Después de vencer al último campeón (Alem), el Aurinegro de calle Rucci derrotó como visitante 3-1 a San Lorenzo de Las Perdices y alcanzó a Colón como escolta de la Zona C

Escribe Norberto Guerrero

Quería demostrar que la victoria de la fecha pasada ante el último campeón (Alem) no fue una casualidad y vaya si lo logró. Unión Central venció 3-1 como visitante a San Lorenzo de Las Perdices, segundo de la Zona D, y alcanzó la línea de Colón para ser uno de los escoltas del León villanovense en la Zona C.

Desde el comienzo del encuentro el Aurinegro de calle Rucci mostró que de ninguna manera fue a cuidarse en el Bosque perdiceño y fue así que se puso rápidamente en ventaja; cuando en el cronómetro habían transcurrido apenas 50 segundos desde el pitazo inicial, el delantero Maximiliano Bustos quedó mano a mano con Emiliano Rodríguez y definió por abajo del arquero para estampar el precoz 1 a 0.

“Baldazo” de agua helada para un dueño de casa que no pudo reaccionar en lo inmediato y siguió sufriendo ante un Unión que, aprovechando su estado de desconcierto, lo continuó atacando con el afán de engrosar la diferencia en el tanteador.

Iban 10’ cuando Rodríguez ganó en un mano a mano con Elián Geremía y 15’ después llegaría la segunda emoción de la tarde, Maxi Bustos conectó de cabeza un centro que recibió desde la izquierda, el balón rozó las endebles manos de Rodríguez y cruzó la línea de meta para convertirse en el 2 a 0 de los dirigidos por Marcelo Zucotti.

Para la alegría visitante y la desazón local, Unión ganaba con claridad y recién después de la segunda conquista le aplicó un freno a su ritmo demoledor, retrasándose en el terreno de juego y cediéndole el dominio del balón a un San Lorenzo que, sin embargo, no supo cómo inquietarlo hasta los 41’, cuando Jonathan Silva quedó cara a cara con Dante Alanis y sacó un disparo que se desvió en el cuerpo del guardameta antes de llegar al fondo de la red, en lo que significó el descuento perdiceño (2 a 1).

El segundo tiempo fue “aspero” y muy disputado, aunque con un casi constante ida y vuelta que sin embargo no se tradujo en situaciones concretas de riesgo.

San Lorenzo iba desesperado en busca del empate y Unión quería estar bien ordenado para no sufrir sobresaltos.

En ese contexto, la visita se encontró a los 30’ con un penal con el que logró definir el pleito a su favor. Desde los 12 pasos ejecutó el recientemente ingresado Mayco Basualdo y anotó lo que terminaría siendo el definitivo 3 a 1.

Cinco minutos después, ambos se quedaron con un jugador menos cuando el árbitro Luis Pérez expulsó al delantero Jonathan Silva y al arquero Dante Alanis por agredirse mutuamente. Más allá de eso, el hecho llamativo fue que Unión no tenía entre sus relevos a un arquero, por lo que de allí hasta el final terminó calzándose el buzo de arquero Elían Geremía.

Antes de que cerrara el telón los dos tuvieron sus chances claras, por el lado de San Lorenzo, Lucas Bolatti estrelló un tiro en el palo, mientras que del lado de los villamarienses un disparo de Basualdo se estrelló en el travesaño.

Ganó Unión Central y demostró que el triunfo de la fecha pasada ante el actual campeón no fue una casualidad. Ayer lo hizo en una cancha siempre difícil como lo es el Bosque, ante un San Lorenzo que no pudo recuperar la condición de puntero que el viernes por la noche le había arrebatado Atlético Ticino al superar por 4-3 a Colón.