Lo que hay que saber para no sufrir la “clonación” del plástico o el robo de los datos con los que pueden realizarse estafas

Hay reportes que indican que en 2016 las pérdidas mundiales por fraudes con tarjetas de crédito ascendieron a más de 22,800 millones de dólares, superando el monto de 2015 que fue de 21 millones y estiman una proyección de 33 millones de dólares en pérdidas para  2021.

Para no ser víctima de este tipo de estafas y fraudes es necesario conocer cuáles son las más utilizadas por personas inescrupulosas. Por ejemplo, uno de los más conocidos es el que se realiza cuando un vendedor pasa la tarjeta por un dispositivo que almacena su información y luego la utiliza para cargarle otras compras no realizadas. Otra modalidad ocurre cuando la información del titular de la cuenta de banco es robada y utilizada ilegalmente sin la presencia física de la tarjeta. Esta es la más común y ocurre mayormente de manera online, principalmente por caer en correos de pishing o suplantación de identidad.

Para evitar estos fraudes es recomendable nunca dar la información de tu cuenta a nadie que te haya llamado por teléfono ni a tu propio banco, solo en caso de que seas tú quien inició la llamada. También existen los seguros de tarjetas que, por un pequeño monto mensual o anual protegen a tu tarjeta contra cualquier tipo de fraude.

A tener en cuenta

Las tarjetas de crédito son uno de los principales medios de pago en el mundo actualmente. Es necesario tener en cuenta algunos consejos como nunca escribir el número de tarjeta en lugares o papeles a los que tenga acceso alguien más, como también es recomendable que guardes la tarjeta en otro lugar que no sea la billetera. Además, según especialistas, nunca está de más revistar el estado de cuenta al detalle, ya que ahí es donde pueden aparecer consumos que no hayas hecho y se puede alertar a tiempo.

Por otra parte, siempre que realices una transacción, no pierdas de vista la tarjeta. Si no hay POS inalámbrico, acercate a hacer el pago junto al vendedor. Además, no hay que dejar espacios vacíos en los recibos y se recomienda tachar todos los espacios en blanco que están encima del monto total.

Es necesario destruir las tarjetas de crédito antiguas o que ya no se usen. Reportar inmediatamente cualquier cargo en el estado de cuenta que parezca sospechozo. “Sal a la calle solo con las tarjetas que vas a utilizar y avisale al banco si cambias de dirección o si salís de viaje”, indican desde el banco BBVA, como así también “guardar todos los recibos y compararlos con el estado de cuenta”.

Reglas de oro al comprar por Internet

-Nunca hagas clic en un enlace de un correo electrónico donde pidan información personal. Comprobá que la web sea segura, y si notás que el nombre de la marca es incorrecto o desactualizado, o que hay textos incoherentes o imágenes que no se muestran, desconfiá de esa página.

-Antes de realizar un pago comprobá que la dirección de la web comience con https:// ya que esto confirma la tranferencia de datos en una página segura.

-Antes de realizar alguna compra en un sitio web que no conocés, averiguá más datos sobre el vendedor en Internet.