Rugby – Patricio Noriega en Villa María

El ex-Puma, actual entrenador del Racing 92 de Francia, volvió al club que asesoró para ser campeón histórico en 2008 y destacó, entre otras cosas, “la calidad de entrega” del rugbier local

Agradecido del reconocimiento y la admiración que se le brindó en Jockey Club, Patricio Noriega volvió a Villa María para disfrutar un tiempo con amigos y descansar, antes de volar a Francia, donde sigue siendo uno de los entrenadores de rugby más destacados.

Semejante visita no pasó desapercibida por el club, no solo por lo que fue el Pato como Puma y lo que es hoy como conductor de grupos, sino también por lo que significó en 2008, cuando asesoró al grupo que terminó erigiéndose en el campeón histórico de la Unión Cordobesa de rugby, de la mano de su amigo, Juan Pigni.

“Para mí siempre es un placer y un honor de poder tener la posibilidad de trabajar en un club tan apasionado por este deporte y disfrutarlo”, afirmó Noriega, en el predio del club villamariense.

Como actual entrenador de Racing 92, que pelea en puestos importantes y se resalta en Europa, Noriega podría elegir participar en otros clubes argentinos como ayudante, asesor o simplemente como amigo de la casa. ¿Por qué lo hace en Jockey? Tiene sus grandes razones:

“Me sedujo el ADN y la cultura de rugby que veo acá y en los jugadores cuando entran a la cancha, que representa lo mejor que hay de rugby en la Argentina, teniendo en cuenta una situación global de rugby”, expresó. Y añadió: “En general, el rugby argentino es amateur, lo viene a jugar el que le gusta y se suma a un club para ser mejor persona y disfrutar, pero la entrega máxima total que vive el club, con sus muchachos, es enorme. Desde el primer día que llegué acá me sedujo la calidad de ese argentino”. Además, recalcó: “Siempre me preguntaba por qué un jugador de Villa María tiene esa calidad de entrega”, y concluyó: “Pensé que esa rivalidad que tiene Jockey con sus hermanos vecinos San Martín es un factor fundamental en esa particularidad que tiene el club. Esa rivalidad genera, alimenta o desarrolla esa particularidad especial que tienen los jugadores. Yo admiro eso”.

Con espíritu

Consultado sobre si notó muchos cambios con respecto a 2008, Noriega sostuvo que “el espíritu es el mismo, también la misma alegría, la mismas ganas que tiene el grupo”.

“Este es un club familiar que trata siempre de tirar para adelante, sin importar las condiciones ni adversidades; siempre juntos, con una sonrisa. Eso es un ejemplo para tener”, manifestó.

El Pato se movió por el club recibiendo afecto, dio charlas y hasta le enseñó movimientos al equipo del rugby femenino, plasmando toda su sabiduría.

Tranquilamente podría hacer lo mismo en la selección argentina, por ejemplo, teniendo en cuenta que fue un destacado puma y que también jugó un mundial para la selección de Australia. Por eso tiene autoridad cuando dice que ve a Los Pumas con “muchas posibilidades” para el Mundial 2019.

“Lógicamente, paso a paso, a los partidos hay que ganarlos todos, pero el trabajo que se hizo en los últimos seis años tiene un valor para darle fundamento y bases para ir y llegar bien al mundial. Y eso es algo que todo argentino anhela. Hay que ser positivos y esperar que surja el ADN puma, que deje bien representado a la cultura del rugby argentino”, amplió.

Por otra parte, Noriega destacó el trabajo de Mario Ledesma como entrenador de Los Jaguares: “Lo conozco porque trabajó en Francia y Australia. Junto a Nicolás Fernández Miranda hacen una dupla muy buena, así que sé que van a hacer las cosas bien”, sostuvo.

Más allá de esto, Noriega sueña con dirigir a Los Pumas.

“El sueño máximo que tengo como entrenador de rugby es entrenar a Los Pumas, es mi mayor anhelo y no lo voy a ocultar”, expresó.

Mientras tanto, sigue cumpliendo los 11 años de contrato con Racing 92, donde entrena a figuras de la talla de “El Súper hombre”, el neozeolandés Dan Carter, los argentinos Juan Imhoff y Patricio Albacete, y el francés Yannick Nyanga.