Desde la biblioteca precisaron que por el aumento en el costo del libro, más personas se acercan a la Medioteca
Ayer por la mañana se llevó a cabo la habitual conferencia de prensa alusiva a la compra anual de la Medioteca Municipal Mariano Moreno en la Feria del Libro de Buenos Aires.
En la 43º edición del evento internacional, la institución municipal invirtió en total 110 mil pesos y adquirió 720 títulos, que se agregan a la amplia oferta bibliotecaria (actualmente se cuenta con alrededor de 65 mil volúmenes).
De dicha cantidad, 26 mil pesos (sólo 20% más que en 2016) fueron aportados por la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (Conabip), a través del programa “Libro%”, con el cual se obtiene un descuento del 50% del precio de tapa de caja ejemplar, más 75 mil pesos por parte del municipio local y cerca de seis mil pesos cedidos por la Asociación Cooperadora de la Medioteca.
“La mayoría de las bibliotecas van sólo con el subsidio de la Conabip, el cual te exige comprar por 13 mil pesos como mínimo. Nosotros volcamos todo el dinero aportado a la adquisición de libros. Por eso, algunos stands se sorprendían por la cantidad que llevábamos”, indicó Anabella Gill, la directora del establecimiento.
Novelas históricas y eróticas
Consultada sobre el criterio de compra, Gill precisó que “de acuerdo a lo que nos señaló nuestro equipo que estudia la colección, adquirimos libros infantiles, repusimos novelas muy leídas (Viviana Rivero, Florencia Bonelli, John Grisham o John Katzenbach), novedades (el último de Claudia Piñeiro, las reediciones de Abelardo Castillo, fallecido mientras se desarrollaba la Feria, materiales de neurociencias), junto a títulos de sagas juveniles (como la versión en papel de la serie “13 reasons why”, de Netflix) e historietas, más novelas históricas y eróticas, que son las más pedidas actualmente. En este caso, no le prestamos atención al libro universitario”.
Respecto al año anterior, remarcó el incremento del costo del libro, en “un 40% en relación a 2016, por eso se ha disminuido la cantidad de ejemplares comprados”. Por tal motivo, percibe una mayor asiduidad en los usuarios de la Medioteca: “En épocas de crisis se ve el aumento del lector adulto. En el lector infantil es más estable, mientras que el lector adolescente consume libros, pero también en forma digital”.
