Inicio Regionales Inclutel: la inclusión es un hecho

Inclutel: la inclusión es un hecho

0
Inclutel: la inclusión es un hecho
El momento en que Jusid, Broiero y Peralta cortan la cinta rodeados de autoridades y afectos

La comunidad participó de la puesta en marcha de la cooperativa integrada por tres jóvenes ciegos que brindan servicio de atención telefónica y de programación y asesoramiento informático, única en la zona y que busca quitar miedos y prejuicios, expandiendo los valores del cooperativismo

El momento en que Jusid, Broiero y Peralta cortan la cinta rodeados de autoridades y afectos
El momento en que Jusid, Broiero y Peralta cortan la cinta rodeados de autoridades y afectos

La locutora Mara Schönfeld se encargó de conducir el acto. Jonatan Catalán fue el responsable de los equipos de sonido. La joven llegó desde su Cosquín y el sonidista, desde Pilar. Son dos personas ciegas que llegaron para acompañar y apoyar a sus amigos de la única cooperativa integrada por personas con esa discapacidad. Las instituciones y la comunidad dieron marco además para que ayer Jonatan Jusid, Bruno Broiero y Julio Peralta avanzaran en el gran proyecto con una sede propia: Inclutel.

Familiares, amigos, muchos vieron ayer la puesta en marcha de un enorme proyecto que genera puestos de trabajo dignos y para quienes se les hace muy difícil conseguir un empleo, logrando “que la inclusión no sea sólo una frase hecha”, tal como lo marcaron los oradores en la inauguración.

Videla en uso de la palabra, detrás, Mara, la locutora oriunda de Cosquín. Al fondo, Bruno, Julio y Jonatan
Videla en uso de la palabra, detrás, Mara, la locutora oriunda de Cosquín. Al fondo, Bruno, Julio y Jonatan

Inclutel brinda servicio de atención telefónica y de programación y asesoramiento informático. Pero en realidad es más que eso. Impulsada desde la Cooperativa de Provisión de Obras y Servicios Públicos, Sociales y de Vivienda de Oliva Limitada, la flamante empresa de la economía social convocó ayer para la inauguración de su local (en la galería Simondi), de la calle Colón al 271, a representantes de esa entidad y Jóvenes Cooperativistas Solidarios, a directivos de instituciones educativas de la ciudad, representantes de FACE, de la Subsecretaría de Cooperativas y Mutuales, de gremios, de cooperativas amigas, empresarios y autoridades municipales encabezadas por el intendente Oscar Tamis. Los discursos fueron celebrados y el corte de cintas, una fiesta.

 

El mejor camino

El primero de los que hizo uso de la palabra fue Maximiliano Peñeñory, de Cooperativas y Mutuales de la Provincia, quien marcó que “no se puede elegir mejor camino que el del cooperativismo”, y auguró que Inclutel pueda “ser un faro”. También hizo entrega de la resolución que inscribe a la novel cooperativa en el Registro Permanente provincial e hizo entrega de una bandera del cooperativismo.

 

No tiene techo

Raúl Montenegro, presidente de la Cooperativa de Provisión, siguió en uso de la palabra y agradeció a cada uno de los que de alguna manera aportaron a este emprendimiento.

“Hace varios años, cuando comenzó el Plan Primer Paso (PPP), incluimos en el plantel a todos los que abarcaba el programa y personas con discapacidad, y haber llegado al logro de hoy nos pone contentos porque nosotros aprendemos de ellos”, dijo, para elogiar la independencia y la desfachatez de Jusid, Broiero y Peralta: “Estos son tres monstruos, muy especiales, que no dependen pero que saben que la discapacidad siempre acarrea una dificultad. Los patitos pedigüeños, como les digo, son realmente eficientes, responsables y muy buenos en el servicio que prestan a la cooperativa”. En ese marco, agradeció a la empresa fabricante de cocinas La Mágica, que ya confirmó la contratación de la atención telefónica a Inclutel.

Recordó que tras los PPP comenzaron a pensar en la estabilidad laboral de las personas con alguna dificultad y “hace un año se iniciaron trámites”, “pero no es fácil”, deslizó, aunque destacó buscar “la posibilidad porque el trabajo dignifica y es necesario”.

“Pero esta cooperativa no tiene techo”, dijo Montenegro, y aclaró que la entidad que preside “no le regaló nada, le prestamos, le dimos un empujoncito, los capacitamos (a partir de Fomento Cooperativo también). No dimos más de lo que devuelven y pagan con su trabajo. Esto, además, nos pone pilas (como dicen los chicos, sostuvo) y hace que nos den más ganas de hacer cosas. Estimula”, aseguró.

Y citó finalmente: “Las personas, como las aves, son distintas en su vuelo, pero todas tienen derecho a volar”.

 

Más cosas

“Este es un logro de los chicos y fundamentalmente de la Cooperativa de Provisión”, dijo a su turno el intendente Tamis. Marcó que “será propicio para llevar adelante más cosas” y confirmó el dato anticipado por Montenegro respecto a un aporte de 15 mil pesos a través del Ministerio de Gobierno de la Provincia, que ya fueron depositados a las arcas del municipio para remitir a la cooperativa, gestión que nació en la solicitud de una de las abuelas de los integrantes de Inclutel.

 

La causa

Dalmiro Videla, de la Unión Cordobesa de Ciegos, manifestó que “el cooperativismo llega muchas veces a donde el brazo del Estado, por diversas causas, no puede llegar. Quizás cueste a la cooperativa dimensionar este logro de hoy. Dirán, sin embargo, con el paso de los años: ‘Pensar que fuimos parte de todo esto…’”.

“Pero lo importante es que ustedes abracen la causa, la gente puede defraudar, pero lo importante es lo que nos moviliza, la causa”, dijo a los jóvenes integrantes de Inclutel.

 

Uno a uno

“Este es un logro en el camino y también es el inicio”, disparó Bruno, el tesorero de la conformada cooperativa y el primero de los tres al hacer uso de la palabra.

Añadió que “la cooperativa nos formó mucho para empezar este sueño y debo agradecer a mi familia, al Instituto Manuel Belgrano, especialmente a Daniel Fulgenci y Mario Gatti, ellos me han ayudado, porque nos enseñaron que todo tiene un propósito. Y también debo agradecer a la cooperativa porque gracias a ellos he podido llegar a concretar otro sueño, el de la casa propia, en la ciudad de Hernando. Debo agradecer también a Georgina, con quien próximamente celebraremos casamiento, y a su familia, porque ahora son parte de mi presente y del futuro”. “A mis compañeros por habernos cruzado, agradezco. Ahora tenemos un proyecto grande”, cerró Bruno. Julio, el flamante secretario, le siguió en los mensajes: “Hay muchos agradecimientos que dar, pero es especial para Claudio Rossi, quien tuvo esta idea y siempre estuvo con nosotros. A mi familia por su apoyo, a la cooperativa y a los jóvenes cooperativistas, que siempre pasan, preguntan, charlan, se preocupan por nosotros”.

“Después de mucho tiempo volvimos a encontrarnos para llevar adelante este proyecto de vida”, apuntó.

Jonatan, el presidente, se encargó de cerrar la lista de oradores. “Llegar a la Cooperativa (de Provisión de SP) es llegar a casa. Siempre nos atienden como reyes. Ahora necesitamos que nos acompañen en este proyecto”. Y elevó su responsabilidad: “Nosotros ahora tenemos que trabajar para que esa familia que constituya Bruno se sustente”.

 

Valorar capacidades

“Que la inclusión no sea sólo una frase hecha, sino un hecho. Tenemos que empezar de una vez por todas a valorar las capacidades. Espero que ustedes no tengan miedo, pregunten, hablemos de igual a igual. Los prejuicios van a la basura, hablemos de igual a igual. Bienvenidos a Inclutel”.

Jusid interpretó un tema musical junto al saxofonista local Nicolás Rossi. El cura párroco Mariano Pérez realizó la invocación religiosa y los cooperativistas junto a las autoridades presentes procedieron al tradicional corte de cintas.

Los jóvenes solidarios y amigos sirvieron un ágape, posaron para las fotografías, dialogaron con los amigos, besaron a su novia, volvieron a agradecer. A Simondi, a Fioni, a la Cooperativa, a los familiares, a las instituciones, a la comunidad, a los que dejan a un lado los prejuicios, a los que apoyan, a los que pierden los miedos, a los que tratan de igual a igual, a los que ponen delante sus sueños y asumen el derecho a volar.

 

De acá a La Quiaca

Claudio Rossi, coordinador general de la Cooperativa de Provisión, explicó a un cronista de EL DIARIO que “ante la necesidad de nuestra entidad de contar con un servicio de calidad de atención telefónica, fue planteado en el Consejo de Administración, y tomando conocimiento de la dificultad de conseguir empleo (de Jusid, Broiero y Peralta) comenzamos a gestar esta idea”.

“Ahora se abren muchas más posibilidades, porque un chico de otro punto del país, de La Quiaca, podrá utilizar esta base para ofrecer el servicio, por ejemplo, al municipio de allí, sin necesidad de generar una dependencia laboral ni riesgo para quien contrata. Podrá asociarse y capacitarse con Inclutel para brindar esta propuesta” nacida en Oliva.

“Ellos podrán ir a capacitar, brindar el servicio y recibirán a cambio los correspondientes gastos administrativos, como se denominan, para sostener la cooperativa y que dignifican su trabajo”, dijo Rossi.

Indicó además que “el trámite que debe realizar esta cooperativa para prestar su servicio en otra provincia es comunicarlo al órgano competente”.

También precisó que quienes se interesen por estos servicios pueden comunicarse con quien proponga o con la oficina nueva de Inclutel (cuenta con Facebook).

Print Friendly, PDF & Email