En el día de ayer, funcionarios municipales mantuvieron una reunión con un grupo de vecinos que son propietarios de caballos. En dicho encuentro se analizó la problemática de la presencia de animales sueltos en lugares que pueden resultar peligrosos para los vecinos y ocasionales automovilistas que pasan por la ciudad. El municipio, junto a los vecinos propietarios de equinos acordaron trabajar de manera conjunta para evitar situaciones de conflictos que puedan generar incluso accidentes.

Además, los funcionarios anticiparon las posibles sanciones si los caballos andan deambulando por las calles o sectores aledaños a la ciudad. El defensor del Pueblo Nicolás Morsila expuso que la presencia de este tipo de animales sueltos es uno de los reclamos más recurrentes de los vecinos.

Por último, se informó que, según el registro realizado a la actualidad, se contabilizaron más de 30 caballos sueltos en diferentes sectores de la ciudad.