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Caliente reparto de “puntos” en Cabral

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Caliente reparto de “puntos” en Cabral
Gabetta capta un rebote y se apresta a rematar, mientras Acosta se cubre de forma extraña el rostro. Colón y Ticino dejaron todo y empataron 2 a 2

Colón y Ticino igualaron 2-2 en un intenso partido. Dobletes de Ayrton Páez y Lucas Morre. El capitán de Colón le propinó un golpe en el rostro a Bonaveri, que le produjo un feo corte (dejó la cancha y fue suturado), y luego fue decisivo en el partido (marcó el empate). Vibrante tarde, donde claramente la punta estaba en juego

Gabetta capta un rebote y se apresta a rematar, mientras Acosta se cubre de forma extraña el rostro. Colón y Ticino dejaron todo y empataron 2 a 2

Escribe: Beto Arce

Dientes apretados, puños cerrados, respiración contenida… se viene el pelotazo. Es casi una descripción de cómo la tensión le gana a la relajación. Con la pelota pasa lo mismo.

Colón defendió con mucho sacrificio la punta de la Zona Sur, igualando 2-2 con un Ticino que siempre estuvo arriba en el marcador y cerca de ganarlo.

El equipo de Abate Daga traía buenos números para este trascendental juego además del primer lugar, pero Ticino tenía más compromisos para no perder terreno en la pelea, razones por las que el espectáculo ofrecía garantías.

Al minuto de juego, Cachete Giraudo abrió a posición de Sambrana que sacó un latigazo bárbaro a la carrera, y el arquero Carnino envió al tiro de esquina. Tres minutos más tarde, Morre iniciaba su duelo personal con Bonaveri (pechó sin pelota contra la línea) y un minuto después, Pedernera le tapó abajo un mano a mano a Bonaveri cuando sacaba el remate. Equilibrado y sin diferencias, con acciones repartidas, como así también la pelota, que por momentos anduvo bastante suelta en el aire pidiendo a gritos el suelo. De todos modos, la ruta de la pelota quizás garantice el juego de un equipo en particular, pero no el resultado de un espectáculo.

Ticino se reflejó más con salir a ganar y, dadas las circunstancias, Colón a no perder. Es que la defensa albirroja se mostró muy firme y prácticamente bloqueó espacios a los frentes de ataque cabralenses que permanecieron controlados. Por eso podía permitirse jugar un poco más adelantado en el terreno y con posibilidades de profundizar. Gran laburo de Diego Villagra, que terminó sumándose de última al este plantel y claramente le aportó su chapa y experiencia. Patrón del medio con la función de reparto de balón, ejecutar tiros libres y obviamente defender como el Pulga.

Gran remate de Maldonado sobre los 17 m hizo estremecer a todos, cuando la pelota salió apenas al lado del ángulo derecho de Pedernera luego de una enorme jugada de Páez por derecha. Elevado tiro libre de Morre a los 21 m. Acciones que seguían repartiendo equilibrio en un juego que así lo fue hasta el final, pero en un momento debía abrirse. Corrían los 25 m cuando desde un lateral y al son de un “despertemos, estamos dormidos” del Cucho Peralta, se anunciaba el grito de gol, casi como una premonición. Sí, a la salida de un lateral llegó el gol de Ticino: el Enano Páez ganó en lo alto, los madrugó a todos, metió un cabezazo preciso y a celebrar (0-1). Sorprendió luego del gol la cantidad de reproches entre jugadores de Colón, más allá de la “siesta”. Un clima de confusión que a la larga terminaría dejando algunas marcas de desconcierto aún mayores. Ni que hablar de que un minuto más tarde, en una jugada casi calcada (otro lateral) Páez, con una media vuelta, obligo a Pedernera a mandarla al córner.

Se terminaba el PT (46 m) y en una acción discutible el juez cobra penal. Nunca estuvo seguro de sancionarlo y luego de tantos gritos, se animó. La pelota impactó en Bonaveri a la altura del pecho, pero la posición del volante dejó muchas dudas sobre si estaba dentro del área, las mismas que pasaron por la cabeza de Bravo antes de pitar. Morre no perdonó y con un fuerte y cruzado remate estableció el 1-1.

En el inicio del ST (1 m) rápida jugada por derecha y duro golpe al rostro de Morre a Bonaveri, en la que el árbitro sanciona penal, pero no ve la gravedad de la acción. Entiende que hay infracción, ve que es violenta, pero no la juzga como tal. Resultado: Morre ileso de una acción en la que tenía roja segura, Ayrton Páez poniendo el 2-1 con muchísima categoría “pinchando” la pelota y Bonaveri dejando la cancha camino a la clínica para que le apliquen dos puntos de sutura.

¿Por qué incide el mal arbitraje en el partido y el resultado? Porque Morre se encargaría de cobrar el empate al ejecutar un penal cinco minutos más tarde, cuando bajaron a Barrionuevo dentro del área luego de un “enrosque” defensivo de Ticino. A los 6 m estaba todo igual y con mucho que jugar. Se lo comió solo Maldonado (11 m) luego de un jugadón de Páez por derecha; lo tuvo dos veces Giraudo, primero con un remate que se desvió al córner y luego con una espectacular chilena que el arquero sacó del ángulo.

Gabetta y Navarro, los dos volantes centrales de Colón, se dijeron algunas cosas en el partido, propias del desorden, pero pasó a mayores. “Me sacas a mí o lo sacas a Gabetta”, tiró Pepe, situación que descolocó al DT y sin comprender preguntó qué pasaba y el mediocampista soltó: “me tiró”… Hay cosas que quedan en el vestuario, pero esto quedó en la cancha. Luego pegó un par de patadas de tarjeta, un golpe que cortó en la nariz a Marrelli y casi sin ganas terminó el juego (también fue el primero en irse).

El Pulga Villagra metió un tiro libre por afuera de la barrera espectacular. “La vi adentro”, dijo después del partido. Lo cierto es que Pedernera voló para impedirlo. Fue caliente, intenso, vibrante por momentos y mal jugado por otros, de un lado y del otro hubo reparto, no solo de goles, y aunque los puntos se los llevan ambos, dos se fueron en el inicio del ST.

 

La figura: Ayrton Páez

Como siempre, el as de espadas de Ticino. Marcó los dos goles y se mostró muy activo, más allá de que la pelota pasó mucho tiempo en el aire. En el momento justo para quebrar el resultado, una costumbre. Tuvo una gran tarea en recuperaciones y hasta le cubrió las espaldas al Pulga Villagra, quien jugó en buen nivel.

 

El árbitro: Martín Bravo

Tuvo una tarde complicada. Sobre el final del PT, la jugada del penal de Bonaveri (mano) dejó muchas dudas en cuanto a la ubicación del infractor y en el inicio del ST cobró un penal por un codazo al rostro que terminó con un feo corte y solo amonestó por protesta. “Canchereó” el partido.

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