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“Nos vamos conformes, pero aún no está cerrada la serie”

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“Nos vamos conformes, pero aún no está cerrada la serie”
A pura fuerza y astucia, Pratti mete el cuerpo para seguir con la pelota. El 10 de Universitario jugó para ser campeón

UNIVERSITARIO – Tomás Pratti

 

Escribe Daniel Rodríguez

El autor del doblete le bajó los decibeles a la victoria y se mantuvo alerta: “hay que trabajar duro y entrenar bien porque es un rival que tiene muchas armas”, afirmó

Una enorme cantidad de simpatizantes invadían las instalaciones de la Universidad Nacional de Villa María. En medio de tanta multitud, un hombre se destacó: Tomás Pratti. El delantero tuvo una tarde soñada; a pura fuerza y virtud pudo mojar en dos ocasiones y en situaciones completamente disímiles (un tiro libre y una guapeada que nació en mitad de cancha).

Con una victoria en casa, ahora el elenco de la Uni visitará tierras del Argentino con la tranquilidad del deber cumplido como anfitriones. “Es una buena diferencia. No hay que conformarse ni tranquilizarse con esto”, dijo Pratti mientras todos los micrófonos y fotógrafos lo buscaban. Y agregó: “Hay que trabajar duro y entrenar bien porque es un rival que tiene muchas armas”.

Respecto al desarrollo del cotejo, el 10 no dudó en sentenciar que “hubo muchas situaciones de gol tanto de ellos como nuestras. Hubiese sido otro partido si Argentino convertía el penal”.

De cara al próximo encuentro, el goleador de la tarde mantiene la cautela: “Nos vamos conformes con lo de hoy, pero todavía no está cerrada la serie”, advirtió.

 

“Nada dicho”

Otra de las estrellas de la tarde también dialogó con EL DIARIO.

Otorgando seguridad e inclusive deteniendo un disparo desde el punto penal, Simón Mellano agigantó su labor bajo los tres palos del elenco académico. Y también, aunque tuvo una tarde agitada, se manifestó prudente: “El resultado nos deja un poco más tranquilos, pero no está nada dicho”.

Más allá de la faena de los protagonistas hubo otro factor que también influyó demasiado en la gestación del partido y su dimensión futbolística: el viento (las ráfagas llegaron a ser de hasta 30 kilómetros por hora).

“Es lo peor que nos puede pasar a los arqueros”, afirmó el uno, respecto a la cuestión climática. Y agregó: “Se hace difícil para jugar en contra o favor, en los cálculos para sacar la pelota se frena, pero bueno, es parejo para cada uno. Creo que lo aprovechamos (al viento) con el primer gol”.

Simón también tuvo una tarde especial. Tapó tres mano a mano y le detuvo un penal a Mauro Fuente, delantero referencial del Lobo. “Nos sirvió para que no nos empaten”, declaró, siempre con pensamiento colectivo.

El dato de lo ocurrido tras el cobro de la pena máxima, merece un párrafo aparte que Mellano pudo explicarlo: “Pensé que lo iba a patear el Lana (Claudio Díaz), y ahí tenía decidido dónde me iba a tirar; había elegido un palo. Pero cuando Mauro (Fuente) patea se le mueve la pelota por el viento y opté por quedarme parado ya que no iba a tener precisión”.

Asimismo, más allá de su protagonismo, el guardametas reconoció la tarea del resto de sus compañeros: “De todos modos, si nosotros no hacíamos el gol gracias a Tomás (Pratti), no pasaba nada. Todo viene acompañado”, cerró.

 

Uno x uno

Mellano: detuvo un penal, estuvo bien en los cortes y tapó tres mano a mano. Una jornada completa.

 

Picotti: seguridad en el fondo de la cancha y en el corazón de la defensa. En el final del primer tiempo sufrió los embates de Fuentes (delantero de Argentino). Una mano suelta le costó un penal a su equipo.

 

Layús: auxilió bien la última línea por las bandas. Supo manejar la temperatura de una tarde decisiva.

 

Wartel: la pelota no se jugó mucho por su banda. De igual manera supo controlar, relativamente, la evolución ofensiva de la visita.

 

Monetto: una parte fundamental en la creación de juego. Su tarea no pudo destacarse ya que la pelota voló por los aires gran parte del tiempo.

 

Vicario: nunca logró adentrarse en la elaboración de juego. En el segundo tiempo se lo vio apostando más a los roces y a lo físico.

 

Acosta: el volante, autor del segundo gol, no tuvo incidencia directa en el desarrollo del cotejo. De igual manera su trabajo sumó para proteger las bandas.

 

Goroso: dueño de un partido más bien discreto. Su tarea no pasó desapercibida ya que en varias ocasiones supo trepar para colaborar en el ataque.

 

Moyano: dueño de algunos pases filtrados que ayudaron a romper la enorme muralla que había puesto el visitante. Acompañó y fue un punto de apoyo en cada disputa ofensiva.

 

Pratti: tuvo una tarde soñada con dos goles nada más y nada menos que en una final. El delantero se continúa afianzando con su potencia y buena pegada.

 

Barengo: no logró afianzarse y gravitar de manera contundente en el partido. Supo contribuir en los contraataques.

 

  1. Sanabria: relevó a Barengo. No tuvo mucha participación en los 10 minutos que le tocó intervenir.

 

B.Sanabria:ingresó por Goroso cuando el tiempo estaba casi cumplido.

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