Los productos para niños y los juegos de luces lideran las ventas. Los precios sufrieron entre un 30% y un 40% de aumento con respecto al año pasado. Hay 15 comercios habilitados
A pesar de las miles de campañas contra su uso, del rechazo de los amantes de los perros, del pedido de padres de niños que sufren autismo o enfermedades que les afecta, la pirotecnia resiste.
Si bien ya no se observa la misma cantidad de locales de ventas que años anteriores, hay quienes siguen eligiendo estos productos para celebrar las fiestas de fin de año.
Por otro lado, según los comerciantes consultados por EL DIARIO, la gente ha abandonado en su mayoría el uso de bombas de estruendo para volcarse al consumo de las “tortas” de luces o elementos similares, pero sin grandes explosiones.
La viralización de las consignas en contra de su uso por las redes sociales y el alto costo de los fuegos de artificio puede que sean algunas de las causas por las cuales el cielo está cada vez más limpio cuando el reloj marca las 12, tanto en Navidad como en Año Nuevo.
Menos locales
Para esta temporada solicitaron autorización 15 comercios de venta eventual de elementos de pirotecnia, que abren sus puertas entre el 16 y el 20 de diciembre hasta la primera semana de enero.
“Año a año viene decreciendo. Años atrás llegaron a haber 65 comercios de este tipo y en 2015 hubo 22”, comentó Valeria Suárez de la Dirección de Habilitaciones Unicas de la Municipalidad de Villa María.
La funcionaria también adelantó que entre hoy y mañana se intensificarán los controles por parte de inspectores municipales debido a que suelen abrirse locales sólo por estos dos días y sin la habilitación correspondiente.
“Los negocios tienen que exhibir la solicitud de inscripción que han presentado en el municipio. Esto también da la garantía de que han cumplido con ciertas medidas de seguridad y cuentan con un seguro del lugar”, informó Suárez al ser consultada sobre la forma de reconocer a los puntos de ventas habilitados.
Los requisitos para expender pirotecnia son similares a años anteriores, por lo que la decadencia en la apertura de este tipo de negocios puede asociarse a la caída en las ventas.
“Hay sólo un local de venta anual y que en ese caso debe presentar los papeles ante Renar el Registro Nacional de Armas (RENAR) de Nación; mientras que los pequeños comercios pueden ser habilitados por cada municipio”, indicó.
Está prohibida la venta de estos productos a menores de 16 años.
Más luces, poco ruido
En los puntos de ventas consultados coincidieron en que la gente elige mayormente juegos de luces o productos aptos para niños.
En la esquina de bulevar España y Vélez Sarsfield desde hace diez años venden pirotecnia durante estas fechas.
“Las ventas vienen muy bien, al menos cumpliendo con las expectativas que uno tiene. Este año se puede vender un poco más ya que hay menos locales y, por ende, menos competencia”, aseguró Juan Manuel, responsable de ese comercio.
“Apostamos mucho a las tortas de luces, es lo que más se está vendiendo, no tanto estruendos”, agregó.
“Este año las ventas fueron mucho más importantes que el año pasado. Se pide mucho menos lo que es estruendoso y más luces”, expresó Melisa, de Fogomax.
Los elementos de pirotecnia, según los entrevistados, aumentaron entre un 30% y un 40% con respecto al año anterior.
En tanto Milton, encargado de otro espacio en bulevar Sarmiento, dijo que “el año pasado vendimos bien en las primeras semanas, pero este año bajaron un poco las ventas”.
“Lo que más lleva la gente es la pirotecnia para niños: fosforitos, chaski boom, estrellitas”, manifestó el joven.
