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“Estamos preocupados”, dijo el jefe de la Departamental

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“Estamos preocupados”, dijo el jefe de la Departamental
Comisario Luis Héctor González

La máxima autoridad de la Departamental San Martín advirtió sobre la presencia de bandas que “revientan puertas”, otras que sorprenden con el cuento del tío y aquellas que neutralizan alarmas con inhibidores

El comisario Luis Héctor González pidió que la población llame a la Policía ante la menor sospecha

El accionar de bandas delictivas en Villa María y en la zona llevó al jefe de la Unidad Departamental San Martín, comisario Luis Héctor González, a solicitar la colaboración de la población para estar alerta, no exponerse al cometido de los extraños y, ante la mínima sospecha, llamar a la Policía.

El titular de la Policía Regional, con asiento en Villa María, expresó que, ante la ocurrencia de los últimos ilícitos, “estamos muy preocupados” y advirtió que los vecinos deben trabajar juntos con la Policía para controlar la situación.

 

“Tipos pesados”

González refirió ante los medios de prensa, que fueron convocados durante la víspera a la sede policial, el procedimiento realizado el lunes pasado que culminó con un detenido en la vía pública en barrio Rivadavia.

“Ayer (por el lunes) fuimos avisados sobre la presencia de un auto Chevrolet, modelo Cruze, que circulaba en forma sospechosa en la ciudad con dos personas a bordo”, relató el funcionario policial.

“Cuando se logró encontrar el auto los sujetos iniciaron la huida y, tras una persecución de entre tres y cuatro cuadras, fue interceptado”, señaló González.

“Por entonces había uno solo dentro del vehículo Chevrolet, quien empezó a preguntar por qué se lo controlaba. Fue entonces que uno de los policías vio que, sobre uno de los asientos, llevaba una barreta de un metro y medio”, puntualizó González.

Poco después, al ser consultada la Policía de la Provincia de Santa Fe se pudo establecer que “el detenido, de 30 años, tenía frondosos antecedentes” delictuales.

El titular de la Departamental San Martín alertó, con mucho énfasis, que estos individuos son “tipos pesados”, son los que “revientan puertas, revientan departamentos”.

Añadió que uno de los delincuentes es conocido por el apodo el Mochilero, porque “una vez que logran entrar se llevan celulares, notebooks y otros objetos de valor, además de dinero y joyas”.

Dio cuenta, por otro lado, que los cacos que operan de esta manera también cuentan con destornilladores y otras herramientas de mano para violentar las aberturas, al mismo tiempo que la Policía cuenta “con pruebas fílmicas donde aparece un segundo sujeto sospechoso”.

 

Cuento del tío e inhibidores

Por otra parte, el comisario González informó que, a raíz del accionar de estas bandas de delincuentes “se reforzó la presencia policial en las calles con infantes y con la participación de personal de la División Investigaciones”.

Agregó, asimismo, que todas las semanas “hay unas dos denuncias por este tipo de hechos (delictuales)”, a los que añadió otras formas de operar que tienen los ladrones como son el cuento del tío, por un lado, y la utilización de inhibidores de alarmas, por otro.

“Vemos que los delincuentes llaman por teléfono, se hacen pasar por personal de un Banco o de otra institución y generalmente sorprenden a gente mayor. Pero lo que quieren es precisamente apoderarse del dinero que tienen otros”, dijo González.

Por otro lado, también puso en sobreaviso sobre recurrencia a los inhibidores de alarma para abrir los autos, “algo que está a la orden del día”.

“Le pedimos a los propietarios de los vehículos que, tras colocar la alarma la prueben poco después, porque lo que hacen los inhibidores es precisamente neutralizar la puesta en funcionamiento de la alarma”.

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