Tanto la Municipalidad como la Policía iniciaron una investigación para determinar la responsabilidad de los agentes que intervinieron en el “cuento del tío” contra el jefe de Seguridad Ciudadana de Villa María

Al principio, todo se gestó como una broma: en el grupo de WhatsApp que tienen en común los policías e inspectores de seguridad ciudadana que realizan el recorrido nocturno por los distintos cuadrantes en los que se dividió la ciudad, enviaron un mensaje hablando de un procedimiento exitoso. Dijeron que habían detenido un vehículo en el que se conducían al menos tres personas con armas y que habían logrado secuestrar elementos que comprobaban hechos ilícitos.

El mensaje le llegó al titular de Seguridad Ciudadana, el comisario retirado Carlos Vivas, quien celebró el “éxito” del procedimiento y, además, se lo comunicó al intendente Martín Gill para destacar lo positivo que resulta el trabajo conjunto entre Municipalidad y Policía de la Provincia.

Sin embargo, todo había resultado un engaño. El procedimiento no existió y el mensaje que circuló era para hacer “una broma”.

Cuando las autoridades municipales descubrieron el ardid, iniciaron una investigación. Así lo informaron oficialmente: “Habiendo tomado conocimiento de un informe ficticio sobre un procedimiento que no sucedió, a los efectos de hacer una broma entre personal afectado al Plan Cuadrantes, desde la Subsecretaría de Seguridad Ciudadana, se ha ordenado la investigación sumaria a los fines de determinar las responsabilidades y sanciones que puedan corresponder por tal acción”, indicaron.

Son dos los agentes municipales implicados en el tema y una vez que concluya la investigación, determinarán las sanciones.

Por otra parte, desde la Departamental San Martín de la Policía de la Provincia, el titular Héctor Luis González, dio ayer una conferencia de prensa informando que ellos iniciaron un sumario y giraron al Tribunal de Conducta los informes del hecho.

“Nosotros tomamos conocimiento a través de un informe producido por la Municipalidad”, comenzó diciendo González. “A partir de allí, pusimos inmediatamente en conocimiento al Tribunal de Conducta Policial”, agregó.

“Esperamos que ese organismo disponga una sanción ejemplificadora, porque somos una institución seria y responsable y no podemos ser parte de la difusión de hechos ficticios”, planteó.

Si bien no proporcionó oficialmente la entidad de los policías que participaron de la “broma”, se refirió a que son dos suboficiales; uno de ellos con categoría de cabo y el otro, de sargento.

Por otra parte, no dejó de señalar que más allá de este hecho puntual, “el sistema de los cuadrantes está funcionando bien. Estamos sumando esfuerzos entre Policía y Municipalidad y se realizan procedimientos reales, que son una forma de darle respuestas a la gente que tiene más presencia de seguridad en las calles”.

El engaño, según pudo conocer EL DIARIO, ocurrió la semana pasada en el sector del Plan Cuadrantes que tiene como uno de los ejes del recorrido al barrio Felipe Botta.