Mesurado, sin ataques y con agradecimientos. Así se mostró el máximo referente de Cambiemos en la ciudad, Darío Capitani, cuando la victoria estaba sellada.
Más allá de la algarabía de los seguidores macristas, Capitani no se desbordó en sus declaraciones, aunque dijo estar “muy contento” por los resultados no sólo en Villa María, sino “en todo el departamento”.
“El triunfo fue contundente y es el segundo de este espacio en la ciudad, después de las PASO”, remarcó.
Sobre las expectativas que manejaba en la previa, Capitani fue claro: “Avizoramos esto por entender que la sociedad de Villa María había decidido cambiar respecto de su presidente, soñando y creyendo que hay una Argentina diferente. Lo asumimos con mucha responsabilidad porque la gente que acompañó a Macri lo hizo desde su cuota de esperanza”.
En ese sentido, destacó al “elector radical que acompañó desde las PASO”.
“La dirigencia del radicalismo local, en su inmensa mayoría, acompañó porque pensamos en lo que hay que construir hacia delante”, apuntó Capitani, para luego destacar a “Bustamante, Caronni, Lazzuri, Botta… Todos los que han sido trabajadores para esta campaña. Uno se satisface porque esta dirigencia histórica del radicalismo está acompañando”.
Entre todos, resaltó Capitani, hubo una sensación previa que la victoria cómoda se podía conseguir.
“En realidad, entendíamos que se abría una brecha entre la sociedad decidida a acompañar un proyecto de cambio en el proyecto nacional; lo sentíamos en las cuestiones diarias”, expresó. También recordó que “la visita de Mauricio (Macri) a la ciudad y el acercamiento del vecino con él, ayudó. Por eso creo que el triunfo es de la gente”.
No obstante, sostuvo que tomó al resultado “con absoluta tranquilidad”.
“Tenemos un desafío de los próximos cuatro años de construir una cuestión política, pero tenemos la madurez suficiente de saber que Villa María eligió al intendente Gill. Yo deseo que Mauricio sea presidente, pero deseo también que el trabajo de la Nación con Villa María sea importante”, agregó.
