Denuncian que no respetan el precio de la garrafa social, que cuenta con subsidio para que resulte más accesible

Llega el frío y se calientan los ánimos en los numerosos consumidores de gas envasado que acuden a la garrafa social en el barrio Evita (ex-Industrial), pues en las últimas horas al parecer hubo algunos malentendidos entre los propietarios de la planta de gas y los clientes.

Así lo manifestaron algunos vecinos que el pasado viernes acudieron a comprar garrafas de a pie, en bicicleta, en moto y, los menos, en automóvil: alrededor de 40 personas se agolparon frente a la planta, unos con una, otros con dos e incluso algunos con tres garrafas vacías y se encontraron con que el envase de 10 kilos del preciado combustible costaba 120 pesos; monto que supera ya largamente los 97 pesos que debería costar.

La voz de una vecina

Paula, una de las vecinas, en diálogo con EL DIARIO:

“Sin embargo, decidimos comprarlas igual, porque aún así costaban menos que en el almacén, donde una garrafa vale 150 pesos. Pero la gente se empezó a quejar, porque además comenzaron a racionar la venta, a vender una por persona; argumentando que lo hacían porque mucha gente revende las garrafas”, contó Paula.

“Eso es falso. Una garrafa dura 15 días como mucho, usándola con una pantallita para calentar. Y ante las protestas de los clientes subieron el precio a 170 pesos y a los que nos quejábamos no nos vendieron gas. Y así se lo dijeron a mi marido: ‘Yo a vos no te vendo porque estás sacando fotos y filmando’, le dijeron a mi marido”, agregó la vecina, que nos hizo escuchar el audio de esa conversación registrado con su teléfono celular, con el mismo que tomó fotografías de la situación, una de las cuales se publica en esta página.

“A todo esto, más de la mitad de la gente se fue sin gas. Y nosotros tuvimos que irnos para que le vendieran a los demás vecinos.

Finalmente, al parecer, terminaron vendiéndole una garrafa por vecino a un precio muy diferente al que debe ser.

Paula y su marido compraron la misma garrafa social en otro punto de la ciudad, a 97 pesos, y en esa boca de expendio le informaron que la garrafa social está subsidiada, por eso debe costarle al público ese monto.

Por otra parte, pudo saberse que este mismo problema se registró la semana pasada en Bell Ville, donde incluso los vendedores convocaron a la Policía ante la queja encendida de los usuarios.