Las imágenes proyectadas de lo que será la plaza Centenario remodelada, aunque conservando su estilo de origen – La larga historia de este espacio verde
Una de las arquitectas del municipio dijo que actualmente presenta un mal estado. De la mano de Rubén Rüedi, EL DIARIO repasa la rica historia del lugar que llegó a llamarse Eva Perón. En las redes sociales llueven las críticas por la decisión: vecinos consideran que hay otras prioridades
El Gobierno de Martín Gill esperará que el Concejo Deliberante le dé el aval para tomar un fondo especial de la Provincia que le posibilita a los gobiernos locales a hacer un tipo de obras, como adelanto de coparticipación, y devolverlo en cuotas sin interés. Al dinero lo quiere para remodelar integralmente la plaza Centenario, pero con base en su estilo de origen.
Como se sabe, el proyecto fue presentado el jueves pasado. Se invertirán 15 millones de pesos (ver Las críticas).
EL DIARIO consiguió ayer los renders, es decir las imágenes creadas desde un modelo, que permiten adelantar cómo quedará el espacio verde ubicado en pleno centro de la localidad.
Los pormenores de la obra fueron difundidos en la edición del 25 de Mayo. Entre otros datos, se conoció que se volverán a colocar los tradicionales bancos de madera, que se están restaurando y volverán a funcionar las cuatro fuentes.
Habrá una nueva instalación eléctrica, se incorporarán tomas para eventos públicos, bebedores “en dos o tres puntos” y uno o dos puestos de carga de celulares con energía solar. Todo el sector tendrá tecnología led.
Génesis y el estado actual
Jacqueline Miraldes, del área de Proyectos de Obra Pública del municipio, subrayó que la Centenario “es un paso obligatorio, un punto de encuentro” y que tiene “reconocimiento en la memoria colectiva”.
Destacó que es plaza principal, que fue el Mercado Colón y que en 1910 se la llamó así precisamente por el centenario de la Revolución de Mayo.
La profesional apuntó que actualmente su sistema de iluminación “es obsoleto, con tecnología antigua”.
Habló de fisuras en el sector, de una “iluminación escasa”, de algunas iluminarias “tapadas por árboles” y de “caminerías levantadas, hundidas por el desgaste y las raíces de los árboles”.
Describió que las fuentes no funcionan y “están afectadas por el paso del tiempo”, con roturas de muchas piezas.
“Las rampas están dañadas e inseguras”, acotó. Hay veredas levantadas y cordones de canteros rotos y faltantes en algunos casos.
La historia
El historiador Rubén Rüedi indicó en uno de sus libros que en el plano fundacional de Villa María trazado en 1867 solo figura esta plaza. Fue recién a partir del trazado del plano de 1883 que se agregaron tres plazas más.
A la Centenario se la conoció en tiempos fundacionales como la Plaza de las Carretas, porque “bajo la arboleda que cubría el terreno se instalaban las carretas que esperaban la llegada o la partida de los trenes, para luego recorrer el poco trecho hasta la estación, cargar o descargar mercaderías y emprender los largos viajes hacia sus destinos”, describió el autor.
Luego fue la Feria de Mulas, porque se comercializaba el ganado mular que después era trasladado al norte argentino.
Rüedi recordó que también se la llamó Posta del Centro y Rincón de Doña Esperanza, “por ser el apacible sitio de largas esperas y lugar donde los viajeros a caballo o en carretas se detenían a descansar”.
La historia de este emblemático punto villamariense cuenta que en 1888 se inició el mercado Colón, el que funcionó hasta 1928. “Coexistió con una precaria plaza que en 1905 se la conocía como Viñas”, rescató el citado historiador. Viñas, claro está, por el primer intendente.
Se la denominó Centenario el 14 de mayo de 1910, por el siglo de nacimiento de la Patria. Se le hicieron mejoras en ese momento, las que quedaron hasta cuando se demolió el mercado Colón en 1928.
Años después, el por entonces intendente Eugenio Parajón Ortiz convocó a Francisco Salamone, un famoso y distinguido arquitecto, quien fue el encargado de darle otra impronta, la que permanece en parte hasta la actualidad. Con el sello de ese prestigioso profesional fue inaugurada el 12 de octubre de 1935.
Rubén Rüedi graficó que en las fuentes, Salamone “habría reproducido las imágenes del filme Metrópolis, película futurista realizada por el alemán Fritz Lang”.
Este punto neurálgico local fue escenario de diversos acontecimientos históricos. Por caso, habló Juan Domingo Perón (por entonces coronel) en 1944 en lo que fue su única visita a Villa María.
Los nombres
Como se dijo, se impuso el nombre Centenario en 1910. Sin embargo tuvo distintas designaciones.
En agosto de 1941 pasó a llamarse General San Martín. Duró poco: en 1944 la denominaron 4 de Junio, por la revolución de un año antes.
También fue plaza Eva Perón, ya que tras su muerte así lo decidieron los concejales, pero perdió esa identidad cuando fue derrocado Juan Perón.
Su trayectoria es de idas y vueltas, porque recuperó el nombre Centenario hasta que en 1960 -precisó Rüedi- se le impuso el nombre de San Martín, lo que duró poco.
El creador – Salamone
Salamone diseñó la plaza Centenario y también el Matadero Modelo Municipal.
Este arquitecto se hizo famoso cuando en 1936 el gobernador de Buenos Aires, Manuel Fresco, lo llamó para construir grandes obras en pueblos pequeños de esa geografía provincial.
Generó mataderos, palacios municipales de imponente arquitectura y cementerios en muy pequeños poblados.
Rüedi explicó que en Villa María también tuvo a su cargo la ornamentación floral de las demás plazas, canteros de bulevares, la construcción de una plazoleta frente al cementerio, una glorieta sobre bulevar España y llegó a proyectar el Palacio Municipal sobre la Centenario, algo que no se logró.
Por la inversión: Las críticas
En las redes sociales de EL DIARIO hubo muchas críticas por la decisión oficial de invertir 15 millones de pesos en la remodelación de la plaza.
Ileana dijo que esperaba que no la llevara adelante la misma arquitecta que “hizo los megahormigueros de la costanera”. Para Ivana es “una pérdida de plata y en los barrios seguimos con las calles de tierra”. Chelo pidió que devuelvan los bancos originales. Federico señaló: “Siguen con la tradición de meterle plata a la costanera y al centro, y los barrios de la periferia que revienten, 24 años esperando pavimento en barrio Los Olmos”.
Por su lado, Ana hizo especial referencia al mal estado de las calles. “Solo le ponen arena y arreglan cada tanto. Cuando llueve ni hablar”.
En tanto, Laura pidió “que sean devueltos los bancos de la plaza y las rejas del Polideportivo”.
Horacio preguntó por qué no pavimentan las calles de tierra.
Hay muchos más, todos en contra.
También se la llamó Posta del Centro y Rincón de Doña Esperanza.
