David Reano
El técnico del Fortinero se lamentó por el 1-3 y las bajas por lesiones y pidió fortaleza para “llegar de la mejor manera” a la revancha
Por el lado de la derrota, Alumni sintió el golpe pero no se entregó. El elenco fortinero dijo estar sorprendido por cómo se mostró su rival en el segundo tiempo pero ya piensa en revertir todo esto.
Por lo que, su director técnico David Reano indicó que “no era lo mismo un empate o perder por un gol pero el partido se dio así y tendremos que afrontar esto como un nuevo desafío. Cuando arrancamos en enero dijimos que íbamos a tener muchos desafíos por delante, la mayoría los pasamos bien, otros no tanto, y este de Universitario lo tendremos que revertir”.
Siguiendo con el análisis, el nacido en La Palestina contó: “me gustó que siempre propusimos, algo que perdimos en el primer partido contra 9 de Julio, hoy (por ayer) lo intentamos pero nos faltó profundidad y continuidad, saber cuándo tenés que atacar y cuando no. Pero se va a mejorar todo eso cuando llegue la madurez del equipo”.
“Tenemos que recuperar los lesionados, Galleguillo y Kranevitter, éste último de gran primer tiempo y su salida nos descolocó, pero llegaremos a la vuelta de la mejor manera”, cerró el técnico.
Además, Patricio Peñaloza también se mostró dolido por la derrota en la ida de las semifinales de la Liga Villamariense de Fútbol: “nos superó un rival respetable, con mucha experiencia. Era un partido que podíamos imaginar así. En el primer tiempo estuvimos a la altura de ellos y fueron golpes duros los tantos en el complemento, porque quedamos como desganados y eso no puede volver a pasar, no podemos bajar ante cada gol del rival”.
“La revancha va a ser dura por lo que tenemos que revertir, pero estaremos en nuestra cancha, con nuestra gente y familiares, así que no podemos bajar los brazos”, finalizó.
Uno x uno
Scalzo: fue el mejor del partido pese a recibir tres tantos. Intervino como ninguno en el juego y sin dudas es el referente del equipo, más allá de su actuación individual. Tuvo bastante trabajo y se fue bajoneado como todos.
Peñaloza: no pudo pasar al ataque y Alumni se privó de sus avances por el lateral. Tuvo un duelo con Goroso del que nunca pudo salir.
S. Martini: nunca tuvo un jugador fijo a marcar, se le movieron constantemente y fue víctima de la confusión que le ocasionaron sus rivales.
Galleguillo: salió lesionado aunque intentó continuar y vio que no daba para más. No la pasó bien ante las embestidas de Acosta
Molina: generalmente el más regular de la defensa, y esta vez no fue la excepción. Cuando la historia estaba negra, siguió empujando desde el fondo pese a la adversidad.
Brugnaro: se quedó con la ganas de festejar luego de una exquisita pisada y definición contra el poste. Jugó lejos del arco y por ende no estuvo cerca del peligro.
Kranevitter: era el empuje de Alumni hasta que la lesión en su hombro derecho lo obligó a dejar el campo de juego. Su baja preocupa para el encuentro revancha.
Torelli: intentó estar cerca de Pratti y por momentos funcionó. Corrió desesperado como todo el equipo. Fue a buscar hacia adelante y dejó espacios propios del desorden
Herrero: su gambeta trajo alegría en el primer tiempo cuando llegó el gol, pero finalmente no gravitó en el desarrollo. Luego recibió un golpe ya con los tres cambios realizados y Alumni perdió piernas y oxígeno.
R. Martini: muy lejos del gol y de las posibilidades de marcar. Los centrales académicos lo controlaron de cerca y jamás pudo perforar la resistencia.
Núñez: más allá del gol, su participación fue escasa. La pelota no le llegó e intentó buscarla demasiado atrás. Perdió terreno y referencia, pero tuvo los ojos bien abiertos cuando le tocó definir.
Navarro: ingresó por la lesión de Kranevitter e intentó dar juego en la mitad a través de su precisión. No fue al choque porque necesitaban de su fútbol, pero tampoco pudo crear peligro.
N. Delsole: entró para darle mayor peligrosidad a su equipo. No gravitó.
Medina: remplazó a Galleguillo como central, pero debió lidiar con un final contundente del rival.
