Brenda Arnoletto tenía 24 años y fue hallada muerta en una obra con signos de violencia y, presumen los investigadores, de haber sido abusada sexualmente
Brenda salió a caminar y sus padres confiaron que su regreso sería un poco más tarde de lo habitual. Se fueron a la cama con esa tranquilidad.
Una mujer llevaba a su hijo a la escuela con la calma de un soleado martes de noviembre. El astro rey magnificaba su fuerte presencia a eso de las 7.45.
Una empleada del corralón y pinturería ubicado en calle Tucumán, casi en la esquina de Belgrano, donde se encuentra la Escuela General San Martín, había cargado combustible en la moto y sin darse cuenta pasó enfrente de un cuadro de horror. El primer cliente, un pintor, ya aguardaba afuera del comercio.
Los albañiles que construyen un complejo de departamentos justo enfrente ya vieron una camioneta de la Policía en el lugar del hallazgo.
La madre ingresó el niño en el colegio y casi en estado de shock llegó a su casa, le contó a su marido y éste dio aviso a la Comisaría.
Recién el segundo cliente anotició a Hebelen, cuando fue por más pintura. Los albañiles estuvieron alertas a los movimientos, incesantes y cada vez más notorios.
Unos 200 alumnos asisten al establecimiento educativo ubicado en diagonal al lugar del crimen. La vida cotidiana de Pozo del Molle entró en turbulencia.
El despertar
A la mañana, para empezar el día, los padres de Brenda dieron cuenta que la chica de 24 años no había regresado. Eso resultó muy extraño y lo comunicaron a la Policía. A partir de entonces el calvario se desató para el matrimonio y otros cuatro hijos (tres varones y una mujer).
“Quiero ver a mi hija”, dijo pidiendo permiso y con palabras pesadas Mario Arnoletto. El padre de la víctima caminó apoyado en una muleta hasta el ingreso posterior del sitio y el secretario del fiscal lo acompañó. El rostro teñido de amargura en rojo y ojos llenos de lágrimas lo devolvieron al automóvil con el que había llegado junto al mayor de sus hijos varones. Apenas cruzó unas frases con los funcionarios de Justicia. No es difícil calcular lo dicho.
El amanecer de un pueblo como Pozo del Molle, con siete mil habitantes, se transformó en desconcierto. Conmoción y consternación.
Violento
“Llama la atención porque se trata de un lugar bastante céntrico, de mucha circulación, porque es un camino tipo circuito donde la gente camina a diario”, indicó el fiscal del Tercer Turno de Villa María, René Bosio.
Añadió que a la joven “no se la conocía mucho, según los primeros datos recogidos, a pesar que sí la tienen vista (los vecinos) por ser testigo de Jehová y (en esa advocación) anduviera las calles para visitar los hogares del pueblo”.
Confirmó que Brenda Arnoletto “salió de su casa a eso de las 21, habría unas amigas que se encontraron con ella alrededor de las 22.30 y fue visto el cuerpo entre las 7 y las 8”.
“Fue en una obra en construcción y se trata de un homicidio con signos de abuso sexual, lo que será confirmado recién por la autopsia, a realizarse en la ciudad de Córdoba”, dijo Bosio. En el mismo sentido aportó que son notables los signos de violencia, de resistencia, de defensa, con rastros de “el presunto autor” hasta en las uñas.
El fiscal dispuso “aguardar la llegada de la Policía Científica para no contaminar la escena del crimen y resguardar todo el material que resulte probatorio”.
“Alguien tiene que haber visto o escuchado algo. Hay mucho movimiento por acá”, agregó.
Bosio indicó que si bien “no hay signos de arrastre del cuerpo hacia dentro de la obra, a un costado se halló una botella de agua, que es la que llevaba consigo para hidratarse, se supone”.
Aseguró que “no tenía su celular” encima y el mismo “fue secuestrado en casa de sus padres, donde vivía”.
Una de las preguntas que formularon de inmediato los vecinos que se dieron con la noticia fue sobre el perro collie con el que solía caminar y para el que llevaba una pelotita de tenis para jugar, pero los familiares precisaron que el animal no había salido en la noche del lunes con Brenda.
Sería un pasillo
La obra está ubicada sobre calle Belgrano, a unos 20 metros de la esquina con Tucumán. Allí un espacio verde de menos de 10×20 se halla en diagonal con la Escuela San Martín. Próxima a la esquina se puede observar una farola y otra apenas se traspasa el acceso de la construcción donde fue hallado el cadáver (existen unos 20 metros entre una y otra luminaria, que además se encuentran por dentro de la línea de arbolado y son más bajas, dotando de iluminación a esa zona).
Según se pudo averiguar, hace unos cinco años está paralizada esa obra. El proyecto inicial abarcaba los dos locales donde funcionan la pinturería y corralón, con dos locales más en la esquina, y arriba de los mismos un complejo de departamentos, destinando los sectores posteriores (y hasta un pequeño patio) a lo que podría ser el depósito, por lo que donde yacía el cuerpo de Brenda sería el pasillo y la parte donde se ubicaría el tablero de electricidad y otros controles.
El intendente
Carlos Salvático se mostró consternado por el suceso y estuvo siempre frente a la escena del crimen. El intendente dijo que “Arnoletto es una familia tradicional del Molle, con una interrelación a partir de predicar la religión como testigos de Jehová y habitualmente se los podía encontrar en la calle”.
“Este es un lugar por donde transita mucha gente, en la tardecita hasta la noche y de madrugada hasta las 9 de la mañana. La gente camina, hace ejercicio”, apuntó. Estimaron que son unas 200 las personas que transitan por allí.
Es un recorrido de unos 1.500 metros alrededor del predio del exferrocarril, a la vera de la ruta nacional 158, que tiene en sus extremos el Complejo Hotel del Centro Comercial (hacia Las Varillas) y la sede y salón de la Sociedad Italiana (hacia La Playosa-Villa María).
El mandatario aseguró que al enterarse de la muerte de la joven y el modo, quedó “estupefacto, porque en un pueblo como el nuestro no hay antecedente…”.
Sobre los reclamos de vecinos por la presencia de personas “de afuera”, Salvático admitió que “aquí como en muchas otras poblaciones ha llegado mucha gente que viene buscando trabajo, nuevos horizontes, a pesar que el contexto no demanda mucha mano de obra”.
Enfocados
En la obra más cercana, Franco Puntonet afirmó que llegó a esos de las 7.45 y ya estaba la camioneta de la Policía en el lugar del hecho. El encargado de la obra de construcción debió responder a los uniformados por la cámara de seguridad existente en el lugar, aunque el alcance de la misma no llegaría a registrar lo que suceda en la esquina. Sin embargo, junto al material que suministrarán desde el corralón, por una cámara ubicada dentro del local (a menos de diez metros de la vereda), ayudaría a los pesquisas para saber sobre el paso de Brenda y de otros transeúntes.
Por otra parte, el municipio cuenta con cuatro cámaras dispuestas en los accesos por ruta nacional 158, que sirven para “saber quién entra y quién sale de Pozo del Molle por esa vía (la principal)”, puntualizó el intendente. El monitoreo de las mismas es de personal municipal y de la Policía.
Además, las autoridades civiles y policiales hicieron un llamado a través de los medios para que todo vecinos que haya visto o escuchado algo se acerque a aportar esos datos, por más insignificantes que parezcan.
Demorados
En las primeras horas la Policía fue hasta la casa de un vecino de Pozo del Molle y lo trasladó hasta la Comisaría. Se trata de un joven de 38 años con aparente trastorno psiquiátrico y al que referenciaron por exhibicionismo y masturbarse en público. El demorado en cuestión habría tenido su paso como interno en el Hospital Vidal Abal de Oliva, pero el perfil, con dificultades físicas notables, hicieron que prácticamente fuera descartado y fue devuelto a su casa (vive con su madre, indicaron).
Hubo más demorados “todos en pos de que aporten datos a la investigación”, indicó el jefe de la Comisaría local, Gerardo López, pero al caer la tarde ya no quedaba ninguno de ellos en la dependencia policial.
“Estamos indagando y recolectando testimonios”, confió, aunque sin arriesgar un número, porque fueron muchos hasta el momento.
Respecto a la causa de la muerte de Brenda, prefirió seguir la línea del fiscal Bosio y aguardar los resultados de la autopsia.
Sin embargo, los investigadores descartan que hubiera arma blanca o disparo de arma de fuego, por lo que presumen que fue por “muerte mecánica” (asfixia, por ejemplo).
El comisario dijo que “entre 300 y 400 personas participaron de la marcha” pidiendo justicia inmediata por Brenda, pero aclaró que “no fue organizada por la familia” y que en la localidad “no hay un alto índice delictual”. Valoró en cambio, “que el padre y los hermanos estuvieron en la Policía aportando datos, vieron todo el movimiento que hicimos y agradecieron el trabajo que estamos llevando adelante”.
La Científica
El personal de Policía Científica del Poder Judicial arribó alrededor de las 13.40 al lugar del hecho. Recorrió el sitio ingresando por el acceso posterior, peritó y luego dio marcha atrás. Tomó distancia hasta el otro lado de la calle y volvió rastrillando cada centímetro. Rodearon el cuerpo semidesnudo de Brenda y recogieron las pocas pertenencias. En una bolsa colocaron el pantalón tipo calza de color negro y una campera gris con la imagen de Mickey Mouse.
El cuerpo sin vida fue cargado a las 14.45. Ahora las autoridades judiciales aguardan los resultados. También los esperan el Ejecutivo pozomollense y la población en su conjunto.
Primeros datos
Los primeros datos recogidos en el lugar indican que Brenda Arnoletto habría sido violada y asesinada. La Justicia y la Policía trabajaron en el lugar bajo directivas del fiscal del Tercer Turno de Villa María, René Bosio, que adelantó que no había signos de arrastre, por lo que el crimen se habría perpetrado en ese lugar.
El cuerpo fue encontrado en las primeras horas de la mañana, cerca de una escuela. Los signos de violencia marcan la intensa defensa que ejerció la joven. Las autoridades judiciales contaron con el apoyo de la División Homicidios de la Policía de la Provincia y personal de la Departamental Río Segundo, además de la Policía Científica, que trasladó el cuerpo a la Morgue de la capital cordobesa.
Marcharon de negro
Paren de matar. Los cobardes hacen daño a una mujer. La muerte de la joven Brenda Arnoletto reactivó el pedido de justicia y de inmediato se alzaron las voces para que las autoridades judiciales obtengan resultados claros.
La muerte de Brenda gritó en la tarde por todas las calles de Pozo del Molle y de cada localidad del país.
Tres cuadras de mujeres (en su mayoría), vestidas de negro, marcharon minutos después de las 19 por las calles pozomollenses. Se concentraron en la plaza Bartolomé Mitre.
No se trata de un grito más y es una erupción de energía clamando justicia por las venas de un país que se desangra en femicidios.
Las vestidas de luto habían anunciado en el mediodía su intención y la concretaron. Fueron de la plaza a la Municipalidad y de allí cruzaron (traspasaron el predio del exferrocarril) hasta la Comisaría, donde más pobladores se sumaron a la multitud. El intendente y autoridades policiales respondieron a las demandas con mensajes.
“Hay asesinos sueltos. A dos cuadras y media de donde apareció el cuerpo sin vida de Brenda habían degollado a una anciana. La Justicia equivocó el camino, hay otro joven preso, pero el verdadero asesino sigue caminando nuestras calles. Como madres y mujeres no podemos estar tranquilas”, explicó María Cristina a un cronista de EL DIARIO.
“Brenda era alta y hermosa”, dijo otra mujer, pero aclaró que “ninguna nos merecemos esto. Es un horror”.
La directora de la Escuela
La directora de la Escuela General San Martín, Beatriz Volmaro, indicó que de los 200 alumnos sólo unos pocos sabían de lo sucedido. “Llegué temprano pero después me ausenté por una reunión y en ese transcurso me enteré por mensajes” al celular, narró. Dijo que hubo madres que vieron la escena cuando llevaban a sus hijos al establecimiento. Respecto a la tragedia, dijo “con mucha angustia, como todo el pueblo, encontrarse con una cosa así, que pase acá…”. Abocada a los cambios en el operativo de egreso de los niños en el mediodía, expresó que antes de salir explicaría al alumnado. “Tenemos que explicar las cosas como son, porque debemos hacer saber que tienen que cuidarse”.
Escribe: Franco Gazzoli. Aporte periodístico: Daniel Cerutti. Fotografía: Victoria Araujo.
