Fábrica Militar – Crece la incertidumbre

Concretaron la asamblea anunciada en el marco de una vigilia a las definiciones que se toman en Buenos Aires

Los trabajadores de la Fábrica Militar de Pólvoras y Explosivos de Villa María cumplieron con la medida anunciada, la asamblea frente al acceso principal al predio castrense, y además cortaron la ruta provincial 2 a esa altura, en defensa de los puestos de trabajo y la preocupante amenaza de cierre de la planta.

Así lo manifestaron los participantes de esta protesta, que comenzó a las 1 de la mañana y unió cerca de las 13 a los dos turnos de empleados (los que ingresaron al mediodía marcaron en el reloj de control y se sumaron al reclamo). Mientras tanto, en Buenos Aires se definía su futuro, aunque nada había trascendido por esas horas, las 14.

Precisamente en la Capital Federal, el director de Gestión de Personas de Fabricaciones Militares, Fernando Esperanza, y el subinterventor de esta dependencia del Ministerio de Defensa, Ricardo Casal, recibieron a los directores de las plantas de Fabricaciones Militares del país, para evaluar cuestiones productivas y del personal (sobre el que se aplicaría el ajuste).

Los trascendidos más temidos apuntan medio centenar de telegramas a partir del 1 de septiembre, lo que pone en situación de incertidumbre a los trabajadores.

El mensaje claro

En el marco de la asamblea, los referentes de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), se pronunciaron con preocupación, pero con un claro mensaje. “Ya no solo estamos defendiendo la pérdida de puestos de trabajo, estamos defendiendo el cierre de la Fábrica Militar de Villa María y tenemos que resistir. La Fábrica que no lo haga, la cerrarán”, coincidieron a su turno el secretario general Fernando Mercado, también Oscar “Cacho” Mengarelli, Jorge Heredia y el titular de ATE Córdoba, Luis Bárcena, quien llegó acompañado por Alejandro Murúa y Víctor Lecuona, también de la conducción provincial. Participó además el sindicalista de ATE en ANSES, Héctor Godoy.

Comparado a los 90

Para el gremialista Gustavo Vílchez, de ATE y electo la semana pasada como secretario general de la CTA Autónoma en Villa María, “el pedido es a solidarizarse, primero entre nosotros, y buscar mayor cantidad de compañeros para marchar la semana que viene (fecha a confirmar) en Buenos Aires, con todas y por todas las plantas del país frente a Fabricaciones Militares”. Al respecto, indicó que estará hoy en Buenos Aires definiendo con la dirigencia de ATE Nacional, la fecha de movilización.

En el mismo aspecto, informó que esta noche, a las 20, se estarán reuniendo integrantes de la Multisectorial y CTA en las instalaciones de ATE (Santa Fe 1559), para delinear nuevas medidas, entre ellas marchar para concientizar en la ciudad el próximo viernes por la noche, y hacer entender esta situación que se compara a los 90, lo que fue una masacre, y decirle a los vecinos que vienen por el cierre de la Fábrica”.

Sostuvo además que “el ajuste no se hace donde debe” y que “importar algodón de Brasil y no comprarlo en Chaco, para la producción de nitrocelulosa, que es una de las materias prima base para producir pólvora y dinamita, solo sirve para justificar el poder decir que la Fábrica no es rentable, ni autosustentable ni viable”. “Lo que hacen es achicar el personal. Advertimos un achique meses antes, para diciembre y se cumplió, ahora se viene otro achique y luego van a decir que con esta cantidad de gente no se puede sostener una producción, y van a cerrar”, concluyó Vílchez.

Otra vez Gendarmería

Cuando los trabajadores llevaron a cabo el corte de la ruta, se activaron las alarmas y además de personal de la Policía de la Provincia de Córdoba, también se hicieron presentes efectivos de Gendarmería Nacional. Como sucedió el sábado, apenas unos minutos después, se retiraron y solo quedaron los dependientes de la Departamental de Policía controlando por la seguridad vial.

El número 358 – otra preocupación

Otra preocupación que corrió fue la situación en la Fábrica Militar de Fray Luis Beltrán, provincia de Santa Fe, donde se vienen produciendo despidos también y, de los 358 trabajadores, el 95% es contratado.