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La Revista, la realidad que nos gusta

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La Revista, la realidad que nos gusta
Elegimos comenzar con la solidaridad en la puerta de entrada del cuarto número: se trata de un puñado de vecinos que salvaron de un remate la histórica capilla Garzón

Este domingo, el cuarto número – Acompaña a EL DIARIO con sus 32 páginas a todo color

Una capilla que estuvo a punto de ser rematada y fue rescatada por vecinos,  la nueva ley de trasplante de órganos que dice que ahora todos somos donantes,  la sección El personaje que evoca en este número al profesor Espíndola, un cuento “cuartetero”, los “títeres virtuales” de Ancarani, la Tana de las pastas, el Lechuzón, la moda, los cumpleaños del mes… y mucho más

 

Muchas veces se ha dicho que las crisis, las dificultades, generan oportunidades o abren espacios por donde suele colarse la creatividad como herramienta para salir adelante. Los 58 asociados a Cooperativa Comunicar sabemos de ello y cuando mucho de lo cotidiano parece oscuro y contrario, decidimos ofrendar a Villa María, Villa Nueva y la región un nuevo medio de comunicación: La Revista del centro del país, que parecía una utopía con el papel, la tinta y las chapas de impresión a precio dólar.

Pero esto es así. No creemos en la teoría del achique. Más bien, pensamos -como Roberto Arlt, el escritor del flequillo rabioso que nos roció de aguafuertes como aguardientes-, que de acá se avanza con imaginación y “prepotencia de trabajo”.

 

Desde marzo

Empezamos en marzo, para presentar (y recordar) en la portada a nuestros excombatientes en vísperas del 2 de abril. Seguimos en mayo, para traer a la memoria colectiva a Mariela Bessonart, de cuya desaparición se cumplen ya más de 153 meses sin que se haya hecho justicia. En este mes de junio que se nos termina, el del Mundial de fútbol se llevó la tapa Mario Kempes, el bellvillense goleador del campeonato disputado en la Argentina hace 48 años. Y para julio elegimos comenzar con la solidaridad en la puerta de entrada del cuarto número: se trata de un puñado de vecinos que salvaron de un remate la histórica capilla Garzón. La unión hizo la fuerza y dio lugar a una historia que merecía ser contada.

Como también merecía su lugar el profesor Juan “el Negro” Espíndola, aquel que lució en el mediocampo de Central Argentino, en el equipo de Antonio Sobral y que se puso la camiseta del cooperativismo para no sacársela nunca más. Lo recuerda su “amigo del alma” Eduardo Marzolla, en la sección El Personaje, la que dedicamos antes a nuestro periodista Raúl José, la escritora Edith Vera y el fotógrafo Francis.

Además, incluimos en esta cuarta entrega que llegará mañana a sus manos junto a EL DIARIO, notas de interés general como la que reseña la nueva ley de trasplante de órganos, que dice que ahora todos somos donantes.

Y no es todo. Un cuento “cuartetero” de Gorno, los “títeres virtuales” de Ancarani, la gastronomía desde la cocina de la Tana de las pastas, la moda desde Marvills y London, las ocurrencias del Lechuzón,  los cumpleaños del mes, el humor mundialista de Daniel Sánchez, el horóscopo, los cumpleaños del mes, los juegos de ingenio de Revistamente… y una infografía que te repasa las nevadas históricas sobre la ciudad, cuando el termómetro se está clavando bien ahí, abajito…

 

Una gran familia

En fin. Nada de achique, cada día un poco más. Porque de los productos de esta Cooperativa no dependen solamente 58 familias, sino que, EL DIARIO y La Revista son sustento indirecto de otros muchos hogares que nos hacen saber que es “lo que más venden” cada jornada. Son muchas familias las que forman esta gran familia.

Con todos ellos, con nuestros anunciantes, que nos confían “su vidriera” para que la expongamos en más de 30 localidades, nos abrazamos para avanzar.

Para nuestros lectores, nuestro compromiso de seguir pensando cómo mejorar el que es el diario de Villa María desde hace 34 años. Saben que estamos abiertos a sus inquietudes, a sus ideas (“Los lectores también escriben”), para que nos corrijan, nos acerquen ideas de personas y lugares que puedan ser rescatados en nuestras páginas.

A todos, gracias por estar. Nosotros también vamos a seguir acá, “con ganas de renovar”, como dirían Pedro y Pablo, en aquel hit sesentista que proclamaba “yo adoro a mi ciudad… yo quiero a este pueblo… porque me da infinitos deseos de contarles y de cantarles mi novedad, mi novedad, mi novedad…”.

Cooperativa de Trabajo Comunicar

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