La campaña de accesibilidad persigue el objetivo de informar a los ciudadanos sobre el derecho de las personas con discapacidad a poder circular por las calles, según lo estipula la Ley Nacional 24.314

Ante la necesidad experimentada por los alumnos y docentes de la Escuela Especial Clotilde Sabattini, quienes en sus salidas periódicas por los barrios de la ciudad encontraban múltiples obstrucciones en la vía pública que entorpecían la actividad programada, acordaron realizar campañas de concientización en los barrios de Villa María con el fin de que los vecinos comprendan acerca de la importancia de liberar de obstáculos a las veredas, para que las personas que presentan alguna discapacidad puedan transitar.

Al mismo tiempo se informa al municipio las dificultades encontradas que exceden la responsabilidad de los vecinos, por ejemplo, las rampas en las esquinas.

Ese fue el primer y principal objetivo que se propusieron cuatro años atrás, cuando iniciaron las actividades.

Pero a ellos se les sumaron los chicos de cuarto año Naturales del IPEM 147 Manuel A. Ocampo.

Alrededor de 50 chicos entre los dos colegios participan de la campaña.

Ley 24.314

Esta Ley Nacional de Accesibilidad de Personas con Movilidad Reducida, sobre la que se basa el trabajo de este grupo de profesores, coordinadores y alumnos, establece “la prioridad de la supresión de barreras físicas en los ámbitos urbanos arquitectónicos y del transporte, que se realicen o en los existentes que remodelen o sustituyan en forma total o parcial sus elementos constitutivos con el fin de lograr la accesibilidad para las personas con movilidad reducida”.

Por accesibilidad debe entenderse la posibilidad de las personas con algún problema de movilidad de gozar de las adecuadas condiciones de seguridad y autonomía como elemento primordial para el desarrollo de las actividades de la vida diaria, sin restricciones derivadas del ámbito físico urbano, arquitectónico o del transporte, para su integración y equiparación de oportunidades.

Cuarta campaña

Tres de las docentes que acompañan a los chicos a lo largo del año con este proyecto y que viven con ellos día a día las dificultades que se les presentan cuando quieren trasladarse de un punto a otro de la ciudad, conversaron con EL DIARIO y dieron detalles de la campaña de concientización que llevan adelante.

Mariela Batallés es docente en el IPEM 147 y psicopedagoga; Laura Samuel y Adriana Anello son docentes en la Escuela Clotilde Sabattini.

“Este es un proyecto de intervención social comunitario, donde uno tiene que intervenir y modificar la sociedad de alguna manera”, explica Anello. “Originalmente la idea surge porque había un grupo de estudiantes con dificultades para caminar y algunos en silla de ruedas que tenían un proyecto en el que semanalmente tenían que ir hasta el supermercado y era terrible, porque eran pocas cuadras, pero era muy complicado, casi imposible trasladarse”, agregó.

Hace cuatro años se viene desarrollando, primeramente se realizó en barrio Trinitarios. Los chicos salen con un mapa del barrio divididos en grupos y a cada uno le toca relevar una manzana. En planillas van anotando lo que ven en cada vereda y sacan fotos de los obstáculos encontrados.

En los años siguientes realizaron la campaña en los barrios Ameghino, Centro y Almirante Brown.

Durante este año se incorporó el proyecto al programa de voluntariado municipal. Desde la Secretaría de Juventud encontraron apoyo y el objetivo es presentar en la Municipalidad el detalle de los obstáculos identificados.

Además de las campañas los chicos acompañan con una murga, que tiene sus fines pedagógicos y educativos pero también busca llamar la atención del barrio con color, un poco de ruido y música. Algunos van danzando y tocando los redoblantes en la medida que el otro grupo de chicos va hablando con cada vecino.

Relevamiento y concientización

Como las coordinadoras mismas afirman, este es un trabajo educativo, no político: “Tampoco tratamos de asumir la solución del problema”.

“La campaña es de concientización, después está la otra parte que son las rampas, los accesos, que sí le corresponde al Estado, pero hay una cuota importante del trabajo que podemos hacer los vecinos», expresó Batallés.

“Lo queremos hacer visible y que cada uno asuma la responsabilidad que le toca”, agregó Samuel.

A nivel general ven una mejora en la accesibilidad de la ciudad durante los últimos años, aunque todavía «falta mucho».

De los relevamientos el dato más destacado que se desprende es que uno de los problemas principales es el estado de las veredas y el otro, los obstáculos que ponen los mismos vecinos.

Por ejemplo, algunos ponen unas bonitas macetas en la puerta de su casa con cactus y eso para los chicos es terrible. Como ciudadano no lo tenemos previsto a esto: “También hemos visto muchos árboles sin podar, que a veces llegan a la cintura de uno”.

“Durante el relevamiento de este año, en el barrio Almirante Brown vimos en la esquina de Alem y Rawson un terreno baldío con la delimitación fuera de lo que le corresponde y tomando parte de la vereda, que deja sin lugar para el paso”, ejemplificaron.

“Sobre la misma vereda hay un aire acondicionado muy salido desde una casa y como la misma señora, dueña de casa, escuchaba que los peatones se lo chocaban, puso una maceta con cardos, que es peor”, manifestaron.

También se han cruzado con vecinos que padecen ellos mismos los obstáculos, como ancianos que no pueden caminar por el estado de las veredas: “Uno no puede exigir que el vecino cambie el piso de su vereda porque no todos tienen esa posibilidad económica, pero con pequeños trabajos se puede mejorar”.

En general la respuesta de los vecinos es buena, pero no lo toman como algo que tienen que solucionar ellos: “Por eso es importante concientizar, hacer saber, es simplemente como sacar la bici o la moto de la vereda, liberar de piedras, no subir el auto al garaje y dejarlo a la mitad del paso”.

Largo y corto plazo

Desde que empezaron la campaña tienen contacto con la Municipalidad, adonde han acercado los relevamientos de años anteriores y a la que van a llevar también uno este año.

“Durante la intendencia anterior hablamos con el exarquitecto de Obras Públicas porque le pedimos que venga a dar una charla a la escuela. Ahí, él mismo nos explicó que como originalmente no fue pensada como una ciudad accesible, ahora es muy costoso reacondicionarla, pero que la Municipalidad sí tiene planes a largo plazo”.

Según les explicaron en aquella oportunidad, hay un plan para abarcar la zona de los bulevares y poder llegar al centro: “La idea final es que alguien que esté, por ejemplo, en barrio Los Olmos pueda llegar en silla de ruedas hasta el Centro”.

Por otro lado, si bien esta campaña no abarca el transporte público, la Ley de Accesibilidad sí lo contempla.

Desde este año, se han incorporado cuatro colectivos accesibles al transporte público de la ciudad.

Otros años han tenido serias dificultades: «Era una salida al Hospital cuando todavía estaba en calle Mendoza, logramos salir todos y de regreso tuvimos que volver con una alumna en silla de ruedas caminando, porque la abertura del colectivo, la puerta, directamente no tenía el tamaño suficiente para pasar», detalló Anello.

Este proyecto permite la participación de cada uno desde sus posibilidades y nos brinda a nosotros, los vecinos, la oportunidad de realizar, con pequeñas acciones, una gran ayuda.

Lo fundamental es liberar las veredas
Qué podemos hacer los vecinos para facilitar la accesibilidad en las calles

Las representantes de la campaña dieron una lista de consejos útiles que debemos que tener en cuenta en nuestra vida diaria y especialmente sobre cómo mantener las veredas de nuestras casas para facilitar la libre circulación de las personas con discapacidad:

*Arreglar el piso de nuestras veredas.

*No estacionar vehículos como autos o motos sobre la vereda.

*No dejar basura que entorpezca el paso.

*La distancia de la pared y el paso tiene que ser de 1,5 metro o dos.

*No dejar los postigones abiertos en los horarios más concurridos.

*No dejar macetas en el medio.

*No poner cestos de basura en lugares que bloqueen el paso.

*Las obras en construcción también deberían estar bien delimitadas.