Sebastián Polliotto recibe y asesora a los latinoamericanos que llegan a Europa sin papeles
Sebastián Polliotto se dedica a colaborar con las personas que llegan desde Latinoamérica a Italia, para tramitar en Europa la ciudadanía, ofrecer alojamiento o cursos de idioma. Todo empezó por su experiencia personal que le dio conocimientos que hoy quiere compartir
Era un hombre exitoso. Se había recibido en la UTN Villa María de ingeniero en Sistemas y trabajaba como profesional en Córdoba capital. Pero algo le faltaba. Soñaba con estar en Roma, un poco por su ascendencia gringa y, otro poco, porque es amante de la historia y quería ver de cerca esas construcciones que la reflejan. Así fue que un día, sin mucha plata, sin saber italiano y sin conocer a nadie, decidió irse de Argentina. “El día antes del viaje mi hermano me dijo que una exnovia tenía una tía que vivía en Parma. La contacté y estoy muy agradecido porque allí me pude alojar los primeros meses”, relató Sebastián Polliotto, un villamariense radicado en Italia.
Pese a esa ayuda, nada fue fácil. En primer lugar, los 300 euros que llevaba se le acabaron el primer mes. “Viví nueve meses sin plata, realmente sin plata”, contó a EL DIARIO.
Caminando por Parma, conoció gente que le fue abriendo las puertas. “Conseguí trabajar como voluntario en Cáritas, donde servían comida para gente necesitada. No te imaginás la calidad de la comida, con opciones de entrada, plato principal y postre. Pedí si podía llevarme los táperes y así fue que empecé a alimentarme bien”, relató.
También ese trabajo le permitió aprender rápidamente el italiano y fue venciendo la barrera de la comunicación. “El problema era que yo no tenía un lugar para fijar como residencia y tampoco era ciudadano, así que la mayoría de los trabajos estaban vedados para mí”, explicó.
Apasionado por el fútbol conoció, también en Cáritas, a gente vinculada a clubes que lo sumaron para los torneos italianos. “Estaba feliz, comía, tenía donde dormir y, además, jugaba al fútbol”, explicó.
Pero para que eso fuera formal debía ser ciudadano. Hizo el camino de todos los extranjeros, golpeando puertas de oficinas, conociendo la reglamentación italiana y, finalmente, obtuvo la ciudadanía tramitada en la península.
Aprendizaje
Eso fue un aprendizaje importante para Polliotto y decidió empezar a compartirlo. Tenía un blog en el que escribía “cualquier cosa”. Es más, el blog se llamó “1000 cosas interesantes.com”. “Me leían 30 a 40 personas, pero cuando empecé a escribir sobre cómo se hacen los trámites de ciudadanía, pasaron a 2.000 lectores”, explicó.
Había llegado a Italia en 2014 y con un año transcurrido, ya tenía un trabajo en un bingo de Roma, podía alquilar y vivir como un ciudadano europeo.
“Así fue que ofrecí mi casa a los que recién llegaban y empecé a ayudar a tramitar la ciudadanía en Italia”, explicó.
Todo lo aprendido lo volcó en un libro que se puede descargar gratis por Internet y, además, conformó un equipo con abogados, traductores, empresas de viaje, etcétera, que permiten ofrecer servicios varios a los latinoamericanos en el país que eligió para vivir.
“Nosotros a través del Facebook, la página y todas las redes, ofrecemos toda la información. Volcamos la experiencia personal para advertir qué es lo que no hay que hacer -como me pasó a mí- y orientamos sobre cómo se hacen los trámites para acceder relativamente rápido a la ciudadanía italiana. Todo eso es gratis; pero si alguien quiere que lo acompañemos, cobramos por eso. Además, ofrecemos alojamiento, el pasaje, cursos de italiano y tours para que conozcan el país durante los meses que esperan la aprobación de la ciudadanía”, relató.
Polliotto está actualmente en Argentina dando charlas “a sala llena y con gente que se quedó afuera” en Córdoba, y el lunes será la oportunidad de ofrecer la charla en su ciudad natal: Villa María. Será a las 19.30 en el Centro Cultural Leonardo Favio.
El profesional que dejó Córdoba para cumplir un sueño, hoy, a sus 35 años, trabaja en algo que le apasiona y que, además, le permite abrir las puertas a latinoamericanos que buscan un horizonte en Europa.
“En el último año ha crecido mucho la cantidad de gente que se va: personas solas o familias enteras. Están viajando entre 100 y 200 personas por mes, según la época del año, de las cuales el 80% son argentinos”, concluyó.
Anécdotas en Roma – Hasta al Papa le ofreció hacer los papeles
Una de las experiencias más conmovedoras que vivió en Roma fue el acercamiento con el Papa Francisco
“Conocí a un secretario porque compartimos algunas reuniones y después fui varias veces a las audiencias de los miércoles, donde hay un lugar reservado para 50 argentinos”, dijo. “Transmite una paz increíble y te permite hablar tranquilo, contarle cosas. Me enteré que los padres de él son, al igual que mi bisabuelo, de Pinerollo. Le dije qué hacía en Italia y me contó que él nunca se hizo la ciudadanía italiana, que viajaba por el mundo con el Pasaporte argentino. Por supuesto que le ofrecí mis servicios”, concluyó.
Mañana a las 19.30, para todos los que deseen conocer cómo se tramita la ciudadanía en Italia, Polliotto estará dando una conferencia en el Leonardo Favio.
