Todos sabemos que la ciudad de Villa Nueva tiene historias riquísimas, donde los terratenientes y los aborígenes habitaron en ella… Pero dentro de historias y leyendas, esta vez decidí rescatar sus historias y el amor que son capaces de transmitirte estos seres que vienen a este mundo sólo a dar eso, amor. Podemos maltratarlos, pegarles, dejarlos sin comida ni agua, no amarlos… pero ellos nos van a amar, cuidar y respetar hasta su último suspiro. La lealtad es su único lema.

Todas las mañanas, Juan Marcelo y Mario Ramón llegan a trabajar a nuestra plaza Capitán de los Andes. Ellos son empleados municipales de muchos años y son los encargados de embellecer y mantener limpio cada rincón de la plaza. Pero hay tres perritos que también marcan tarjeta. Ellos son Felipe, Carlota y Chiquito; tienen dueños, pero aman ese espacio y son tan inteligentes que todos los días llegan a la misma hora y se retiran a la misma hora… ¿A cambio de qué? De amor, de calidez que les dan nuestros placeros y que cada mañana los esperan. Y cuando uno no llega, ellos se preocupan.

Los perros cruzan la ruta, caminan cuadras con frío, lluvia, viento, calor… Ellos igual llegan para acompañar en la limpieza. Se los puede ver adentro de la Municipalidad cuando Marcelo o Mario van… Ellos siempre pegados.

Seguramente vecinos de la ciudad saben de qué estamos hablando. Ya los vieron cuando pasan por la plaza … Cuántos de nosotros haríamos eso… Doce años que cruzan la ruta para acompañar, para demostrar amor, mover su cola ante una sonrisa o una caricia.

Entonces, ¿cómo no homenajearlos y amarlos? Este es mi sincero homenaje a estos ángeles de la guarda que día a día sólo nos enseñan que las palabras “lealtad” y “amor”  se pueden sentir hasta el último momento de vida.

El diccionario de la Real Academia de Lengua Española define a la lealtad como el cumplimiento de lo que exigen las leyes de la fidelidad y las del honor y hombría de bien. Bellas palabras pero, además de esta bella descripción, hay una definición especial para los perros: “amor o gratitud que muestran por el hombre”, lealtad amplia, lo dicho, con” fidelidad y reconocimiento”.

Formamos parte de su vida, es más, sin nosotros, su vida carece de sentido. Y ocurra lo que ocurra, ellos siempre estarán a nuestro lado, en la salud y la enfermedad, en las alegrías y las penas, en la riqueza y en la pobreza, todos los días de su vida.

Claudia Arregui,

Departamento de Prensa Municipalidad de

Villa Nueva