Así lo expresó De Falco, quien agregó que hay predisposición de todos los concejales de intervenir para recuperar las fuentes de trabajo en la Fábrica Militar

La reunión prevista entre las tres bancadas que integran el Concejo Deliberante y los representantes de ATE para dialogar sobre los despidos en la Fábrica Militar de Pólvora y Explosivos de Villa María, finalmente se desarrolló en la vereda de la sede legislativa. Fueron los propios trabajadores los que pidieron que se realizara de esta manera.

“Queremos escucharlos a ustedes en qué nos pueden ayudar, qué nos pueden decir”, dijo Fernando Mercado, secretario general de ATE, ante la mirada atenta de los ediles.

En primera fila lo escuchaban el presidente del Concejo, José Carignano; los jefes del bloque Villa María para la Victoria, Carlos De Falco; y de Compromiso Comunitario, Mónica Lazos; y el concejal Omar Coutsiers, de Juntos por Villa María, ante la ausencia de Karina Bruno. Más atrás también se hallaban Verónica Navarro, Rosana Suescum y Mauro Beltrami, del oficialismo; y Nora Landart y Gustavo Bustamante, de la oposición.  

El primero en tomar la palabra fue De Falco, quien aseguró que el compromiso del bloque estuvo siempre.

“Tenemos dos ámbitos de actuación, uno es el judicial, y otro es como concejales de la ciudad. Somos conscientes de la gravedad que implica que 30 familias no solo no puedan pasar las fiestas, sino que no puedan pasar el verano porque les falta el trabajo. Son trabajadores calificados, es más difícil conseguirlo. Vivimos horas muy complicadas, estamos muy preocupados por el tema de la Fábrica y nuestro deseo es que los 30 trabajadores no cobren la indemnización, sino que recuperen su trabajo”, afirmó.

“Tenemos un férreo compromiso en recuperar las fuentes de trabajo”, agregó.

“Es una paradoja que los despidos se den en la provincia donde mejor resultado tuvieron en las elecciones. Desde el Concejo estamos trabajando, creo que todos los bloques tenemos predisposición para hacerlo porque esta no es una cuestión partidaria. Lo importante es que las 30 personas recuperen el trabajo”, remarcó.

“Hemos trabajado todo el fin de semana, estuvimos en contacto permanente con el intendente Martín Gill, lo he tenido al tanto de todo lo que hablamos. Además, él está trabajando con el obispo Samuel Jofré Giraudo y otros funcionarios buscando llegar a Buenos Aires para ver si se pueden suspender estos despidos”, señaló.

Poco después, ante los medios De Falco precisó que se va a elaborar un pedido al Ejecutivo nacional, al ministro de Defensa, Oscar Aguad, y al interventor de Fabricaciones Militares, Luis Riva, para que se dejen sin efecto estas medidas y se pueda llevar adelante una mesa de diálogo.

“Debemos sentarnos en una mesa de diálogo autoridades nacionales, provinciales y municipales, trabajadores y empresarios de la ciudad para ver qué hacemos con la Fábrica, si podemos reactivarla y cuál es el destino que le podemos dar”, manifestó De Falco.

“Me parece que la respuesta tiene que ser inmediata, son 30 trabajadores acá y 29 en Río Tercero, qué déficit pueden solucionar 30 despidos? Antes de tomar esta medida podrían haber hablado con los intendentes de cada ciudad para saber qué grado de solución se puede buscar, qué se podía hacer en cada Fábrica. Estas decisiones inconsultas son muy graves”, consideró el edil.

“Repito que este es un tema de la ciudad, no es un tema partidario. La Fábrica tiene más de 80 años en Villa María, es la industria más grande y lo que aporta al producto bruto es importantísimo”, subrayó.

Ante la consulta de si había hablado con Darío Capitani, De Falco respondió que el legislador del PRO habló con el intendente, quien le manifestó su preocupación.

“Por lo que tengo entendido, Capitani viajó a Buenos Aires para ver qué se puede hacer”, completó.

“Antes de recibir a los trabajadores tuvimos una reunión breve los concejales de todos los bloques, solo faltó Bruno, que supongo que viajó a Buenos Aires con Capitani”, concluyó.

Con dignidad

“Entendemos el dolor de ustedes no solo por el destino de la Fábrica Militar sino por la pérdida de trabajo, la incertidumbre, la desazón, la tristeza por la familia que tienen detrás. Como Concejo Deliberante nos ponemos a su entera disposición para trabajar en lo que haga falta, acompañando al Ejecutivo, a ustedes, a las manifestaciones que se hagan, acompañando los escritos o cartas documentos que puedan enviarse al ministro de Defensa, al Ejecutivo nacional, a Fabricaciones Militares, aprobando una resolución que es una expresión política, acompañando la labor del gremio”, afirmó Carignano por su parte.

“Nos ponemos a disposición para que esta situación se pueda revertir y que los trabajadores puedan tener un 2018 con la dignidad que da el trabajo”, añadió.

Cómplice

“Decir que se van a solucionar las cosas de hoy para mañana no solo es mentir, sino generar falsas expectativas. Estoy tranquilo porque cada vez que el gremio pidió una reunión con nuestro partido he ido personalmente a la Fábrica Militar para ver qué se podía hacer, sé que es quedarse sin trabajo”, aseguró Bustamante.

“El problema de Fabricaciones Militares existe a lo largo y a lo ancho del país, en todas las reparticiones nacionales, provinciales y locales”, afirmó. Tras eso, comenzó a citar el caso de una maestra que fue despedida por la Municipalidad en 2005 y que recién ahora va a cobrar la indemnización, antes de ser interrumpido por los insultos de algunos de los participantes de la marcha, quienes lo acusaron de ser “cómplice del Gobierno” que decidió los despidos.

Paradójicamente, Coutsiers, a su lado, no recibió reproches.

Mercado disipó el momento tenso afirmando que tenían el compromiso de los concejales, de la Iglesia y del sindicato de que “si tocan a uno, tocan a todos”, por lo que estarán en la calle mañana y todos los días hasta que les restituyan el puesto a todos los despedidos.

Creo que es importante transmitirle a los trabajadores nuestra disposición y solidaridad frente a la situación que están atravesando”, consideró Landart después de que los representantes de ATE se retiraron del Concejo.

“También es importante que quienes tienen incidencia en la estructura del Gobierno nacional y en la definición de las políticas a futuro de Fabricaciones Militares estén trabajando para plantear la importancia que tiene en la comunidad la pérdida de estas fuentes de trabajo”, agregó.

“Creo que de no tener un resultado favorable ante esta situación, el Gobierno provincial y el local tendrán que tomar medidas de acción inmediata para tratar de paliar la situación de estas 30 familias. Ojalá que todo lleve a la restitución de las fuentes de trabajo, de lo contrario vamos a tener que trabajar con el Ejecutivo para dar respuestas inmediatas a cuestiones puntuales, que son solo paliativos”, remarcó.

“El mismo viernes lo puse al tanto de la situación a Bustamante, quien puede comunicarse con Aguad, y sé que ese mismo día se contactó con el ministro para hablar sobre el tema. Pero tenemos que estar dispuestos a aliviar la situación de estas familias si la resolución queda firme”, sostuvo la edil.

“No es responsabilidad de los trabajadores definir cuáles son las políticas de desarrollo industrial y de producción que tiene que tener Fabricaciones Militares, no es justo que quienes gobiernan deleguen en ellos sus responsabilidades primarias. Hay que desarrollar una política pública nacional orientada a regular cuál va a ser el sistema de producción en Fabricaciones Militares, no desviemos la mirada”, señaló.

“En la reunión con los concejales planteé que desde nuestro lugar de comodidad y de seguridad es desde donde tenemos que hacer el esfuerzo de tolerancia. La concejala Navarro adhirió y completó esta idea”, expresó Landart.

“No podemos ser cómplices de estrategias que desvirtúan el movimiento organizado de los trabajadores”, enfatizó.

Ponerse en el lugar del otro

“En la reunión repasamos lo que viene haciendo el Concejo en este tema y cada bloque hizo el recuento de lo que pudo gestionar. En ese ámbito coincidimos con Landart que tenemos que sentir empatía y ponernos en el lugar del otro, uno entiende la vehemencia del reclamo por la vulneración de los derechos más sagrados que tienen que ver con la dignidad”, puntualizó Navarro.

“Ante el hecho de perder el trabajo, la mayoría en condiciones de mucha vulnerabilidad, los concejales, desde nuestra zona de confort, tenemos que ponernos en su lugar y entender y aceptar su reclamo vehemente y apasionado, sin que esto justifique la violencia. Hay que entender el dolor, la angustia, la desazón, la desesperación y la impotencia”, añadió.

“Hace más de un año que esto se veía venir, las peticiones a las autoridades no alcanzaron, no es momento de políticas partidarias, sino de ponerse al lado de los trabajadores”, subrayó.

“Hoy son 30 despedidos de la Fábrica Militar, pero hay muchos despidos hormiga por la situación económica que atravesamos, por lo que los concejales tenemos que estar a la altura de las circunstancias”, consideró Navarro.

“Vamos a acompañar el reclamo y todas las acciones tendientes a poder revertir esta situación, a que se suspendan estos despidos y puedan volver a trabajar, ojalá las autoridades nacionales revean esta situación”, manifestó la edil.

“No está en nuestras manos porque no es nuestra responsabilidad, pero no nos sacamos el lazo y vamos a seguir al lado de ellos tratando de revertir esta situación”, finalizó.