

Hace 25 años, en una típica tarde fría de julio, un par de personas, en una de las tantas charlas de amigos, se les ocurrió crear un espacio exclusivo para los niños y jóvenes del baby fútbol e inferiores.
Como resultado, surgió SEMILLERO, cuyo primer número ganó las calles de la ciudad un 23 de julio de 1991, en formato de revista, para ser, a partir de allí, el compañero infaltable de “esos locos bajitos” (en alusión a la grandiosa canción de Juan Manuel Serrat), como siempre se los mencionó a los destinatarios de la publicación que, tiempo después, pasó a ser parte de EL DIARIO, hasta la actualidad.
Y desde su aparición nunca dejó de acompañar “el nacimiento de la ilusión” -tal cual lo expresa su portada- de incontables niños y jóvenes de diferentes generaciones, cuyos nombres e imágenes quedaron y estarán impresos en las páginas de un clásico que hoy celebra sus Bodas de Plata.
Muchísimas personas hicieron que este sueño sea posible, que ya lleva más de 800 ediciones.
Pero la vida misma quiso que, previo a cumplir estos 25 años, se nos fuera uno de los creadores: Raúl José. Un “genio” de la tinta y papel que acompañó a su amigo Jorge Alamo a iniciar este espacio y con presencia perfecta, en casi un millar de números publicados, a través de editoriales brillantes.
Por lo que, dentro del orgullo que simboliza llegar a esta significante fecha, surgen las lágrimas, recordándolo, siempre presente. Como así también al “Negrito” Carlos Díaz Barraza, quien fue partícipe del “primer plantel” de SEMILLERO.
Seguramente, nuestro Raúl hubiera sido quien escribiera estas líneas con su notable magia, remarcando el valor de este histórico aniversario y subrayando, una vez más, el premio mayor de quienes hacen, hicieron y harán las páginas de SEMILLERO: “La lucha más hermosa que se pueda tener es escribir para los chicos y ser querido por los chicos”.