En diálogo con EL DIARIO, parte de los estudiantes que escribieron “Crónicas de un sepulturero” dieron detalles sobre la creación del libro que cuenta con 20 relatos. Y valoraron el reconocimiento dado por el Deliberante
Estudiantes del CENMA confirmaron a EL DIARIO que fue un éxito total la venta de ejemplares de “Crónicas de un sepultero”, obra por la que fueron galardonados por el Concejo Deliberante de Villa Nueva como “embajadores de la cultura” local.
Algunos de ellos hablaron con este matutino. Verónica Flores, Mónica Venosta, Mélanis Gómez Leguizamón, Beatriz Echeverría, Lorena Ceballos, Adriana Almada, Pamela Merello y Mónica Moreno coincidieron en que la distinción dada por los ediles fue un “orgullo” y que les generó una enorme satisfacción.
Del libro también participaron Juan Pablo Farías, Gloria Aragno, Micaela Faidutti, Damaris Faidutti, Ivana Aragno y Noelia Galínez, quienes también fueron reconocidos por el Legislativo.
Las estudiantes contaron que comenzaron a trabajar en el desarrollo del libro el año pasado y que para su elaboración no sólo hablaron con los sepultureros sino también con vecinos de la ciudad, como sus propios abuelos u otras personas que dieron cuenta de historias que pasaron de generación a generación.
“Muchos ciudadanos nos fueron contando y nos ayudaron”, apuntaron.
Expresaron que la conclusión del material les generó un orgullo muy grande porque fue una idea y una construcción propia. “A mí siempre me gustó la poesía, desde chiquita”, destacó una de las entrevistadas.
Cada una vendió los diez libros con los que contaban pero la gente les pedía más. “A la gente le interesó mucho. Uno lo leía y le contaba al otro y de boca en boca se generó interés y se fue vendiendo”, indicó una de las alumnas. Así se vendieron los 700 ejemplares.
Por su lado, para el docente Luis Luján, uno de los artífices de este libro, lo decidido por el Deliberante significa “uno de los reconocimientos más importantes que pueden tener los alumnos en su trayecto educativo, porque un proyecto que ahonde en la comunidad local y villamariense no es algo que se dé todos los días”.
“Para ellos tener semejante reconocimiento por parte de la ciudadanía es tocar el cielo con las manos”, sostuvo.
Luján subrayó que “son los primeros libros de literatura autóctona en lo que es literatura, el primero en su género como lo fue Leyendas Urbanas, este es de terror y comprende hechos que han sucedido en la ciudad, por lo tanto están muy cercanos al contexto de la gente. Por eso llega tanto”.
