La banda local “Superjuguetes” se presenta este viernes a la medianoche en el bar de la Rockandrolla (Corrientes esquina Belgrano). Habrá músicos invitados y la participación del trío “Defectos Especiales”. Su guitarrista Angelo Valenzano habló de una propuesta donde se funde el más potente rock nacional con el heavy inglés de los 70.

Si alguien no conoce “Superjuguetes” y un día lo escucha por la red, tendrá la sensación de estar ante una banda nacional de los 80 que por alguna razón inexplicable le había pasado desapercibida. Y es que temas como “Robot”, “Ctalamochita” o “Ceniciento hollín”, comparten la “crudeza” de bandas como “Pescado Rabioso” o “Los Redonditos de Ricota” (primera época) pero sin renunciar al formato “canción pop”. Se trata de un delicado balance que han conseguido muy pocas bandas. Y uno piensa en “Red Hot Chili Peppers”, “Pixies”, “Sumo” o “Divididos”, nombres que saldrán a lo largo de esta charla con Angelo Valenzano, guitarrista de la banda.

Sin embargo y muy a pesar de ese “espíritu setentoso-ochentoso”, habrá algunos elementos que vendrán a decirnos que “Superjuguetes” es una banda actual y (por cierto) de Villa María. Lo primero, es la gran calidad de sonido conque han sido grabadas las canciones (una tecnología impensada hace 35 años). Lo segundo, ciertos guiños al “thrash” de los 90 y 2000. Lo tercero: las letras. Como la dedicada al río que baña las dos Villas: “Cae el ocaso, sus aguas miran ya, al navegante/ De ese instante, de verdor, marrón, ese es su color (…) Perlas del sol, bañan su color/ bañan su color”.

Jaguar del cemento llano

-Entonces, Angelo, ¿cómo definirías la propuesta de “Superjuguetes”?

-Creo que somos una banda clásica en la veta más tradicional del término. Y si bien las influencias son amplias, creo que el gran punto de encuentro de todos nosotros es “Divididos”, “Sumo” y Spinetta. Sobre todo “Los Socios del Desierto”. De las bandas de afuera, nos gusta mucho Black Sabbath, Deep Purple y Led Zeppelin. Somos una banda joven pero con espíritu retro. Y eso se nota en nuestra forma de componer y en el sonido.

-Hace apenas dos años que están tocando ¿cuál fue la génesis de la banda?

-Con Guille (Guillermo Vicco, bajista) nos conocemos de toda la vida. Incluso tuvimos una banda en la adolescencia que se llamó “Mística”. Pero Guille se fue a Alemania, yo armé otras bandas y a la vuelta de él nos volvimos a juntar. Después de ensayar con un primer baterista que se fue, encontramos a Fede (Federicho Roach). Así que hicimos un trío y armamos componiendo canciones. Hasta que el año pasado lo agregamos a “Diente” (Víctor Pacheco) en voz. Al principio cantaba yo, pero lo mío no era ser un “frontman”.

-El año pasado telonearon a “Cabezones” en barrio Parque…

-Sí, digamos que 2015 fue nuestro año de despegue, porque también tocamos en el Festival Sin Techo Rock compartiendo escenario con Eruca Sativa. También presentamos nuestro primer material en Quinoto y tuvimos muy buena repercusión.

-Aún no han grabado el primer disco ¿tienen el proyecto en carpeta?

-La idea es hacerlo el año que viene. Sin embargo, ya nos juntamos a grabar ocho canciones en el estudio de Pablo Balduzzi (“Ave de Frac”), un gran amigo nuestro. Queríamos tener material de difusión, canciones en muy buena calidad y súper radiables que se pueden escuchar en soundcloud.com/superjuguetes

-¿Cuál es la importancia de pasar por un estudio?

-Que una vez que grabás le das un formato definitivo a las canciones. Digamos que hasta que no lo hacés, van mutando en los ensayos y recitales. También podés ver la química entre los miembros del grupo en una sala, que no es lo mismo que tocar en público. Y nos llevamos muy bien.

-¿“Superjuguetes” es un grupo de la misma generación?

-No. Guille, “Diente” y yo tenemos entre 26 y 30 años, pero Fede es el más “anciano” con 38 (risas). Sin embargo, los cuatro compartimos la pasión por los mismos grupos y lo de Fede es increíble, no sólo por la información musical que maneja sino porque, a pesar de ser baterista, tiene una visión muy armónica de las canciones. Digamos que no sólo está pendiente de la parte rítmica sino de cada detalle de la composición.

-Están participando en el certamen “Abbey Road” ¿cómo lo llevan?

-Hace un mes estuvimos séptimos pero nos caímos un poco y ahora estamos entre las 20 primeras bandas sobre 500 participantes de todo el país. El ganador va a grabar a Inglaterra. Eso sería un sueño. Pero independientemente de ganar o no, este concurso sirve mucho para difundir las canciones.

-¿Cuál es el objetivo final de “Superjuguietes”?

-Tocar de manera regular en la ciudad y la zona. Si de ahí en más pudiera pasar otra cosa, mucho mejor. La idea es darle a la gente la mejor propuesta posible de calidad e intensidad. Y creo que vamos por buen camino.

Jóvenes y retro. “Crudos” y con espíritu “sinfo”, la canción dice: “El tiempo ha arrasado, desde el último verano / Jaguar del cemento llano, te avecinas, en silencio/”. Y acaso sea una buena definición de la banda también: “Jaguar del cemento llano”. Sólo que “Superjuguetes” no se avecina en silencio sino con un fabuloso sonido: el grito rockero de una ciudad, las guitarras de “Poscrucificcón” y la distorsión del Arriero que se toca con el alma.

Iván Wielikosielek

Especial para EL DIARIO