Atromitos, PAS Giannina, Panserraikos) y en Chipre (Anorthosis Famagusta) hasta 2011, año en que volvió al continente y dirigió a Bolívar de Bolivia y Once Caldas de Colombia (2012). Igualmente, volvió al fútbol griego en 2013-2014 para conducir a Iraklis Salónica y en 2014 dirigió por primera vez en el país en Talleres de Córdoba, donde empezó su carrera como futbolista de Primera división.
Igualmente, tuvo la mala fortuna de sufrir el descenso al Federal A y, además, fue eliminado de aquella edición de la Copa Argentina por Alumni de Villa María, que le ganó a la “T” por penales en el Kempes.
Tras su paso por el conjunto cordobés acordó con Jacksonville Armada de Estados Unidos, donde trabajó hasta que ayer, tras una reunión previa, fue elegido para dirigir el seleccionado de Bolivia.
Primeras palabras
Tras ser elegido, el propio Hoyos brindó declaraciones a la prensa de aquel país y, según indicó el portal web del diario La Opinión de Bolivia, expresó: “Me siento bendecido por Dios y la Virgen, estoy muy honrado por la confianza que me dan, es un orgullo ser el técnico. Me siento comprometido con Bolivia, tengo mucha voluntad, trataremos que de este trabajo participe mucha gente».
«Agradecido con los dirigentes porque escucharon nuestro plan de trabajo que lo dimos a conocer en extenso. Es un proyecto que queremos desarrollar en Bolivia pensando en la evolución del fútbol, para mí es un trabajo que tenemos que comenzar ya», destacó a continuación.
Y, como cierre, apuntó: «Lo inmediato son las Eliminatorias, el Sudamericano Sub-20, y tenemos que trabajar desde ahora. En Bolívar y Oriente Petrolero los jugadores bolivianos han demostrado una voluntad enorme de trabajo, eso hay que rescatar».