Se concretó la primera subasta inversa electrónica
Fue inversa porque se compró, no se vendió, y electrónica porque cada empresa pudo participar desde su sede siguiendo una pantalla. El Estado tuvo un importante ahorro
Una compra de luminarias y elementos de fotocontrol para el alumbrado público de la ciudad para la que se había previsto invertir 350 mil pesos terminó costándole al municipio 200 mil pesos, en lo que fue la primera experiencia de la subasta electrónica inversa, ayer entre las 8 y las 10 de la mañana.
En esta modalidad participaron cuatro empresas locales que desde sus lugares de trabajo fueron ofreciendo el mejor precio para poder venderle a la Municipalidad. Para esto, no se visibilizó su razón social, sino que cada una tuvo un número, de manera de otorgar transparencia a la propuesta, que de esta forma se incorporó al proceso de compras.
“Procura sumar transparencia y mejorar la competitividad, permitiendo la competencia anónima entre proveedores”, subrayaron el intendente Martín Gill y la secretaria de Economía del Gobierno, Daniela Lucarelli, en diálogo con la prensa.
Hubo cuatro renglones que compusieron la subasta, el Estado fijó un precio unitario con referencia a los presupuestos que tenía y al valor de las últimas compras realizadas y se puso en marcha el sistema. El ahorro para la comuna alcanzó en algunos casos la mitad de lo que se había estipulado como posible gasto. Una empresa ganó en dos ítems, otra en otro, y una tercera en el cuarto punto.
En esta ocasión se trató de un concurso de precios, que por normativa no pueden superar los 900 mil pesos. Por encima de ese importe se debe llamar a licitación, las que el Gobierno no descarta que en algunas situaciones también se puedan dar mediante este sistema.
De acuerdo a lo que apuntó Lucarelli, la idea es que por ahora las subastas se desarrollen para la “adquisición de insumos de papelería, alimentos, útiles, medicamentos para la Asistencia Pública y dispensarios, elementos que van a las guarderías, es decir todo lo que se hace en forma periódica y masiva”.
Los proveedores tienen que ingresar a la página oficial del municipio, en donde hay un instructivo pequeño y un video, y deben generar usuario y contraseña para a partir de entonces poder participar. Mientras están subastando ninguno aparece con razón social, sino con números, con la intención de que no sepan quién es cada uno y no haya acuerdos entre ellos para perjudicar a la comuna.
