Un caso inédito – Su madre falleció y su padre está internado por la misma enfermedad

Tuvieron que quemar toda su ropa, toallas y sábanas por la infección que afectó a la familia. Cuando se recuperen, quedarán a cargo de distintas familias. En pocas horas llegó ayuda de todas partes

El fin de semana que pasó se viralizó un caso en Villa María que conmovió a toda la ciudad.

Ocho hermanitos de entre 3 y 15 años debieron quemar todas sus pertenencias (ropa, sábanas, colchones y toallas) por una enfermedad de la piel que causó la muerte de su madre y que mantiene en vilo al padre, quien se encuentra recuperándose de una infección en el brazo, según se indicó desde el Hospital Pasteur.

Los niños y niñas están bajo tratamiento, pero debieron abandonar la casa y deshacerse de todas sus cosas. Por eso los trabajadores sociales del Pasteur pusieron manos a la obra en búsqueda de una ayuda solidaria.

Ana Merindol, una de las trabajadoras sociales, difundió un audio que recorrió distintos grupos de WhatsApp, contando el caso y se puso al hombro la campaña solidaria.

Contó que ya se sabe cuáles son las familias que alojarán a los chicos una vez que concluyan el tratamiento, pero al ser tantos, no contaban con la ropa suficiente para vestirlos.

En pocas horas, el pueblo mostró su mano amiga.

“Quiero agradecer la inmensa solidaridad de todos los argentinos”, recalcó Ana, que dijo haber recibido ropa, sábanas, frazadas y colchones en buen estado desde diferentes puntos del país, sobre todo de localidades de Córdoba.

La ayuda no solo llegó al número de Ana, sino también a la escuela Dr. José Bianco, donde una de las maestras es el nexo con la familia.

“La verdad que fue impresionante la difusión que tomó este pedido de ayuda para los niños, que lo necesitaban mucho”, afirmó Ana.

En ese sentido, remarcó que “quienes hayan logrado juntar la ropa para esto, ahora la lleven a las iglesias católicas o evangélicas o todas aquellas que siempre ayudan mucho”.

Mientras, muchos rezarán por estos menores que pasaron por la traumática experiencia de perder a su madre, de apenas 32 años, mientras ahora el padre está luchando por su vida.