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Hasta ahora, el puente en construcción encuentra un sector muy despoblado

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Hasta ahora, el puente en construcción encuentra un sector muy despoblado
En los terrenos de barrio Santa Ana, entre el predio del SUOEM y el Desagüe, hay muy pocas viviendas, aunque gran parte de los loteos estarían vendidos

El loteo de barrio Santa Ana está aprobado en la Municipalidad de Villa María

Frente al puente hay muy pocas viviendas y en la zona casi no hay locales de servicios. Para Gill la obra impactará en el desarrollo del sector

Gill también evaluó que en la zona casi no hay locales de servicios, como espacios gastronómicos, despensas o quioscos. Así se veían los trabajos en el puente ayer

El sector en donde se está construyendo el nuevo puente entre Villa María y Villa Nueva  está casi despoblado en la orilla villamariense, con unas pocas viviendas levantadas y con la mayoría de los terrenos sin movimiento.

Ese loteo está aprobado por la Municipalidad, se encuentra en trámites ante la provincia y se verá potenciado y revalorizado con la apertura del nuevo paso.

“Seguramente la obra va a impactar en el desarrollo de este sector. Creo que el puente nos termina abriendo la ciudad en ambos lados, permite conectividad y será una fuente que favorecerá la instalación domiciliaria, pero también de servicios, ya que este es un espacio de la costanera con escasos servicios”, señaló el intendente Martín Gill al ser consultado por EL DIARIO.

En este sentido destacó que “no hay quioscos, despensas ni locales gastronómicos” en la zona, por lo que estimó que el puente implicará “mayor movimiento y la conectividad con avenida Savio permitirá justamente fortalecer estos elementos”.

El mandatario evaluó que tanto la extensión del bulevar España y la remodelación del Parque Pereira y Domínguez como este paso por el río Ctalamochita “tienen efectos colaterales, que impactan en el desarrollo”.

“Se genera una infraestructura que potenciará la inversión privada colateral”, subrayó.

Ante las preguntas de este diario, Gill confirmó que el loteo está aprobado por el municipio, y se encuentra en trámite ante la provincia, “como el resto de los loteos de la ciudad”.

Y según la información que maneja, en su mayoría los lotes ya están vendidos.

Carlos Ramírez, el secretario de Desarrollo Urbano de la comuna, apuntó que este desarrollo inmobiliario “tiene presentadas las obras de infraestructura en la Municipalidad y han sido aprobadas, tanto en lo que es agua, como cloacas y gas, habiendo cumplido todos estos trámites”.

“Luego, como todo desarrollo inmobiliario, sigue su trámite en Catastro provincial, Recursos Hídricos y demás”, explicó.

Cuando a Gill se le hizo mención sobre lo despoblado del sector, expresó que “quizás cuando terminaron de vender  (los terrenos), se terminaron fuentes de financiamiento, como pasó con otros loteos”, advirtiendo que “no son hoy las mismas condiciones financieras y bancarias para acceder al crédito que permita la construcción de casas”.

“De todas maneras el puente impactará positivamente y seguramente permitirá rápidamente un desarrollo por parte de los privados”, aventuró el jefe del Ejecutivo.

 

Polémica

A fines de 2016, el concejal radical Gustavo Bustamante apuntó contra el empresario, Diego Chicco precisamente por estos loteos en tierras que fueron del Corralón municipal, al considerar que le habría ganado varios miles de metros cuadrados a la costanera.

El edil de la bancada Juntos por Villa María entendió que a través de este emprendimiento de 119 lotes de 450 metros cuadrados cada uno, se avanzó sobre la línea de la ribera.

En la gestión de Nora Bedano como intendenta, el empresario Diego Chicco acordó realizar para el municipio un nuevo Corralón municipal en el barrio Las Acacias, a cambio de estos terrenos.

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