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A punto de firmar un acuerdo federal provincial, Gill vislumbra meses muy duros

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A punto de firmar un acuerdo federal provincial, Gill vislumbra meses muy duros
“Se ve en la coparticipación de este mes que ni siquiera la inflación logra compensar los niveles de caída del consumo”, apuntó el intendente Gill

El intendente habló con EL DIARIO sobre las medidas que prevé la Provincia para “proteger” a municipios

En plenas conversaciones en la mesa Provincia – Municipios, el mandatario anticipó los términos del convenio y admitió que el cuadro es alarmante

El intendente Martín Gill trazó un panorama muy complejo en lo económico tanto en la actualidad como para los meses que vienen, de acuerdo a todos los reportes que maneja, al tiempo en que ponderó un nuevo acuerdo federal que se espera firmar con la Provincia y que según su visión generará herramientas para que los municipios puedan sortear de la mejor manera posible lo que se avecina.

Aunque sereno en su hablar, el mandatario fue contundente al hacer el diagnóstico del presente: “Todos los indicadores, todos los informes, todas las reuniones que recibimos tanto de autoridades nacionales como de provinciales, muestran un panorama muy complejo, y el indicador de eso al menos para los municipios tiene que ver con los montos de coparticipación, y el resultado del monto de este mes se vislumbra como una señal de alerta muy importante”, señaló ayer a EL DIARIO.

En este marco, el jefe del Ejecutivo hizo mención a las conversaciones que se dan para generar un anexo a un nuevo acuerdo federal complementario del firmado hace cerca de dos años con la Provincia, lo que surgirá “a partir del contexto que se está viviendo en la economía nacional”. Comprende “herramientas para ayudar a los municipios en general en condiciones de igualdad y que se eviten situaciones de cuello de botella que causan los incrementos de costos a partir del impacto de la inflación”.

Apuntó que si bien desde los municipios coinciden en que vienen manteniendo la recaudación, por otra parte “se advierte una caída en la coparticipación, fundamentalmente en la primaria, es decir la que surge de la recaudación nacional”.

Respecto a esto, comentó que se venía viendo “cierta compensación entre la caída del consumo y el incremento inflacionario, evidentemente se consumía menos porque uno de los principales elementos que se coparticipa es lo que se recauda por el IVA y allí se venía observando, pero al costar más lo que se consume se mantenía el índice de recaudación”.

Ahora el cuadro ya es más extremo: “Se ve en la coparticipación de este mes que ni siquiera la inflación logra compensar los niveles de caída del consumo y los números preliminares que nos han mostrado anticipan que se aventura la reducción del monto”.

 

Lo que planifican

En este contexto, Gill dijo valorar “enormemente de parte del Gobierno de la Provincia el poder adelantarse y generar herramientas que fortalezcan a los municipios, atendiendo la tarea que los gobiernos locales hacen en contención social y desarrollo de la comunidad”.

Lo que se prevé firmar en este acuerdo es que el fondo de desarrollo urbano, que era un adelanto de coparticipación al que los municipios podían aspirar por un índice de coparticipación de la misma, ahora se convierta en un aporte no reintegrable, es decir, que no se devuelva.

Con ese fondo, por ejemplo, la comuna villamariense culminó la avenida Savio, mientras que días atrás el Concejo Deliberante aprobó los montos para la obra de desagües de barrio Industrial, de la repavimentación de bulevar Alvear-España y de la pavimentación de Alem. Comprende actualmente “la devolución del 65% de los fondos, que se otorgaban a tasa de interés cero, mientras ahora se transformarían en aportes no reintegrables, es decir sería un fondo de infraestructura para obra, pero no tendría descuento en la coparticipación”.

Además se baraja que “aquellos descuentos que se hubieran hecho por aportes del fondo serán reacreditados para ejecución de obras complementarias bajo el mismo formato”.

Asimismo “se analiza también constituir fondos anticrisis con un aporte de alrededor de 500 millones de pesos, desde el cual cada municipio pueda aspirar a obtener un crédito equivalente a una planta salarial de un mes, con un año de gracia y una devolución en 24 meses a partir de entonces, con interés del índice de variación salarial”. Este sería un instrumento “al servicio de cualquier eventualidad, que hoy no ocurre, pero ante la posibilidad de tener que afrontar situaciones que empiezan a aparecer en el horizonte como muy complejas”.

 

Qué resignan

Para participar de estos acuerdos, los gobiernos locales “deberán dejar sin efecto las acciones judiciales que se pudieran tener con la provincia, que en el caso de Villa María no existen”. Gill puntualizó que este ítem “tiene correspondencia con la política que Nación llevó adelante con los acuerdos fiscales para ir solucionando las instancias de conflicto cuando aparecen herramientas que permiten superarla desde la gestión”.

El titular del Sillón de Viñas anticipó que Villa María acompañará las propuestas. Recalcó que la obra pública genera trabajo y que la premisa es no paralizarlas.

Cuando se le preguntó de qué manera el Estado cordobés puede ofrecer estas iniciativas en medio de este panorama, respondió que los funcionarios provinciales “tienen la evaluación de que instituirlas no complica ni afecta las proyecciones de las cuentas provinciales, entonces se toma la prioridad de apoyar a todos los municipios en condiciones de igualdad”.

Apuntó que el acuerdo deberá ser ratificado por los concejos deliberantes de las respectivas localidades y también por una ley.

 

«El panorama es muy complicado»

Al comienzo de sus declaraciones, el intendente señaló que los municipios venían manteniendo la recaudación.

Ante preguntas de este medio en este sentido, indicó que “existe un diálogo permanente con municipios de condiciones similares, y advertimos que estamos agudizando el ingenio y las políticas de cobro para no reducir la recaudación, pero todos vemos que el escenario se presenta claramente muy complejo, ya no alcanza ni basta con mantener la recaudación porque la inflación golpea muy fuerte”.

Cuando se le planteó si puede existir parálisis o ajustes en la ciudad, respondió que trabaja con el objetivo de que eso no ocurra. “Se cuida al máximo cada peso que aporta cada villamariense, se atravesaron 6 meses muy complejos sin tener que resentir, ni paralizar obras, pero el panorama es muy complicado”, confesó.

 

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