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Ameghino, un triunfo infartante

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Ameghino, un triunfo infartante
Abeiro jugó un gran partido. Defendió y se mostró como una opción de gol, cuando su equipo parecía entrar en un tramo de sequía goleadora

Escribe Gustavo Ferradans

El León volvió a rugir fuerte de local. Sumó su segunda victoria consecutiva ante Tiro Federal de Morteros y otra vez el público acompañó en gran número

Abeiro jugó un gran partido. Defendió y se mostró como una opción de gol, cuando su equipo parecía entrar en un tramo de sequía goleadora

Emotivo, dramático y para el infarto. Restaban menos de 30 segundos, cuando Aprea descontó para que la visita se pusiera a 2 puntos. Ameghino ganaba 72 a 70 y tenía la posesión del balón. A falta de 8 segundos, Baeza lanzó, pero la pelota pegó en el aro.

Ahora era Tiro Federal quien tendría la última posesión del juego. Gago salió de contragolpe, le pasó la pelota a Pineda y éste probó un lanzamiento de 3 puntos. En esos segundos para el final, el estadio pareció quedarse mudo. Fueron milésimas de segundos, pero de un suspenso repleto de angustia.

La naranja pegó en el soporte y salió, al mismo tiempo que estalló la tribuna. Ya no había tiempo para más.

Así fue el final, para el infarto, pero a su vez con un soplo de aire de alivio, antes que se desatara la alegría para el segundo triunfo del León, en condición de local.

 

El primer cuarto

El visitante arrancó mejor en el primer cuarto, aprovechando algunos desajustes defensivos de Ameghino y con Aprea y Acevedo intratables. Ese cuarto terminó 22 a 14 para Tiro Federal, donde los dos jugadores mencionados sumaron 17 puntos entre sí.

Ameghino estuvo con bajos porcentajes en ofensiva y le costó entrar en juego.

Tiro Federal parecía arrollador y mostraba la chapa de su gran inicio en el torneo, con dos victorias seguidas.

Si bien el cuarto empezó palo por palo, eso fue hasta la mitad. Un triple de Acevedo puso adelante 18-14 a los del noreste cordobés. Tamburini probó desde afuera y falló y en la respuesta fue Aprea el que metió otra bomba para estirar la diferencia y enseguida sumó de 2, para sellar el final de ese segmento en 22-14.

 

Reacciona el León

En el segundo cuarto ingresó Abel Aristimuño, el técnico Pablo Castro buscó con este ingreso, corregir errores defensivos. La visita estiró a 13 su diferencia (27-14), pero enseguida llegó la reacción. El León logró un parcial de 7-0, para acercarse en el tablero (21-27).

Tyrrell se sumó a la remontada y aportó un doble, para poner el 23-29, pero dos bombas seguidas de Aristimuño y Baeza dejaron el marcador igualado en 29.

Ameghino controló mejor a Aprea y Acevedo y bajaron su goleo. Como si fuera poco, Iglesias que también andaba motivado probó de afuera y ¡Otra bomba! Ameghino pasaba al frente 32-29. El partido era vibrante y emotivo. El juego era intenso y nadie se daba tregua. Díaz también probó de afuera para igualar en 34. Eran los segundos finales de esa primera parte y Baeza dejaba nuevamente adelante al León con su doble, pero una nueva bomba de Acevedo ponía adelante otra vez, a la visita.

No quedaba tiempo para mucho más, pero Iglesias, que otra vez andaba por ahí, tiró desde afuera sobre el cierre del parcial, para meter otro triple y dejar arriba a Ameghino por 38-37.

Así se traducía en el tablero, lo que pasaba y se vivía dentro del campo de juego. Un partido intenso y emotivo. Con ese parcial ambos se fueron al descanso largo.

 

Tercer cuarto

En el inicio del segundo tiempo, el partido no bajó el ritmo de juego. Gago (de gran tarea) siguió conduciendo el ataque de su equipo, y ambos quintetos fueron palo por palo en los primeros minutos.

Aprea, bien controlado por Tyrrell en casi todo el parcial, puso arriba a la visita por 48 a 46, pero Aristimuño respondió con otro triple para dejar adelante a Ameghino, condición que mantuvo, a partir de ahí, hasta el final.

Aristimuño, Verón y Abeiro, aportaron los puntos siguientes del León para irse al último descanso con ventaja de 58 a 55. Dejó alguna duda el doble no convalidado sobre el cierre, anotado por Tyrrell Brown, casi sobre la chicharra. Igualmente, el desempeño de la dupla arbitral no admite reproches, ya que no tuvieron fallos cuestionables.

 

Aprea busca sumar para su equipo. El interno fue el goleador de su equipo y fue una amenaza constante para el León

El final

Si el partido fue emotivo en los 30 minutos que se habían jugado hasta ahí, aún quedaba tiempo para seguir disfrutando, y sufriendo. Tyrrell Brown, un obrero de la zona pintada estiró a 5 puntos la ventaja de Ameghino, pero, en la respuesta, Rodríguez Suppi con un triple achicó la diferencia (60-58).

Aristimuño contestó en la siguiente, con otro triple. Nadie se daba ventajas y el juego no bajaba su intensidad. Si bien la visita ya no tuvo las mismas facilidades para anotar que en el primer cuarto, seguía sumando, y estando muy cerca en el tablero.

Con un doble de Ty Brown, el local pasó a ganar por 66 -58, a falta de 6m 13s y enseguida Gustavo Lucato, técnico de la visita pidió minuto. Ameghino logró que la visita no se acercara en el marcador.

Abeiro, a falta de 1m 12s, estiró la ventaja a 72-66, (luego de una magnifica asistencia de Brown), pero Rodríguez Suppi recibió una falta y aprovechó sus dos tiros libres para achicar a 4 la diferencia. Todavía quedaba un minuto por jugar. En la siguiente jugada Ameghino jugó al filo de los 24 segundos y Santiago Iglesias dejó a las cerca de 500 personas que presenciaron el juego, con el grito atragantado, porque la pelota no quiso entrar. En la respuesta, Aprea sumó con un doble y el marcador quedaba 72 a 70 para el local.

Restaban menos de 30 segundos y el final parecía incierto. Lo tuvo Baeza para cerrarlo cuando restaban 8 segundos, pero su lanzamiento quedó corto.

La pelota no quiso entrar y en la respuesta, cuando solo quedaban menos de 6 segundos para el final del partido, el cierre quedaba para la visita.

Gago, como toda la noche, traslado con velocidad la pelota y buscó el mejor ubicado. La recibió Pineda, que probó de 3. Esa fracción de segundo que demoró el balón, en viajar desde la mano del jugador de Tiro Federal, hasta el aro tuvo un suspenso para el infarto. La pelota pegó en el soporte y salió. Ya no quedaba tiempo para más. Ameghino, mientras respiraba aliviado, empezaba a festejar un triunfo merecido, pero también muy trabajado, ante un rival complicado que llegaba con dos victorias consecutivas.

Ahora el León jugará de visitante sus dos próximos compromisos, el sábado y domingo, ante Libertad de Sunchales y Tiro Federal de Morteros.

 

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