Además se exhibió una línea de tiempo, una documentación alusiva, un catálogo libro y un audiovisual que dio cuenta de la investigación realizada

Desde el pasado viernes, entrar al Museo Bonfiglioli es entrar en definitiva a un Museo, así con mayúscula.

No solo la nueva señaléctica de acceso le brinda otra identidad, ni únicamente las renovadas salas de planta baja (reinauguradas en abril del año pasado), se orientan en ese sentido. De ahora en más, la planta alta del establecimiento ubicado en San Martín y bulevar Sarmiento contará en forma permanente con la exposición de la primera colección de la entidad museística, que data de 1968 cuando se crea la entidad, acompañada por una línea de tiempo histórica y cultural, una exhibición documental alusiva (actas de jurados, recortes de periódicos, fotografías), un catálogo libro y una proyección audiovisual en continuado sobre el trabajo de investigación que vino a cuenta de tal emprendimiento.

Desde principios del año pasado, un equipo encabezado por la directora Analía Godoy ha indagado en los anales de la institución tratando de estudiar, sistematizar y catalogar, por primera vez en su historia, la colección que se hallaba archivada en uno de los cuartos superiores del edificio. El resultado es la muestra “Una modernidad polifónica”, una exhibición de cerca de 60 piezas -óleos, acrílicos, esculturas en yeso y en metal, tinta sobre papel-, de autores célebres como el propio Fernando Bonfiglioli.

El criterio curatorial

Carolina Romano, magíster en arte latinoamericano convocada para tal tarea, señaló a EL DIARIO: “Aunque me llamaron para investigar toda la colección, hicimos un primer recorte de cuando fue creado el Museo en 1968. Empezamos a prestar atención a los salones de pintura anteriores al museo, que se realizaron desde 1946, cuyos premios adquisición conformaron la primera colección”.

Godoy, por su parte, precisó que “la idea no era exponer rápidamente todas las obras, sino desarrollar una reconstrucción histórica y plasmar un relato coherente”. Por ello, Romano aclaró que “el criterio curatorial de la muestra no respeta una cronología, sino que las obras están agrupadas en función de algunos problemas o temáticas de la modernidad que trabajaron en cada época los artistas”.

Por tal motivo, las secciones determinadas son las siguientes: “La ciudad y sus aledaños” (“la representación de la ciudad moderna, y las acogidas y los rechazos a esa modernización”), “Miradas sobre lo cotidiano” (“cuando los artistas tomaron temas menos trascendentes como temas importantes”), “La naturaleza como paisaje” (“cuando se toma distancia del entorno y se lo problematiza”), “El artista y sus modelos” (“cómo se representan a sí mismos y entre ellos”), y “Lenguajes modernos” (“los códigos por los cuales construyen las obras y cómo van impugnando códigos heredados”).

La única sección que está fuera de un criterio estético es “Los comienzos”: “Son obras que son previas a los salones e ingresaron por donaciones, aunque no están especificadas. Hay obras de ese período que o están físicamente, pero no están catalogadas, o están registradas, pero no están físicamente”, indicaron.

Referentes de la cultura

El documental, realizado por el equipo de Tecnoteca TV y que se exhibe en las pantallas del museo, cuenta con las palabras de las artistas que formaron parte de la investigación (María de los Angeles Basualdo, Gabriela Manfredi, Cecilia Orso, Emiliana Sinigaglia, Analía Godoy), del fotógrafo Marcos Goymil (quien está llevando adelante el archivo fotográfico de toda la colección), de la escritora Dolly Pagani (quien fuera miembro de las comisiones municipales de Cultura, responsables de la organización de los primeros salones de pintura) y de Daniel Baysre (integrado en la primera comisión conservadora del museo, en 1968).

“La intención será continuar indagando en la colección -que cuenta con más de 300 obras en total-, pensando en que el año próximo el Museo cumplirá 50 años de vida”, concluyó Godoy.

Renovado. Mediante un proyecto de la Secretaría de Desarrollo Urbano del municipio se llevó adelante la reestructuración del ingreso del Museo, se incorporó mobiliario y se renovó la instalación eléctrica, con el adicionamiento de luminarias específicas para las obras. Vale señalar que la muestra permanente -que cuenta con audioguías virtuales para los asistentes- continuará abierta al público de lunes a viernes de 8 a 20.30, y los sábados, domingos y feriados de 8 a 20, con entrada libre y gratuita.