Pacto fiscal – Dos ediles, una de la oposición y otra del oficialismo, opinaron acerca de la incidencia que podría tener su aplicación en nuestro municipio. La edil del PRO dijo que el municipio va a recibir una porción mayor de coparticipación; la exsecretaria de Economía consideró que no se va a ver afectado por ser sustentable

Mucho se ha hablado -y se habla- del pacto fiscal acordado entre la Nación y las provincias, a excepción de San Luis, pero poco se ha mencionado sobre la significancia que podría tener su aplicación sobre las arcas municipales

Entre otros puntos, el pacto fiscal plantea reducir gastos e impuestos distorsivos, entre ellos Ingresos Brutos, que es uno de los que aportan mayores fondos a la provincia y que es coparticipable con los municipios. A primera vista, con este solo punto se podría pensar que van a ser menores las partidas que recibiría Villa María, pero para echar un poco de luz sobre este tema tan complejo pedimos la opinión de la edil del PRO, Karina Bruno, y de la exsecretaria de Economía e integrante de la bancada oficialista, Verónica Navarro, sobre la incidencia que tendría el pacto fiscal en la ciudad y en qué medida su aplicación puede afectar los ingresos de Villa María.

“Hay varias cuestiones para tener en cuenta, hay un aspecto general, que es un marco provincial. Córdoba acordó puntos específicos que tienen que ver con su Caja de Jubilaciones, con el reconocimiento de un porcentaje de aquello que se reclamaba por el Fondo del Conurbano, compromisos de reducción de impuestos distorsivos. Este es el marco general que en principio le implicarían ingresos extra cercanos a los 3 mil millones de pesos, de eso más de 500 millones serían para coparticipación a municipios”, explicó Bruno.

“Los intendentes de nuestro espacio pretendían que la coparticipación se ampliara a todos los ítems, pero el Gobierno provincial sostuvo que algunos, como el Fondo del Conurbano, no sean coparticipables, pero al menos ronda más de 500 millones de pesos. Esto va a significar para Villa María un aumento de los fondos que recibe naturalmente por los fondos por coparticipación, es decir que en materia tributaria o fiscal el aumento de la coparticipación va a ser mayor”, señaló.

“Después están los aspectos particulares por los que cada provincia debe hacer su propio pacto fiscal municipal, por llamarlo de alguna manera, es decir, trasladar este compromiso nacional a los municipios con la exigencia de ir disminuyendo la carga tributaria y eliminando los impuestos distorsivos. Córdoba anunció a principio de año la baja de 1.5 punto de Ingresos Brutos y se pretende que eso se refleje en cada municipio, muchos son autosustentables o equilibrados fiscalmente porque han ido creando sobretasas, como es para nosotros el OIM, esto que es tan discutido y distorsivo. Ahora viene la etapa de acomodamiento del Gobierno provincial con los municipios para que de a poco vayan disminuyendo la carga tributaria para hacer más competitivo el sector productivo”, indicó la edil.

“Entonces es trasladar lo que se está generando a nivel nacional con cada provincia, cada una debe hacerlo con sus municipios. Hay dos consecuencias macro o generales, una es que va a aumentar la porción de coparticipación al municipio y la otra es ir acomodando cada tasa municipal, ir disminuyendo lo distorsivo, para adecuarse al régimen general de ir otorgándole mayor productividad al sector aliviando la carga tributaria”, sintetizó.

“Estos serían los impactos que puede tener a corto plazo el pacto fiscal. Después se irán desarrollando otras cuestiones, porque en el pacto fiscal se establecieron metas progresivas, Córdoba bajó Ingresos Brutos, esperemos que los municipios la imiten bajando las sobretasas”, agregó.

“La Nación compensa esa baja redistribuyendo fondos para que las provincias comiencen a alivianar la carga fiscal a sus habitantes en los impuestos más distorsivos, como es el de Ingresos Brutos. Si bien este impuesto que es coparticipable se reduce, esto no significa que se vaya a achicar la distribución a los municipios porque va a haber otra masa coparticipable para compensar, a la vez, cada municipio va a tener que ordenar sus cuentas e ir eliminando progresivamente las tasas distorsivas”, remarcó.

En relación a que las provincias desisten de sus reclamos judiciales a la Nación por fondos adeudados, Bruno sostuvo que “Córdoba firmó el año pasado el acuerdo por el salvataje financiero de la Caja de Jubilaciones, se fueron cumpliendo los distintos auxilios económicos de la Nación y en el pacto fiscal se terminó de redondear lo que Nación se había comprometido a aportar para sanear el déficit que había originado la caja con la provincia”.

“Por el Fondo del Conurbano Córdoba había iniciado un proceso judicial ante la Corte Suprema, como lo hizo Buenos Aires para que se vuelva a la distribución original, cuando se arregló cómo se compensa a Buenos Aires coparticipando sin que se desfinancie, las provincias desistieron de las acciones judiciales acordando estos porcentajes que cada una va a ir recibiendo”, precisó.

Equilibrada y sin deuda

“El pacto fiscal fue firmado entre la provincia y la Nación, no ha bajado a los municipios tal como está planteado. Si hacemos la suposición de que este pacto bajara tal cual a los municipios, en el caso de reducir impuestos distorsivos, como es Ingresos Brutos, los municipios no van a resignar ingresos si no viene una contraparte”, subrayó Navarro por su parte.

“De todas formas Ingresos Brutos, que tiene una alícuota de hasta el 8%, no es lo mismo que el seis por mil de la tasa municipal. Ese impuesto es el principal ingreso que tiene la provincia, al bajarse, la Nación suscribió un compromiso con las provincias de resarcir ese porcentaje que se baja mediante títulos, obras y otros fondos, es decir, la provincia no resigna nada”, añadió.

“La aplicación del pacto fiscal no afectaría porque esta ciudad es equilibrada y no tiene deuda, este municipio no tiene gastos mayores al ingreso corriente, logramos hacer una estructura económica, financiera, tributaria que se sostiene, una autonomía económica que le permite al intendente ser autónomo políticamente. Nosotros tenemos asegurado el funcionamiento de la administración municipal sin deuda, ahorramos e hicimos obras con fondos propios, como la Tecnoteca y el Centro Cultural Comunitario Leonardo Favio, porque fuimos eficientes y no tenemos deuda. Por lo tanto, Villa María está en una posición diferente a otras municipalidades que necesitan adelantos de coparticipación, o préstamos de la Nación, para pagar sueldos, obras o contratos. Estamos en otra posición para negociar y gestionar recursos y obras”, aseguró.

“El nivel de ingresos no variaría para abajo, pero debería hacerlo para arriba, o sino debería ser el que tenemos y que siga evolucionando por inercia de los contribuyentes: más loteos, casas, autos, comercios, que mueven la base imponible. Tenemos un crecimiento propio e independencia económica, diversificación productiva y económica que hace que la ciudad se sostenga y se mantengan sus ingresos”, afirmó la edil.

“En todo caso sí va a afectar a aquellos municipios que necesiten de los fondos coparticipables para pagar los sueldos, por ejemplo”, consideró Navarro.

“En definitiva, si el pacto fiscal se cumpliese a rajatabla no afectaría los ingresos actuales de Villa María, aunque creo que deberían ser más. En mi opinión, creo que habría que plantearle a la Provincia mayores ingresos, la ciudad no tiene ingresos por obras, porque las promesas de obras no las veo”, señaló.

“De todo lo que los contribuyentes de Villa María aportamos a la Nación y a la Provincia a través de IVA, Ganancias, Bienes Personales y todos los impuestos, ¿dónde están las obras? ¿Cuánto nos están debiendo la Nación y la Provincia, cuánto ha vuelto en obras?”, se preguntó.

“Desde 2011, que murió Néstor Kirchner no tuvimos ingresos importantes en la ciudad para obras nacionales, la única obra que se hizo fue el puente, que estaba atrasada”, apuntó.

“Lo que tenemos que pedir siempre es que Nación y Provincia devuelvan en obras o en infraestructura y otra de las cosas que los municipios tendrían que recibir es el goteo”, finalizó.

Puntos principales del acuerdo entre Nación y provincias

Entre los puntos principales de este pacto se obliga a las provincias a reducir Ingresos Brutos e Impuestos a los Sellos por el 1,5% del PIB en los próximos cinco años, mantener gastos corrientes constantes en términos reales, adherir al proyecto de reforma previsional y desistir de los juicios por deudas contra el Estado nacional, que suman unos 800 mil millones de pesos por los cuales el Gobierno les dará un bono de acuerdo con sus respectivos coeficientes de coparticipación. También sancionar la ley de responsabilidad fiscal para municipios.

Que cambia en provincias y municipalidades

En una reseña de las modificaciones que trae el Pacto Fiscal, el contador Guillermo LoCane, señaló:

– Establecer un régimen legal de coparticipación de recursos provinciales con los municipios.

– Establecer un régimen legal de responsabilidad fiscal, similar al nacional, para sus municipios, impulsar que éstos adhieran y controlar su cumplimiento.

– Promover la adecuación de las tasas municipales aplicables en las respectivas jurisdicciones de manera tal que se correspondan con la concreta, efectiva e individualizada prestación de un servicio y sus importes guarden una razonable proporcionalidad con el costo de este último.

– Crear una base pública, por provincia, en la que consten las tasas aplicables en cada municipalidad (hechos imponibles, bases imponibles, sujetos alcanzados, alícuotas y otros datos relevantes) y su normativa.

– Impulsar un sistema único de liquidación y pago de tasas municipales aplicable a cada provincia y a la CABA.