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Gutiérrez Cingolani se abstuvo de declarar al ser indagado por Bosio

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Gutiérrez Cingolani se abstuvo de declarar al ser indagado por Bosio
Mariano Gutiérrez Cingolani fue traído ayer desde el Hospital Cruz del Eje, donde está internado con custodia penitenciaria, para ser indagado por el fiscal que instruye la causa, René Bosio (imagen, gentileza Uniteve)

Caso Luna – El tiopujiense acusado de abusar sexualmente y dar muerte a la pequeña Luna Viera solo respondió preguntas sobre condiciones personales. Por consejo de su defensora, Silvina Muñoz, “Marianito” no declaró en relación al gravísimo hecho que se le atribuye

 

Mariano Angel Gutiérrez Cingolani (31), el vecino de Tío Pujio implicado en el brutal crimen de la pequeña Luna Viera (5), se abstuvo ayer de prestar declaración con respecto al cruento episodio ocurrido el 19 de julio del año pasado en aquella localidad.

Gutiérrez Cingolani, conocido en el pueblo como “Marianito” por tratarse de un hombre que padece un retraso mental (pese a lo cual fue declarado imputable), fue traído a Villa María desde el Hospital Aurelio Crespo de Cruz del Eje, donde se encuentra internado con custodia a cargo de personal del Establecimiento Penitenciario Nº 10 ubicado en esa misma localidad del noroeste cordobés.

Ya en el despacho del fiscal que instruye la causa, René Bosio, y acompañado por la asesora letrada Silvina Muñoz, el acusado solo respondió preguntas vinculadas con sus datos personales luego de que su defensora le aconsejara no declarar con respecto a la muerte de Luna.

Previamente, el secretario de la Fiscalía del Tercer Turno, Juan José Aguilar, leyó la acusación que se le atribuye y por la que está imputado como presunto autor de “abuso sexual con acceso carnal”, en concurso real con “homicidio doblemente calificado”, por críminis causa (es decir, matar para ocultar otro delito, en este caso el sometimiento sexual) y por femicidio (violencia de género).

Cabe señalar que el gravísimo delito que se le endilga tiene como única pena la prisión perpetua.

Seguidamente, Aguilar y el prosecretario Pedro Diana le informaron que la ley le acuerda el derecho de decir todo lo que considere conveniente o necesario para defenderse, pero también que puede no hacerlo -es decir, guardar silencio-, sin que ello se interprete como una presunción de culpabilidad.

 

La abstención

Antes que respondiera, Muñoz le sugirió abstenerse de declarar, por lo que Gutiérrez Cingolani solo fue interrogado sobre condiciones personales. Sobre este último aspecto, pudo saberse que respondió sin mayores problemas las preguntas que se le formularon.

Ni bien concluyó el acto, el acusado (quien durante la indagatoria también estuvo acompañado por una tía) fue trasladado por personal penitenciario hasta la cárcel local, desde donde pasado el mediodía fue llevado de regreso al nosocomio cruzdelejeño, donde continuará detenido a la espera de lo que disponga el fiscal.

Cumplida esta etapa procesal, el instructor de la causa deberá resolver la situación de Gutiérrez Cingolani, aunque se descarta que el viernes o el próximo lunes a más tardar le dictará la prisión preventiva.

 

La muerte de Luna

De acuerdo con los estudios genéticos realizados en la ciudad de Córdoba por especialistas del Instituto Médico Forense, la menor fue sometida sexualmente “por vía indirecta” (oral), motivo por el cual en la primera parte de la acusación elaborada por Bosio se describe ese hecho como “abuso sexual con acceso carnal”.

Siempre según aquella pericia médica, el accionar de Gutiérrez Cingolani provocó una “sofocación y obstrucción de vía y resquicio respiratorio” en la víctima, lo que le ocasionó la muerte por “asfixia por fallo multisistémico”.

El fiscal René Bosio, con lentes oscuros, junto a funcionarios judiciales y policías, inspeccionando el lugar exacto donde fue hallado el cadáver de Luna, en la casa contigua a la de Gutiérrez Cingolani (foto de Archivo)

Aquellos estudios científicos no detectaron lesiones ni se hallaron restos de semen en los genitales de la menor.

A criterio del fiscal, el abuso sexual se produjo en el interior de la casa del acusado, en la que al momento del hecho se encontraba solo, y posteriormente abandonó el cuerpo sin vida de Luna en el ingreso lateral a la vivienda contigua, donde fue hallado momentos más tarde.

 

Otros detalles

Gutiérrez Cingolani, nacido el 22 de octubre de 1986, fue detenido ese mismo 19 de julio (ayer se cumplieron ocho meses) y pocos días después, por su condición mental, fue trasladado a Cruz del Eje para ser alojado en el Hospital Aurelio Crespo.

Finalmente, cabe recordar que a mediados de la semana pasada llegó a manos del fiscal Bosio el informe de la segunda pericia psiquiátrica realizada por tres especialistas del Gabinete de Psiquiatría Forense del Poder Judicial cordobés, según la cual se determinó que el acusado “pudo comprender sus actos y dirigir sus acciones” cuando cometió el hecho que terminó con la vida de Luna.

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