La destacada artista internacional arribará por primera vez a nuestra ciudad para respaldar su tercer álbum grabado en Inglaterra. Antes del show habló de su separación de La Oreja de Van Gogh

“No conozco Villa María y quisiera conocerla. Sé que tiene un festival muy famoso”, comentó Amaia Montero, quien se presentará el sábado en el Teatro Verdi (Yrigoyen 318).

En gira por Argentina, la cantante española respondió algunas preguntas antes de su primer arribo a estas latitudes.

-En un diario uruguayo comentabas que allá te compraste el kit de mate. Cuando llegaste a Argentina, ¿qué compraste?

-La verdad es que vivo entre el avión, los hoteles y la carretera. Ahora no he tenido tiempo de nada. La gira comenzó en Chile y vivo viajando y haciendo promociones.

-El sábado vas a presentar tu tercer disco “Si Dios quiere yo también”, que fue grabado en Inglaterra y supervisado por el técnico sueco Martin Terefé (quien ha trabajado con Miguel Bosé y Jesse y Joy entre otros). ¿Cómo has encarado esta producción y cómo has tomado la aceptación del público?

-La aceptación ha sido muy buena tanto por parte del público como por la prensa. Se nota una evolución en el sonido como en las canciones. La grabación fue prácticamente en directo con una energía que se nota mucho en el disco. También creo que se ve una mayor madurez en las letras. Y en el vivo uno cree que las canciones nuevas van a tardar en conocerse respecto a las canciones más antiguas pero el público, por suerte, se las saben a todas.

-Cuando uno indaga en la biografía del grupo lee que apenas se formaron, vos le dijiste al sello Sony que tenían 25 temas cuando en realidad tenían tres o cuatro. ¿Pensaste que de aquella época llegarías adonde estás ahora?

-La verdad es que no. Fue toda una auténtica locura. En aquella época, me acuerdo, estábamos en verano. Todos en la playa y nosotros recluidos en un local, medio como un subterráneo. Estábamos casi de color verde (risas). Teníamos sólo cuatro temas y malos. Así que trabajamos sin parar para hacer los demás. Empezó el sueño que jamás pensábamos que podía pasar.

“La decisión más difícil”

-¿Fue complejo separarte de La Oreja?

-Fue la decisión más difícil que he tomado. Me ha costado emprender la vida solitaria. De todos modos me siento afortunada por haber vivido la mejor parte de un grupo. Por eso creo que en este tercer disco hago una autodefinición de mi carrera.

-¿Cómo ha sido reunirte nuevamente con Alex Ubago, luego de 15 años, para hacer un dueto en el tema “Los abrazos rotos”?

-Con Alex me llevo muy bien. Nos tenemos mucho cariño y en lo profesional con las dos voces se crea algo especial. Cuando cantamos somos uno. El volver a juntarnos surgió desde el corazón. El dice que soy su madrina musical y yo lo quiero como a un hermanito.

-Vos decís que las canciones del disco transmiten la idea de “entregarse a la vida”. ¿Qué querrías significar?

-Es una filosofía de vida. Uno cree tener planes y viene la vida y te los cambia. Creo que ella tiene un plan para cada uno de nosotros. A veces algo que sucede en el momento nos parece negativo puede que en unos años eso sea lo mejor que te ha pasado. Hay que saber tranquilizarse y entender las señales, sin dejar de dejar de lado los objetivos personales.

Entradas. Desde $250 a $550.