La doctora Stadelmann volvió a remarcar la importancia de una consulta inmediata luego de una picadura de alacrán. Tanto enfermeras como el personal que está en atención y recepción de pacientes de la guardia externa y en el internado se actualizaron sobre el tema
El Hospital Pasteur realizó una jornada-taller de capacitación interna teórico práctica en Resucitación Cardiopulmonar (RCP) pediátrica y escorpionismo, organizada por el servicio de Pediatría.
EL DIARIO habló con Analía Silvina Stadelmann, médica pediatra, especializada en Neumonología Infantil, encargada de dar el curso.
La doctora, que hizo su especialización en el Hospital Garrahan, explicó: “El objetivo es actualizar el manejo de maniobras de entrenamiento al personal, tanto a Enfermería como a todo el recurso humano que esta en la atención y recepción de pacientes de la guardia externa y en el internado”.
Preparación ante situaciones de emergencia
“Siempre es bueno volver a revisar las maniobras para corregir errores y para actualizar la secuencia de acciones, a fin de que la resucitación sea efectiva”, agregó.
A este curso le sumaron un taller teórico de vía intraósea: “Es una vía de acceso para colocar mediación en una situación de emergencia. Lo hicimos porque el personal tiene que saber hacerlo. Está demostrado a nivel mundial que tener personas entrenadas en RCP salva la vida de pacientes. Esas maniobras que se instalan sobre personas que están sobre un paro cardiorrespiratorio aumentan la probabilidad de sobrevida, no la garantizan, pero aumentan la posibilidad”.
Escorpionismo
Además de trabajar con las maniobras de RCP, hicieron una actualización en escorpionismo: “Elegimos trabajar sobre este tema y adicionarlo a este taller por el aumento de la casuística en nuestra región y también a nivel nacional. Hemos tenido muchísimos casos y hemos repasado y revisto las normas del Ministerio de Salud de la Nación, que son los que aplicamos en la atención de los pacientes, especialmente en edad pediátrica, porque el accionar precoz va de la mano de una mayor sobrevida en el paciente”.
Qué hacer ante una picadura
“Cuando a un niño lo pica un alacrán, en primer lugar hay que hacer una consulta precoz e identificar el bicho, traerlo al Hospital. De esa forma podemos definir la especie y saber si se trata de una venenosa”, explicó la doctora.
Pero lo principal es la consulta inmediata: “Siempre hemos tenido dosis de antídoto. Los pacientes que hemos tenido, recibiendo las dosis en los tiempo en los que pueden ser efectivas, han tenido respuestas fantásticas. Hemos tenido casos graves que han sobrevivido con respuesta inmediata”.
Según explicó Stadelmann, la mala evolución va de la mano de las consultas tardías, cuando el paciente llega en un estado que puede ser irreversible: “Cuanto menor es la edad del paciente, más rápido se debe acudir”.
El niño merece consulta precoz e inmediata: “Lo que hacemos en las primeras dos horas posteriores a la picadura es fundamental, porque nos garantiza o nos aumenta la posibilidad de buenos resultados. Dentro de las primeras dos horas tenemos posibilidades, más allá no, porque la neurotoxina se fija en distintos sitios del organismo y ya no se puede contrarrestar con el antídoto de la misma manera”.
