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Fue condenado por violencia de género, pero quedó en libertad

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Fue condenado por violencia de género, pero quedó en libertad
Héctor Enrique Vázquez, condenado por violencia de género, quedó en libertad

Juicio abreviado en la Cámara del Crimen – Tres años de prisión en suspenso

La víctima estuvo de acuerdo con la pena impuesta. El hecho ocurrió en una vivienda de Pozo del Molle en noviembre del año pasado

Héctor Enrique Vázquez (39) fue juzgado ayer en la Cámara del Crimen de Villa María y condenado a tres años de prisión en suspenso por un hecho de violencia de género. Sin embargo, por tratarse la pena impuesta de “prisión en suspenso”, el acusado pudo recuperar la libertad cumpliendo ciertas condiciones impuestas por la Justicia. Deberá irse a vivir a la casa de su madre, en la localidad de Las Arrias, en el norte de la provincia de Córdoba.

Por su parte, Cecilia Prunello, su expareja, estuvo de acuerdo con que Vázquez saliera en libertad para que pueda visitar a los hijos que tienen en común.

El proceso, de carácter abreviado, ya que el acusado reconoció la autoría de los hechos que se le imputaban, fue presidido por el camarista Félix Martínez, quien dictó la sentencia. Vázquez fue asistido legalmente por el abogado Martín Mattea.

La acusación fue sostenida por el fiscal de Cámara, Francisco Márquez.

Cabe consignar que Vázquez había encerrado y golpeado a su pareja y  permanecía detenido desde mediados de noviembre del año pasado.

La causa recayó en la fiscal Silvia Maldonado, quien realizó la investigación y con las pruebas obtenidas decidió elevarla a juicio con la carátula “privación ilegítima de la libertad en concurso real con lesiones leves calificadas por violencia de género”.

 

En Pozo del Molle

El hecho ocurrió el 11 de noviembre del año pasado en una vivienda de Pozo del Molle, donde al acusado convivía con Cecilia Prunello.

Según el expediente, la pareja sostuvo una discusión un día en que la mujer se disponía a salir de la casa para ir a trabajar. Vázquez se lo impidió, trabando la puerta de calle con una barra de hierro, y le exigió a Prunello que le entregara el teléfono celular. La mujer se negó, por lo que el violento sujeto se le arrojó encima y tomándola de los pelos le cayó a golpes mientras la víctima solo atinaba a pedir socorro.

Finalmente, Prunello logró zafarse de Vázquez, consiguió salir de la casa y llegar hasta la plaza. No obstante, allí, en la vía pública, el violento sujeto continuó agrediéndola.

 

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