La Reserva de Yrigoyen, compuesta por una propia camada de jugadores, se coronó campeona del Torneo Clausura tras imponerse 1 a 0 de local sobre Alumni
La localidad de Tío Pujio anoche estuvo de fiesta porque en la revancha de la final de Reserva su equipo, Hipólito Yrigoyen, derrotó 1-0 a Alumni, revalidando el 2 a 1 obtenido en la ida para coronarse como campeón del Torneo Clausura.
El combinado dirigido por Maximiliano Burello salió a disputar el encuentro con la tranquilidad de encontrarse arriba en el global y así fue que se dedicó a tratar de estar bien ordenado en los metros finales para esperar sin sobresaltos a un necesitado conjunto “Fortinero” que, a pesar de sus necesidades, se mostró muy nervioso y falto de claridad para buscar empardar la serie.
Para colmo de males, entre los propios jugadores de Alumni los reproches fueron moneda corriente durante todo el juego, lo que los llevó a pasar más tiempo discutiendo entre ellos que intentando doblegar al rival.
En ese contexto, durante la etapa inicial la chance más clara la tuvo el dueño de casa cuando a los 16’, entrando al área por la izquierda, Federico Novillo tocó para su hermano Matías Novillo, pero cuando se aprestaba a definir con el arco libre Agüero apareció para despejar el peligro.
En el complemento la más clara fue de Alumni, aunque se dio recién a los 38’ con un cabezazo de Ripa que picó en el travesaño.
Parecía historia sentenciada, pero en el cuarto minuto de descuento Larghi fue derribado en el área y el referí cobró penal para los locales.
Se hizo cargo de la pena máxima el portero Pedernera, quien rematando a la izquierda de Rabbia decretó el 1 a 0 que sería resultado final.
Así los pibes tiopujienses terminaron celebrando a lo grande, dando la vuelta olímpica, trepados del alambrado junto a sus hinchas y elevando con orgullo el trofeo de campeones.
