Los centros de estimulación temprana continuarán recibiendo a los niños durante las vacaciones de invierno. La directora de niñez, Sara Pereyra, aseguró que es alto el porcentaje de adultos que se acercan a los espacios

Las tres salas cuna de la ciudad de Villa Nueva permanecerán abiertas durante el período de vacaciones de invierno en las escuelas primarias y secundarias de la provincia.

Allí asisten niños desde los 45 días hasta los tres años, con quienes se trabaja en la estimulación temprana principalmente. Siendo este un término relativamente nuevo para algunos adultos, desde la dirección de niñez y familia de la Municipalidad se promovieron en la semana distintos talleres destinados específicamente a padres y madres que llevan a sus hijos a las salas cuna.

Con un taller en cada espacio, se explicó a los progenitores mediante la proyección de un documental, folletería y charlas, todo lo referido a la conducta y el crecimiento del niño de acuerdo a la edad que se encuentre transitando.

Así lo informó la directora de niñez y familia del municipio villanovense, Sara Pereyra, quien destacó la importancia de la realización de los cursos para derribar ciertos mitos que existen en torno a la estimulación temprana.

“Se suele asociar a un déficit o a alguna enfermedad. La idea es modificar eso, porque la estimulación tiene que ver con potenciar lo que el niño trae”, resaltó la funcionaria, al mismo tiempo aclaró que si bien la metodología permite la detección de algunas patologías de manera temprana, “pero esto no significa que al resto de los niños no haya que estimularlo”.

En ese sentido señaló que se transmitieron a los padres distintas técnicas para aplicar de acuerdo a las edades de cada chico y cuestiones relacionadas al uso de la tecnología.

“Se interesaron mucho en los talleres porque para muchos era un tema desconocido, no tenían en claro qué es la estimulación temprana y a qué apunta”, comentó Sara Pereyra.

La responsable del área de niñez de la vecina localidad contó que los padres primerizos son los que suelen presentar la mayor cantidad de dudas, “por ejemplo, sobre la edad en que empiezan a caminar. Uno le explica que hay parámetros, pero depende de cada niño en particular y los estímulos que reciben desde pequeños”.

Mas tiempo

con los hijos

La directora de Niñez y Familia de la Municipalidad de Villa Nueva, Sara Pereyra, aseguró que “se nota un cambio” en los niños que asisten a las salas cuna luego de las vacaciones de invierno de sus padres.

Si bien los espacios siguen funcionando para los menores, la profesional aclaró que el tiempo de que disponen los progenitores para sus hijos cuando regresan a sus hogares es lo que hace la diferencia.

“Los padres vienen y nos dicen que ven cómo sus hijos incorporan ciertos hábitos, muchos relacionados a la alimentación y la higiene. Esto hace que los adultos se relajen en el segundo semestre”, afirmó.

Días atrás, se entregaron los informes evolutivos de cada uno de los asistentes a las salas cuna, lo que generó distintas reuniones con los responsables de los 180 niños que forman parte de esos tres espacios.

Cabe recordar que la sala cuna Arturo Illia se ubica en la esquina de Deán Funes y 25 de Mayo, en barrio Centro; la Justo Páez Molina, en avenida Carranza esquina Soldado Reina, y la sala cuna Los Olmos en Malvinas Argentinas esquina Cárcano.

“Es el primer espacio de socialización que el niño tiene fuera de la casa”, enunció encargada de Niñez, Sara Pereyra. La funcionaria comentó que los padres se fueron sumando en forma creciente a los centros de educación temprana y calificó como “un logro” hacer que participen, “ya que muchas veces se les complica”.

También aclaró que se sumaron tanto en tareas dentro de las instituciones como en consignas a trabajar en sus propios hogares.

Recientemente, en los actos tanto del 25 de Mayo como del 9 de Julio, “se les pidió a los mismos padres que se vistan de la época y participen en los actos”, relató Pereyra.

Consultada sobre en qué porcentaje de adultos se observa una participación activa, dijo: “Cerca de un 80% responden. Cuando no pueden mandan a algún familiar”.