Con un plazo de ejecución de 24 meses “la ciudad tendrá una solución definitiva al problema del escurrimiento de aguas”, indicó el intendente. Se irá poniendo en funcionamiento por tramos, a medida que se ejecute

La visita del gobernador Juan Schiaretti trae a la ciudad un importante anuncio, que cambiará la vida de los vecinos.

Hoy a las 16.30, en el Auditorio Antonio Sobral, el intendente Martín Gill recibirá al mandatario provincial, quien firmará el contrato para la construcción de nuevos desagües pluviales en la ciudad, quizás la obra de infraestructura más esperada por los villamarienses.

En dialogo con EL DIARIO, Gill explicó que esta firma es parte de un plan integral que abarca varios aspectos. “Por un lado tenemos el plan hídrico que ordena el escurrimiento de las aguas por vía superficial, que ha sido ya presentado a la provincia y a través del cual se empezará a ejecutar un conjunto de obras que no sólo tiene que ver con cómo sacar el agua de la ciudad sino con un tratamiento integral en el sector rural”.

Hoy la ciudad tiene distintas lagunas de retención, pero algunas tienen su capacidad completamente agotada: “Necesitamos concatenar sectores, tener bombas, todo un plan que se ha trabajado de manera integral con el equipo técnico del municipio y hoy está evaluando la provincia y que aprobado, ejecutaremos”.

Por otro lado, esta el sistema de desagües subterráneo: “Después de la década del 40, la obra que se va a ejecutar duplicará los desagües de la ciudad”, afirmó el intendente.

En total, la zona beneficiada será de unas 350 hectáreas, comprendiendo la zona céntrica y barrios aledaños, principalmente La Calera y Roque Sáenz Peña.

En total constará de tres grandes tramos: el primero, será un ducto de 1.860 metros desde bulevar Vélez Sarsfield hasta bulevar Sarmiento, por calles Rucci y Mariano Moreno; el segundo tramo tendrá una longitud de 990 metros, que recorrerá bulevar Sarmiento desde el bulevar Alvear hasta la calle San Martín y de ahí empalma con calle Mariano Moreno.

Por último, desde la calle Mariano Moreno se construirá un nuevo canal de doble capacidad de descarga que llegará hasta el río.

Dos años de obras

Se hicieron todas las evaluaciones, sólo falta la firma del contrato que hoy hará el gobernador. Una vez que se produzca el replanteo, en 15 días aproximadamente se estará en condiciones de iniciar la obra que durará dos años.

“Va a ser una obra que generará numerosos inconvenientes porque hay que abrir la ciudad y construir los desagües y luego reparar y tapar, pero es una solución definitiva a muchos lugares críticos de la ciudad”, planteó Gill.

Es una inversión de más de 105 millones de pesos, más las futuras actualizaciones, que hará el Gobierno de la provincia a través del financiamiento internacional que obtuvo con la emisión de títulos por la Agencia Córdoba de Inversión y Financiamiento (ACIF), por lo que no va a presentar ningún costo adicional para los villamarienses.

Solución definitiva

El intendente estuvo recorriendo los sectores de la ciudad más afectados por las lluvias del pasado día de Navidad. Al respecto expresó que están trabajando en los casos puntuales y que el plan integral que se concretará, incluye la coordinación de esfuerzos para palear los problemas de los vecinos, hasta que las obras estén terminadas definitivamente: “El agua ha escurrido en gran parte. La ciudad tiene un sistema al estilo embudo, pero cuando llueve en una cantidad enorme y supera la capacidad, en poco tiempo produce un derrame. Luego lo que queda comienza a salir con el paso del tiempo, transcurridas las horas y cesando la intensidad de las lluvias, sin embargo quedan sectores complicados. Hemos tenido caídas de árboles, postes de algunos servicios, lugares con mayor complicación en cercanía a las lagunas y estuvimos trabajando en la asistencia de algunas familias que sufrieron el ingreso de agua a sus viviendas”.

Además, explicó que no se puede intervenir en las calles hasta que se no se produzca una mejora temporal, que permita no generar un problema mayor.

Finalizadas las obras anunciadas, Villa María va a tener un sistema de escurrimiento de las agua y de recursos hídricos “que planteamos y esperamos sea modelo en otras ciudades”.

Cambio climático y crecimiento urbano

“La cuestión no es sacar el agua como a nosotros se nos antoja sino generar un sistema ordenado del escurrimiento de las aguas, con puntos de volcamiento ordenado y organizado”, manifestó Gill.

Según el intendente, se llegó a este punto en la ciudad porque hay una situación climática que es distinta a la que existía con anterioridad. Segundo porque la ampliación del eje urbano le suma impermeabilidad, no sólo a la mancha urbana, que antes tenía una capacidad de absorción mayor y que hoy, por el nivel de construcción, tiene una capacidad menor: “Antes el agua escurría y desde el fin del barrio Carlos Pellegrini o Felipe Botta, ya teníamos campo y no teníamos autopistas. Por lo tanto hoy tenemos una problemática mayor”.

“Además estamos trabajando para que cada loteador que quiera intervenir en un terreno, sepa que la solución que aporta para sacar el agua de sus lotes debe ser parte de una solución integral y que no le genere un problema a otro. Estamos previendo un programa para una ciudad que crece”, finalizó Martín Gill.

Todo el equipo del municipio trabajó directamente en el proyecto, que se elaboró en conjunto con la provincia y fue recibido con mucha valoración por el Ministerio de Aguas provincial.