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Los lectores también escriben

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Los lectores también escriben

Cartas – Opiniones – Debate –

Acerca de la boleta de la Lista 3

Señor director:

Como muchos en nuestra ciudad saben, provengo del radicalismo, al que abandoné cansado  de ver cómo apellidos pseudoilustres de la UCR en la provincia, todos ellos de Córdoba capital, conducían al partido por una vereda que no era la del pueblo, no era la que le hicieron transitar a lo largo de más de cien años  Leandro Alem, Hipólito Yrigoyen, Amadeo Sabattini, Ricardo Balbín, Arturo Illia, Raúl Alfonsín y tantos otros, tal vez menos conocidos, como Moisés Lebensohn o Sergio Karakachoff, por citar algunos.

Hoy me felicito de aquella decisión, que me permite seguir participando de la política desde un espacio como el Modecopa, más auténtico, eminentemente local, no contaminado por intereses mezquinos. También me permite mantener las ideas de todos aquellos que fueron mis próceres en la política y no ser cómplice del despojo al que esta procediendo la alianza gobernante en el nivel nacional.

Dicho esto, quiero decir que  no escribo como referente del Modecopa, sino como un ciudadano más. Como uno de los tantos que hoy extrañan la Lista 3 cada vez que entran a un cuarto oscuro.

Los que entrábamos, la agarrábamos y la metíamos en el sobre para ir con orgullo a introducirla en la urna, andamos todos desparramados, divididos… y muchos siendo los peones de otros. Son los que hacen los mandados para conseguir los votos, para fiscalizar las elecciones y nada más, sin tener poder de decisión alguno acerca de las políticas que se implementan.

Si volviera la Unión Cívica Radical, pura, con la Lista 3, posiblemente nos juntaría a todos otra vez. Cada uno llevaría a quienes tiene alrededor y, aunque sacáramos dos votos, serían nuestros, para recomenzar otra vez, como tantas veces… Como, por ejemplo, después de aquel nefasto 6 de septiembre de 1930, cuando derrocaron a nuestro líder Yrigoyen y dio inicio la tristemente célebre Década Infame. ¿Qué dijo Don Hipólito entonces, cuando caído el Gobierno y perseguida la militancia, el desánimo había ganado a muchos radicales? Dijo: «Nada está perdido… solo hay que empezar de nuevo». Y así se hizo.

Sería tan bello que se decidiera volver a las raíces… Para muchos de nosotros podría llegar a significar el ánimo necesario como volver a casa luego de un exilio.

Es una lástima que las autoridades del partido no lo entiendan… Pareciera que tuvieran a la UCR alquilada a otros, a cambio de un cargo y de bajar las banderas históricas. Y no se dan cuenta (o sí) de que el PRO hace todo lo posible porque no volvamos a levantarnos y unirnos.

En fin, se extraña un partido fuerte, nunca sumiso, que tiene un ideario que mucho puede servir en la acuciante situación que comienzan a vivir tantas familias en nuestra Argentina.

Atentamente.

Carlos Giliberti

DNI 11785517

 

Acerca del debate sobre la legalización del aborto

Señor director:

Quiero expresar mi absoluta conformidad en cuanto a esta legalización sobre la que se viene debatiendo, debido  a distintas razones, y que las comienzo a enumerar:

1º) Estoy absolutamente convencido de que a la mujer le asiste todo el derecho del mundo a decidir  en todo lo que a su cuerpo se refiera.

2º) No considero que haya vida hasta que un niño no haya nacido, puede ser que quizás pasado un determinado tiempo del embarazo la cosa sea más polémica, pero en cuanto a los primeros 3 a 4 meses sostengo que no se quita ninguna vida; creo que es el tiempo suficiente para que esa mamá en formación  pueda analizar la oportunidad de dar a luz,  si está preparada social y económicamente para afrontar algo tan delicado como lo es criar a un hijo.

Hoy muchas mamás solteras y/o casadas quedan embarazadas involuntariamente y por no infringir la ley o no arriesgar sus vidas ante intervenciones poco seguras llevan adelante sus embarazos y luego… familias sumergidas en extrema pobreza que no tienen cómo alimentar y formar adecuadamente a ese niño, educarlo, etcétra, etcétera.

Madres que ven truncadas sus vidas ya que la llegada de ese niño hace que corte o no empiece sus estudios universitarios nunca más, que son obligadas a casarse por el qué dirán; matrimonios y familas destruidas al poco tiempo porque no hay amor, solo hubo el fuego de una ocasión y nada más.

Si la mujer tuviese pleno derecho de decisión de qué hacer con su embarazo no deseado no me cabe absoluta duda que evitaría miles y miles de problemas.

3º) No soy abogado ni experto en leyes, pero tengo entendido que el Código Civil dice que no hay vida si no hubo nacimiento.

4º) En estos días escuché a muchas personas hablar sobre el tema, políticos, médicos… A ninguno le  escuché opinar sobre aquellas madres que sufren el calvario de no tener cómo criar adecuadamente a sus hijos. Vemos a diario niños durmiendo bajo puentes o en las veredas, terminales de colectivos, estaciones de subtes, atrapados por las redes de narcotráfico…

Y tampoco escuché hablar de aquellas que para que el niño no sufra es impulsada por un momento a darlo en adopción, la mayoría de ellas ilegales y de la que en ese preciso momento pierde absolutamente el rastro de ese hijo, por lo cual no me caben dudas que llevará consigo un desgarro del alma por el resto de su vida. Lo peor aún, ese niño, en el 99% de los casos, en algún momento de su vida se entera de su estado y además de la reacción que tenga en el momento, que pueden ser varias, empieza el calvario de la búsqueda de su identidad biológica, algo que en la mayoría de los casos jamás se logra, quedándole un vacío que nunca llenará…

Esto no lo digo porque se me ocurra, es porque soy hijo adoptado ilegalmente y hace más de 30 años peregrino por todo el país buscando mi origen sin suerte hasta el día de hoy, y somos más de 3.500.000 las personas en mi situación en nuestro país. En mi página hay una carta abierta dirigida hacia esa persona que busco. Si esta situación es fea, más lo es cuando vos golpeás puertas y te das cuenta que a nadie le importan nuestras causas particulares.

El otro día leí algo de una persona que está en contra de la legalización que me pareció muy absurdo, decía mas o menos así: va una mujer al médico a pedirle que le haga un aborto porque ya tenía un niño y no podría criar a otro y  el médico le respondió: hagamos una cosa, matemos al que ya nació y dejemos al que está por nacer, ya que de todas formas va a matar a uno de los dos. No tiene el más mínimo punto de comparación, al niño que ya nació ya lo tuviste en tus manos, le hiciste una caricia, escuchaste su llanto, te devolvió alguna sonrisa, lo tuviste sobre tu pecho, lo amamantaste, hubo un nacimiento, hay vida manifiesta, y lo peor, te convertís sí o sí en un asesino. No sé cómo explicarlo, pero nada en absoluto se asemeja a un aborto de los primeros 3 o 4 meses de inicio de embarazo.

Recién paso frente a un tele y en un programa en el que estaban hablando del tema, el zócalo decía: ningún aborto es seguro. Y yo pregunto: ¿qué práctica médica es segura?

Cuando se habla de legalizar para terminar con abortos en la clandestinidad, es darle a esa mujer, además de libertad de decisión,  un marco de mayor seguridad e higiene a esa práctica. Nadie garantiza 100% de seguridad. Sacarte una muela, operarte de la garganta, un apéndice también te puede matar por más sencillo que sea el procedimiento.

Sé que muchos querrían preguntarme: ¿pero no estás agradecido de tener vida? La respuesta es: simplemente no hubiese existido, no estaría escribiendo esto, no estaría buscando a mi madre, mi madre quizás no me estaría extrañando o buscando, simplemente nunca fui.

En definitiva, creo que el gran conflicto está creado por las creencias religiosas, los prejuicios que esto ha creado y no deja ver la gran realidad y futuras consecuencias de la situación. Por eso sostengo firmemente que cada mujer tiene derecho a decidir lo que ella crea mejor para la continuidad de su existencia, aunque esta decisión,cualquiera que fuese, en el futuro no la exima de   arrepentimiento.

Pedro Alberto Guardamagna

DNI 13006547

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