Proteccionistas y animalistas se hicieron sentir anoche, en plaza Centenario, contra el maltrato animal y en busca de una ley que contemple mayores penas. En otras ciudades se replicaron las marchas
“Basta de maltrato” es una frase que suena y suena, pero animalistas y proteccionistas apuntan a que suene más fuerte. Por eso anoche, en plaza Centenario, decidieron reunirse nuevamente para marchar con esa consigna, preocupados por esta situación que tiene a los animales como víctimas diarias de la desaprensión humana. Luego de la convocatoria que se realizó a través de las redes sociales y que replicó este suple, la marcha se organizó también en consonancia con la movida nacional que se armó en diferentes ciudades. Es que el 25A se planteó como un día para hacer escuchar ese grito necesario en todo el territorio argentino y, en consecuencia, hubo marchas en otros lugares como La Plata, Las Flores, 25 de Mayo, Bragado (Buenos Aires) y Santa Rosa (La Pampa), como punto de partida para volver con la lucha. En Villa María, Katy Maidana fue una de las organizadoras y sostuvo que “así como fuimos evolucionando, hoy por hoy el animal ha tomado un papel protagónico importante en la sociedad y ha despertado en algunos sectores conciencia social en cuanto a sus cuidados y protección, también podemos con esto, es lento… nos va a llevar tiempo, pero no es imposible, lo vamos a lograr”. La lucha no sólo tiene que ver con la concientización, sino también con la ley que se necesita reformular. La Ley 14.346 de Protección Animal del año 1954 quedó totalmente desactualizada y sería un cambio fundamental que los gobernantes pudieran legislar al respecto. Argentina fue uno de los países pioneros en ley de protección animal, pero luego pasó a ser uno de los que tiene las penas más bajas (son excarcelables). La ley argentina reprime tan solo con 15 días a un año de prisión el maltrato y la crueldad, siendo este un delito menor, el único caso que llegó a cumplir prisión fue el autor de la muerte de Chocolate (ver página 14), durante 22 días, pero el 95% de los casos, según denuncian las organizaciones proteccionistas, son recepcionados y al poco tiempo archivados, sin iniciar ningún proceso investigativo. Mientras, existen algunas propuestas para legislar, pero como los animales suelen ser temas secundarios en el Congreso, nunca entra el debate sobre la mesa. Es por ello que organizaciones ambientalistas y proteccionistas a nivel nacional reclaman el urgente tratamiento de estos proyectos, entendiendo que se avecina la reforma del Código Penal y pretenden que las penas sean actualizadas. Para ello el próximo 11 de mayo desde distintos frentes entregarán a los legisladores petitorios con firmas que avalan el pedido de urgente estudio de los proyectos de ley, en un país que pretende ser parte de países desarrollados cuando en materia de violencia y derecho animal sigue teniendo una legislación arcaica. Así lo remarca también un documento que difunden las proteccionistas locales. Y así sigue la lucha, mostrando la realidad.
